La reunión que el presidente Mauricio Macri encabezó ayer en Mar del Plata con la denominada Mesa de la Pesca permitió que funcionarios, empresarios y sindicalistas se comprometieran a trabajar desde ahora para tratar de resolver algunas de principales problemáticas que afectan al sector.

Durante más de dos horas de conversación, todos los presentes en el Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero (Inidep) aceptaron conformar distintas mesas de trabajo para impulsar una renovación de la flota pesquera, mejorar las condiciones de seguridad en la navegación, generar herramientas de financiamiento, ampliar la actividad productiva en tierra y actualizar algunos convenios colectivos de trabajo.

Incluso los empresarios y los gremialistas conformaron un frente común para plantear ante Macri la necesidad de asegurar la continuidad a los reintegros a las exportaciones pesqueras, cuya vigencia podría concluir el mes que viene.

“El de los reintegros fue un tema conversado bastante fuerte. Lo plantearon los sindicatos y las cámaras y es un tema a trabajar junto al Ministerio de Economía”, le explicó a LA CAPITAL el subsecretario de Pesca de la Nación, Juan Bosch, al término del encuentro.

La reunión de Macri con la Mesa de la Pesca concitó la presencia de los dirigentes de las principales cámaras empresariales del sector, representantes de diferentes gremios y de funcionarios con injerencia directa en el sector, como el ministro de Agroindustria de la Nación, Luis Miguel Etchevehere, el ministro de Trabajo, Jorge Triaca; el subsecretario Juan Bosch y el ministro de Asuntos Agrarios de la Provincia de Buenos Aires, Leonardo Sarquis.

Además estuvieron los diputados nacionales Esteban Bullrich, Guillermo Montenegro y Juan Aicega.

Seguridad y renovación de flota

Uno de los encargados de describir qué se conversó durante el encuentro fue el ministro Etchevehere, quien subrayó el explícito pedido del Presidente para “extremar la seguridad” de las embarcaciones.

Macri abordó el tema ante los empresarios y los sindicalistas a pocos minutos de haber mantenido una reunión con los familiares de los tripulantes fallecidos en los naufragios del San Antonino, el Repunte y el Rigel, las últimas tres embarcaciones marplatenses hundidas en altamar.

El Presidente “habló de terminar con las mafias y con todo lo que impide que haya seguridad”, reveló el ministro ante la prensa, destacando que esta misma semana el mandatario firmó una resolución relevando a la Prefectura de la responsabilidad “controlar las habilitaciones” de los buques pesqueros.

Según dijo, a partir de esta nueva norma esa tarea quedó a cargo del Ministerio de Seguridad y del Ministerio de Transporte para garantizar así “que quien controla no sea el mismo que el que habilita los barcos”.

Según Etchevehere, en el transcurso de la reunión Macri también les habló a los empresarios. “Les pidió compromiso, para evitar que salgan barcos que no estén en condiciones de navegar”. Y, según reveló, también se dirigió a los gremios, solicitándoles “que colaboren en todo lo que sea control”.

Otro tema crucial, fue el de la necesidad de promover con un renovación de la flota ya que en ese aspecto ya existen algunas iniciativas en marcha, como la disponibilidad, desde el mes de noviembre, de una línea de financiación específica del Banco Nación para la construcción de nuevas unidades.

No obstante, Juan Bosch, reconoció la intención de seguir avanzando con este tema. “La reunión con los familiares (de las víctimas de las últimas tragedias) fue muy positiva”, dijo el funcionario, quien consideró como “algo fundamental” encarar la “renovación de una flota que tiene 40 años de antigüedad” y que está compuesta por algunas unidades que fueron botadas en 1940.

“Esto es algo que tenemos que trabajar desde el Ministerio, el Consejo Federal Pesquero, los astilleros, las empresas y los sindicatos”, razonó, marcando la intención de su área de promover “una reforma legal” y generar instrumentos de financiamiento que permitan “reformar la flota”.

Trabajo y convenios

Por su parte los dirigentes gremiales que ayer concurrieron a la reunión asistieron con su propia agenda y pudieron plantearle al Presidente sus inquietudes.

Por ejemplo, el secretario general del Simape, Pablo Trueba, aseguró haber hecho fuertes críticas contra la situación del Inidep y la falta de continuidad de las campañas de investigación.

No obstante, el principal tema en el que los sindicatos exhibieron un mismo discurso se vinculó con la necesidad de garantizar las fuentes de empleo, en un momento en el cual varias empresas están en situación de crisis. Y además hicieron planteos para que desde el Estado se promueva la actividad de la flota fresquera, para permitir así un mayor suministro de materia prima en tierra.

En ese sentido Bosch hizo saber que su área está intentando avanzar con la posibilidad de concederles a algunas embarcaciones la cuota de merluza que otros buques, hoy orientados a la pesca de langostino, no están utilizando.

“Estamos estudiando qué empresas necesitan merluza y están en condiciones de pescarla. La idea es generar una bolsa de toneladas de merluza que no están siendo utilizadas para que se puedan descargar en el puerto y generar movimiento”, sostuvo.

Sumado a eso, los funcionarios hicieron saber que durante el encuentro también se habló sobre la posibilidad de avanzar con una reforma de los convenios colectivos de trabajo que rigen en la actividad.

“Los gremios, los empresarios y el Ministerio de Trabajo quedaron en contacto para poder avanzar en esto”, señaló Etchevehere.

Según explicó, la intención es la de “ir hacia una legislación que se adapte a los tiempos que estamos viviendo”.