El expediente judicial que investiga una supuesta asociación ilícita mixta liderada en Mar del Plata por el exjefe departamental José Luis Segovia tendrá el martes y el jueves dos jornadas claves, ya que el juez Daniel De Marco deberá resolver la prisión preventiva de los imputados y un pedido de recusación contra el fiscal Marcos Pagella.

Luego de una semana convulsionada, en la que la defensa de Segovia pidió que ninguno de los fiscales de Mar del Plata siga al frente de la causa y en la que se conocieron más detalles de la acusación, llegan días decisivos en el avance procesal de, tal vez, le episodio judicial más trascendente de los últimos años en términos institucionales.

Segovia, que en marzo había cumplido 3 años al frente de la Jefatura Departamental de la Policía Bonaerense, convirtiéndose así en el jefe de policía con mayor permanencia, está imputado de ser el organizador de una banda que recaudaba dinero de los “arbolitos” y manipulaba investigaciones de asaltos graves. Aún cuando en las últimas décadas Mar del Plata ya había tenido otros dos jefes departamentales imputados de delitos, ninguno había estado detenido. Justamente, este domingo se cumple un mes desde que Segovia fue aprehendido en la misma jefatura, de Gascón y Entre Ríos, y desde entonces permanece en prisión.

El fiscal Pagella solicitó la prisión preventiva por entender que Segovia liderada esa banda, que el policía en actividad Gastón Moraña era uno de sus cobradores, mientras que otro era el expolicía Javier “El Pelado” González. También la investigación determinó, en esta primera instancia, que el policía federal, Nicolás Rivademar, cobraba el “permiso” de trabajo de los vendedores callejeros de dólares. En tanto, los otros integrantes de la organización eran el expolicía Christian Holtkamp y el cambista Jorge “Russo” Toletti. El último miembro es el abogado Lautaro Resúa.

El juez De Marco debe definir el martes si todos siguen detenidos, al que se especula que sucederá dada la prueba exhibida por Pagella en su escrito de 283 fojas. Allí se detalla una gran cantidad de vínculos personales, reuniones y comunicaciones telefónicas que explican parte de la hipótesis. Por eso se cree que, a excepción de Rivademar (tiene arresto domiciliario), los demás imputados continuarán detenidos por el resto del proceso.

Fiscalía pide prisión preventiva para Segovia y los demás imputados

El jueves, en tanto, el juez de garantías tendrá que expedirse sobre la recusación planteada por Martín Bernat, defensor de Segovia. Bernat, también en un extenso escrito, acusó a Pagella y al ayudante fiscal Javier Pettigiani de haber caído en una pérdida absoluta de la objetividad respecto de Segovia, al proferir malos tratos, hostigamiento, intimidación y persecución a dos testigos, ambos policías “del riñon” del exjefe departamental. La pretensión de Bernat es que, atento a que Pagella es fiscal general adjunto y en consecuencia superior jerárquico a todos los fiscales de Mar del Plata, “la única manera de garantizar que la actuación del futuro acusador público se encuentre guiada por el criterio de objetividad, es a través de la designación de un nuevo Agente Fiscal ajeno a este Departamento Judicial, ello a los fines de asegurar total independencia y libertad para el desempeño del Ministerio”.

La compleja hipótesis

La causa que involucra a Segovia derivó de tres expedientes judiciales anteriores. El primero de ellos investigaba el robo sufrido a mediados de diciembre de 2020 por una pareja de jubilados en el edificio Cabo Corrientes. Esa investigación tiene como fiscal a Mariano Moyano.

El segundo expediente es el que investiga el fiscal Fernando Berlingeri a la “Banda del Millón”, un grupo de delincuentes que se hicieron de un millón de dólares y varios millones de pesos en 2022, también al robar en departamentos de Mar del Plata.

Y la tercera investigación, a cargo de Florencia Salas y que sirvió de plataforma para la actual causa, es la que tuvo por víctima de secuestro y extorsión a Marcelo Juárez, el acusado de cometer el robo en Cabo Corrientes.

De esas tres causas surgió la información sobre los dineros recaudados entre “arbolitos”, la manipulación de investigaciones en la DDI cuando Segovia era el jefe, la intermediación del abogado Resúa y su desleal labor profesional, y los vínculos entre los “recaudadores”, los “filtradores” de información y los secuestradores de Juárez.