El director nacional del Correo Argentino, Rodolfo Manino Iriart, expresó un fuerte respaldo al gobierno nacional luego de la polémica que se generó con el municipio tras el último DNU que ubica General Pueyrredon como zona de Alarma epidemiológica lo que prolongaría las restricciones tras el próximo domingo e hizo un nuevo llamado a la responsabilidad social para que se cumplan las medidas dispuestas que “tienen por prioridad cuidar la salud y la vida”. “Tiene que haber controles”, subrayó.

“Es necesario que las medidas se cumplan. Para eso apelamos a la responsabilidad social, pero también tiene que haber controles”, dijo. Y agregó: “En lugar de salir con críticas por redes sociales, les pido a los funcionarios de la Municipalidad de General Pueyrredon que hagan lo que tienen que hacer”.

“El presidente Alberto Fernández toma las medidas según recomendaciones de los expertos y los epidemiólogos, y necesitamos que se cumplan”, señaló.

El ex diputado provincial remarcó que “todo el país está en rojo y en todos lados piden controles desde los estados municipales y provinciales”.

“Si esos controles no existen, se hace muy difícil porque una cosa es la conciencia colectiva, pero indudablemente hay que bajar la circulación y hay lugares en donde no se termina de tomar conciencia de lo que pasa en el sistema de salud”, consideró y agregó que en ese contexto, “hay que buscar el equilibrio para que los que necesiten la asistencia del estado, estén visibilizados para que el estado pueda ayudar y los funcionarios deben estar atentos a detectar cuales son los sectores que más está sufriendo”.

Por otra parte, Iriart se remontó al inicio de la pandemia del coronavirus cuando, como funcionario del Ministerio de Seguridad Bonaerense, le tocó coordinar los retenes de control en los accesos a las ciudades de la costa Atlántica.

“En ese momento detuvimos el virus cinco meses. Hubo muy pocos casos en Mar del Plata. Fue una manera muy antipática pero el virus no entraba”, apuntó y señaló que “no se trata de medidas antipáticas o simpáticas”. “Todos quisiéramos mandar a nuestros hijos a la escuela, reunirnos con la familia y los amigos. Pero tristemente, este esfuerzo hay que hacerlo”, reflexionó.

Respecto a la responsabilidad colectiva, Iriart dijo no poder entender “que haya fiestas clandestinas” y consideró que “ni bien baje la circulación, hay que adoptar medidas para que se pueda abrir, que es como funciona en el mundo”.

Tras el reclamo del municipio sobre el cambio en los parámetros sanitarios que depositaron a Mar del Plata en zona de Alarma epidemiológica, admitió que “se puede interpretar que se corre la línea o no, pero lo cierto es que todo el tiempo se modifican las situaciones en la pandemia”.

Para cerrar, Iriart afirmó: “Entiendo el compromiso político, de quedar bien con algunos sectores que tienen necesidades pero también hay que decir la verdad de lo que puede suceder. Triste seria que lamentemos más muertes por no haber hecho esto”.