CERRAR

La Capital - Logo

× El País El Mundo La Zona Cultura Tecnología Gastronomía Salud Interés General La Ciudad Deportes Arte y Espectáculos Policiales Cartelera Fotos de Familia Clasificados Fúnebres
La Ciudad 1 de junio de 2021

Los supermercados, al margen de las fases y las medidas restrictivas

Vendieron indumentaria, juguetes y otros productos no esenciales durante el confinamiento. En una recorrida, LA CAPITAL corroboró que lo siguen haciendo a pesar de que, en fase 2, los comercios del rubro deben atender desde la puerta. No hay controles.

Al igual que sucedió durante el último confinamiento decretado por el gobierno nacional, distintos supermercados de la ciudad continúan vendiendo indumentaria, juguetes y otros productos “no esenciales”, a pesar de no estar permitido en Fase 2, y esto genera malestar y preocupación en los comerciantes locales, quienes señalan esta práctica como “desleal”.

Según la normativa vigente que rige en la ciudad por la situación epidemiológica a raíz de la pandemia de coronavirus, no está permitida la “venta al por menor de productos textiles, prendas de vestir, calzado y juguetes en comercios de cercanía con ingreso de clientes”.

Esto obliga a los comercios “no esenciales” a trabajar con mostradores en sus ingresos y sin la posibilidad de que los clientes puedan entrar a los locales a ver los productos, situación que, entre otras cuestiones, influye negativamente a la hora de concretar las ventas.

En este marco, diferentes supermercados de la ciudad, que tienen el beneficio de poder recibir a las personas por ser considerados comercios “esenciales”, aprovechan para continuar vendiendo indumentaria, juguetes y productos tecnológicos, con la ventaja de que los potenciales clientes pueden recorrer las góndolas y observar tranquilamente estos objetos, los cuales no está permitido que comercialicen de esta manera durante la fase 2.

Por ello la Unión del Comercio, la Industria y la Producción (UCIP) reclamó que “se preste especial atención” a que aquellos comercios que venden “productos esenciales” no ofrezcan otros que no lo son, en atención a la “lealtad comercial que debe imperar en el mercado”.

Frente a esta situación, también se multiplicaron las quejas de comerciantes locales, quienes ven con preocupación esta posición de clara desventaja en la que se encuentran, en un contexto económico por demás dificultoso, por lo que piden controles para que deje de suceder esto.

En las últimas horas, la UCIP emitió un comunicado asegurando que las grandes cadenas de supermercados de la ciudad “decidieron hacer caso al pedido” del organismo y “frenar la venta de productos no esenciales”.

Sin embargo, en una recorrida realizada hoy por LA CAPITAL por diferentes establecimientos de estas características se registró en algunos supermercados la venta de todo tipo de electrodomésticos, juguetes y ropa, entre otros productos por fuera de los determinados esenciales.

Incluso, en un hipermercado en la avenida Constitución se colocaron cintas plásticas sobre la indumentaria con la leyenda de “peligro”, como mensaje de que no estaban a la venta, pero, ante la pregunta sobre si se podían comprar, una empleada respondió: “Supuestamente no se pueden vender, pero si querés agarrar…”.

ropa en supermercados 1

En otros supermercados directamente los productos no esenciales se ofrecían como cualquier otro, algunos de ellos colocados en lugares insólitos, como en un establecimiento ubicado en la zona de Moreno y San Luis, donde entre los fideos y las latas de atún podían encontrarse a la venta pequeños autos de juguete.

juguetes en supermercado

Frente a este panorama, Gustavo Ares, vocal titular de la comisión directiva de la UCIP declaró en diálogo con LU6 Radio Atlántica: “Ya teníamos el antecedente del año pasado, es algo que venimos denunciando. Este año volviendo a las fases duras de restricciones nos encontramos con supermercados que no vendían este tipo de productos, como camperas, habían puesto percheros entre las góndolas”.

Creemos que hubo una gran falta de empatía, nos llamó poderosamente la atención”, agregó y sostuvo que, si bien en algunos lugares “sacaron” los productos no esenciales, en otros hay “un problemita” porque continúa “la venta de juguetería, artículos de librería y, mientras las casas de computación solo pueden vender online, en los supermercados te podés comprar un televisor”.

En este sentido, Ares consideró que “es muy triste hablar de esto” porque “las reglas tienen que ser parejas para todo el mundo”.

ropa en supermercados 2

“Quizás la solución, y seguramente lo sea, es que le permitan trabajar a todos los comercios con las medidas adecuadas y no hacer diferencias. A 14 meses del comienzo de esto no hay ninguna empresa que tenga resto ya”, concluyó el referente de UCIP.

Situación terrible

Por su parte, el presidente de la Cámara Marplatense de Empresas Comerciales y de Servicios (Cameco), Juan Antonio Gutiérrez, consideró que la situación de los comercios de la ciudad “es terrible por la angustia” que genera.

“Los comercios están pasando un momento muy difícil, como todos sabemos, y a veces están ante la imposibilidad de sostener su actividad”, indicó Gutiérrez también en diálogo con LU6 y agregó que esto se da “no solo en las Pymes”, sino en “cualquier actividad de la ciudad”. “Si no se mantiene un movimiento más importante se hace muy difícil mantener las puertas abiertas”, sostuvo.

En este contexto lamentó que “las ventas han caído muchísimo” al igual que “el poder adquisitivo de la gente”. “Muchas personas no tienen disponibilidad para comprar y en definitiva esto perjudica a toda la actividad de la ciudad. Es una situación económica muy difícil que estamos viviendo en toda la Argentina”, reflexionó.

MARTES 03

Asimismo el titular de Cameco señaló que “lo que más se ha podido mantener es todo lo que está ligado a la alimentación”, pero “después hay rubros como el turismo que no sé cuantas empresas van a quedar”.

Para Gutiérrez la situación del comercio en Mar del Plata “es terrible por la angustia que tiene”. “Hay gente que tiene que mirar a sus empleados y no puede sostener un trabajo que ha estado en 20 o 30 años de forma permanente. Es muy triste”, aseguró.

Por último, consideró que “la pregunta” clave es ¿Hasta cuando vamos a estar en Fase 2?. “Obviamente queremos cuidar la salud, pero necesitamos trabajar. De esta salimos todos juntos o Mar del Plata va a seguir sufriendo el cierre de locales”, advirtió.