Un hombre fue asesinado de un balazo en el tórax cuando intentaron robarle la camioneta mientras estaba tomando mate acompañado de su nieto de 7 años en la puerta de su casa de la localidad bonaerense de Caseros, en el partido de Tres de Febrero, informaron hoy fuentes policiales y judiciales.

Por el hecho, esta madrugada fue detenido un joven de 20 años, en tanto que la Policí­a se encontraba en la búsqueda de un cómplice en base a imágenes de cámaras de seguridad municipales y otras pruebas obtenidas.

Todo sucedió el viernes pasado a las 19.30 cuando la ví­ctima, Ramón Ricardo Santander (58), un colectivero jubilado que ahora se dedicaba a la venta de hielo, estaba con su nieto en la puerta de su domicilio, ubicado en Santiago Zanella 2983, en el barrio Villa Pineral de la mencionada localidad del oeste del conurbano.

De repente, fue sorprendido por al menos dos delincuentes armados que intentaron robarle su camioneta Ford Eco Sport blanca, estacionada allí, pero por motivos que se investigan no pudieron llevársela.

Según las fuentes, a pesar de que Santander no se resistió y sólo hizo algún movimiento para proteger a su nieto, los ladrones realizaron tres disparos, uno de los cuales le impactó en la región torácica y cayó gravemente herido.

“Revisaron toda la camioneta, parece que no pudieron ponerla en marcha y no se la llevaron. Después, en la otra cuadra le tiraron un tiro a una gente de una moto, no le pudieron pegar y se llevaron un auto al voleo”, relató Ricardo, hijo de la víctima.

“Al muchacho del auto también le gatillaron y no salieron los tiros, sino tendríamos dos víctimas. Lamentablemente le tocó a mi papá, lo mataron como a un perro”, agregó el muchacho en referencia a otro intento de robo de un VW Gol que luego fue hallado a 14 cuadras de allí, sobre Paunero, entre Pedro de Mendoza y Alexander Fleming.

El hijo de Ramón explicó que en el momento en que fue abordado, su padre estaba con uno de sus nietos enseñándole a andar en bicicleta y tenía la puerta de calle abierta, pero no entiende por qué le efectuaron tres disparos.

“Para mi quiso proteger al nene porque él atina a correrlo y habrán pensado que tenía un arma y le tiraron”, especuló el joven.
En tanto, Teresa, esposa de la víctima, dijo entre lágrimas que ella estuvo con su marido hasta minutos antes de que llegaran los asaltantes.

“Yo subí (al primer piso de la casa) a dejar el termo y el mate porque estábamos por ir al supermercado y de repente escucho los tiros. Cuando bajé, ya estaba muerto”, relató la mujer, que descartó las versiones acerca de que el crimen haya estado vinculado con un “ajuste de cuentas”.

Al respecto, dijo que su esposo, que había dejado de trabajar en la línea 105 hace un año, “era una persona de bien, intachable, el mejor abuelo, el mejor padre y lo único que sabía era trabajar”.

También contó que el fin de semana próximo tenían previsto viajar a Presidencia Roque Sáenz Peña, Chaco, para visitar a familiares, ya que su marido era oriundo de esa ciudad.

Tras recibir el disparo, uno de los hijos de Santander intentó cargar a su padre en su auto para llevarlo a un centro médico, pero finalmente fue trasladado en un móvil del Comando de Patrullas de Tres de Febrero al Hospital Carrillo, en Ciudadela, donde falleció a consecuencia de la herida recibida.

Los vecinos y amigos de la familia de Santander se juntaron anoche frente a la casa para protestar y pedir seguridad y la presencia de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich y de la gobernadora bonaerense, Marí­a Eugenia Vidal, porque para ellos “Villa Pineral es una zona liberada para los delincuentes”.

Tras el hecho, esta madrugada, efectivos de la Jefatura Departamental Tres de Febrero detuvieron a un joven de 20 años como sospechoso del crimen, mientras que el otro permanecía prófugo aunque ya fue identificado, dijeron voceros del caso.

La investigación está a cargo de la comisarí­a de Villa Pineral y de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) en turno del Departamento Judicial de San Martí­n, que caratuló el hecho como “homicidio”.