“Sí, definitivamente”, asegura Matías Anuncibay. El referente de Maldita Ramona se refiere al quiebre que significa para la historia de la banda la trilogía de EP’s Raíz, de la que hace pocos días se dio a conocer “Introspectivo”, la segunda parte.

En plena pandemia, reinventarse, fue un proceso en el que el grupo de rock marplatense se vio inmerso mientras se encontraba en proceso creativo. Cambios, vivencias y sentires personales y grupales de los integrantes de la banda, los sumergieron en una nueva búsqueda que Anuncibay describe, en una nota con LA CAPITAL, como “un sonido más orgánico, mucho más oscuro y directo, basado en guitarras y bajo”.

Así es el innovador “Introspectivo”, resultado de meses alejados de los escenarios, cambios en la formación y ese tinte de “transformación y renacimiento” al que aluden las canciones. A Matías Anuncibay (voz), Maxi Gandola (guitarra y coros) y Nahiara Anuncibay (voz, teclado y coros), se sumaron Lucas Russo (batería) y Dante Scrosoppi (bajo). Grabaron en su estudio, Palo Santo, bajo la guía del productor marplatense Daniel Susperreguy.

“Hoy tocar es un hecho de rebeldía contra el sistema, los músicos deberíamos rebelarnos“, aseveró Anuncibay en la charla en la que también reconoció que “Raíz nos llevó a una zona de no confort, tan movilizante que ni la formación original sobrevivió a ella”.

La trilogía se completa con un trabajo gráfico creado por la artista marplatense Cintia Delgadillo.

-¿Cómo se ensambla el tríptico musical con el aspecto de diseño? ¿Lo fueron trabajando en conjunto?

-El trabajo gráfico fue ideado en base a un pedido a Cintia. Tomamos la decisión de hacer un gran dibujo general a modo de tríptico, en donde cada uno de esos tres dibujos tendría un sentido en sí mismo e ilustraría cada uno de los EP’s. La idea fue ir plasmando las energías que influyeron en cada etapa creativa de este último trabajo y a su vez realizar un paralelismo con la historia de la banda, honrando, para empezar, su raíz, su comienzo. Fue muy loco que sin premeditarlo ocurriera a su vez todo esto de estar encerrados por la cuarentena, lo cual se relaciona mucho con esto de la raíz, la oscuridad, la incomodidad… hasta que brota la semilla… Raíz nos llevó a una zona de no confort, que fue tan movilizante que ni la formación original sobrevivió a ella. Las letras y la música fueron atravesadas por circunstancias personales que modificaron mucho nuestras vidas, separaciones, divorcios, crecimiento… y ello tiñó la música.

-Creció en protagonismo la voz de Nahiara, en este tiempo ¿Fue dándose naturalmente este proceso?

-La voz de Nai durante estos años creció a la par del vivo y su edad. Nai tiene 18 años y la mitad de ellos fueron en la banda.

-¿Cómo se siente ella en este proyecto que, en realidad, vive desde muy chica?

-Sin dudas, la experiencia de estar en una banda desde tan chica no es algo usual. Es algo que le deja huella y ha sido causa de muchas increíbles vivencias, desafíos, viajes, anécdotas, crecimiento artístico y personal; el nuevo tema de Nai, que está en el tercer EP, es una gran muestra de ello.

-¿Qué expectativa tiene para su futuro con esta gran experiencia, desde lo técnico y desde lo artístico con su poderosa voz?

-El futuro es incierto para cualquiera, y para una persona de 18 años, como Nai, es una explosión de ideas, hormonas, cambios, deseos y sueños y en ese proceso está plenamente inmersa. Las expectativas de ella creo están en seguir siendo creativa y feliz, en lo que decida, ya sea la música o cualquier otro aspecto.

-¿Cómo vivieron las fechas presenciales que pudieron hacer en este contexto de restricciones por la pandemia? ¿La situación actual los motiva o les permite pensar en planificar fechas para esta temporada?

-Las vivimos con ansiedad, porque somos una banda para el vivo. Creemos que hay una gran hipocresía generalizada donde la gente no puede juntarse en un bar a ver una banda por la distancia social (con el impacto económico y cultural que conlleva) y a los días se autoconvocan masivamente en un evento deportivo o en una protesta. No quiero decir que la protesta no sea justa y necesaria, pero sigue haciéndome mucho ruido la incongruencia. Somos una incógnita social a resolver los argentinos. Queremos salir a tocar y salir de gira nuevamente, estamos preparados, solo faltan las fechas. Hoy tocar es casi un hecho de rebeldía contra el sistema, y los músicos deberíamos rebelarnos.

Mirá el video de “Introspectivo” acá: