por Gerardo Gómez Muñoz

No es que los políticos deban postergar los requerimientos acuciantes derivados del recrudecimiento del virus maldito sino que la vocación y las obligaciones de la organización social también tienen urgencias. En una segunda parte de este página se hablará de ese tema.

Ahora cabe destacar cómo la UCR partió en punta y montada en la ondas de la modernidad ya arrancó en “Zoom” con reuniones, intercambios de ideas, intereses y debates internos que permitieron instalar su interna, las próximas elecciones partidarias y hasta dos listas diferentes de cara a las elecciones que serán el 11 de octubre.

Según una costumbre transformada en vicio -no muy democrático que se diga-, el peronismo absorbido por el kirchnerismo y sus vicios hace añares que desechó ese instrumento que otros siguen venerando. Tal vez por eso acá, como en toda la provincia y más que nada en el escenario nacional, tanto los matices, desencuentros y rivalidades se ventilan en la prensa y lo dramático, muchas veces, en internas gubernamentales o en golpes de mando.

Este fenómeno regresivo tal vez se instale en el joven PRO en el que no se avizoran urnas internas sino que su ausencia está dando espacio a sectores que piensa más hacia afuera, al margen de lo que piensen los presuntos conductores o el caudillo que, después de una derrota, es muy difícil que retenga la potestad ni la obediencia a la conducción.

No hay vaticinio arriesgado para las próximas semanas: el Frente de Todos mostrará una permanencia más seguida de su jefa Fernanda Raverta y el PRO con la cuidada gestión de Guillermo Montenegro no aparecerá librado a raros avatares. Otro cantar preanuncia la UCR con la sorprendente aparición del marplatense Maxi Abad con avales no sólo provinciales sino nacionales como primerísmo candidato a la presidencia del Comité de la UCR de la Provincia. Su proyección preanuncia que el radicalismo marplatense estará en condiciones no sólo de compartir como generosamente sirvió la mesa Montenegro. Porque un buen banquete requiere postre que esté a la altura.

Más manija

El crecimiento periodístico de la campaña de la UCR y, principalmente del marplatense Abad, tuvo ayer una nueva confirmación a través de la Agencia Telam, la de más amplia cobertura del país. En las charlas del ramo se diría “Qué manija”. Sólo precisa, en lo que se refiere al apoyo, el muy significativo de la vicepresidenta del comité nacional partidario y del presidente del bloque de diputados nacionales, el cordobés Mario Negri. Y hay otros que se sabe como la diputada nacional Susana Banfi y casi todos los integrantes de ese cuerpo partidario y numerosos intendentes.

La Agencia Nacional indica que en el sector que está con Gustavo Posse como candidato principal cuenta también con Gustavo Storani, Juan Manuel Casella, Coty Nosiglia y Lousteau, entre otros.

No deja de especular acerca de la cercanía de Maxi con la ex gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal. De paso y por lo que sea, ésta se muestra cada vez lejana de Mauricio Macri como cercana de Rodríguez Larreta, Jorge Macri, Cristian Ritondo, Emilio Monzó y Rogelio Frigerio, entre otros.

Ayer decían por ahí que para espantar fantasmas, Rodríguez Larreta acababa de aclarar que no era amigo de Macri como tampoco de Alberto Fernández.

También Fiorini

El olor a internas y la consabida renovación de cargos legislativos despierta innegables militantes que van allá de la apetencia y posibilidades fuera del alcance de sobrados aspirantes. Pero es motivante de sobra para activar a muchos. Así se nombró ya muchos que están en movimiento. Pero hay otro marplatense y también englobado en “Juntos por el Cambio”, que inició actividades presumiblemente apurando a octubre. Es el activo senador provincial Lucas Fiorini, que más allá de registrar su firma en una casi Arca de Noé solicitada entre Eduardo Duhalde, Julio Bárbaro, Angel Abasto, Gilberto Alegre Euardo Menev, Santiago Kovadloff, José Octavio Bordón y Patricia Bullrich, y otros trescientos personajes. El caso es que el senador anduvo en una más concreta, donde se le ve la pata a la sota y a la pantalla porque fue con “Zoom” y con 100 participantes de la provincia. Roberto Costa -senador como Fiorini- la presidió y entre los marplatenses se vio a Alejandro Carrancio, presidente del bloque de concejales oficialistas y de Crear. El opbjetivo es coordinar un trabajo político territorial en la sección para ir formando “la cuarta pata del Frente” como en momento definió Vidal.

La pelea del transporte

Casi imposible -para exagerar- contar las decenas de años que uno vio desde el periodismo pelea entre los políticos por el precio del boleto, con el pasajero en el medio. La víctima propiciatoria, siempre. El chico que no podía llegar o volver del colegio, el laburante que, además de ir o volver a pie desde la distancia que fuere, corría el riesgo de perder el salario o la hora extra. Para qué abundar en datos tan remanidos, como tan reiterativa la cara de compungido o de heroico luchador que ponen los concejales, legisladores, técnicos y demás que hablan de la defensa del bolsillo de pobre.

No se incluye a los empresarios del volante que serán o pondrán su dosis de mentira en los reclamos, total nunca se les creerá. Pero ahora y pensando en plata, nuestros representantes se creerán que, a su vez, a ellos la gente les cree a pie juntillas. Cuando llega la hora del reclamo, llega también la de plantárseles para exigirles previamente un estudios técnico. Hasta cuando el estudio proviene de nuestra prestigiosa Universidad Nacional hay vueltas y vueltas para admitir la salida al problema. Pero llegó un gobierno que subsidió el servicio… lástima que no fue tan eficiente en el contralor porque hubo trampas, estafas directamente y por esa vía el usuario también fue pisoteado.

El gobierno comunal en ejercicio fue duramente castigado por concejales no oficialistas porque impidieron que el castigo cayera sobre los trabajadores, los más castigados por las caminatas y desgaste físico. Ahora queda pendiente otro azote a los que no tienen otro traslado de noche, obviamente, que el “bondi”. ¿Alguna vez se terminará la farsa?