Los nuevos nombres del Gabinete de Montenegro, locura por los cargos y el pragmatismo de Milei
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El intendente Guillermo Montenegro y su primer gabinete, tras la jura el 11 de diciembre de 2019, en Villa Victoria
El shock de ajuste anunciado por el presidente electo Javier Milei y su idea de reformar el Estado para optimizar recursos generará consecuencias a nivel nacional, pero también en el ámbito provincial y local. Tomando nota de “lo que viene”, y estimándose que los recursos recibidos desde los más altos estamentos serán aún más magros que los que llegaron en sus primeros cuatro años de gestión, el intendente Guillermo Montenegro se dispone a iniciar su segundo mandato con la austeridad como bandera. En este sentido, los asesores letrados y distintos funcionarios comunales, se encuentran en estas horas esbozando el nuevo cronograma de dependencias municipales, con la fusión de secretarías y entes y la desaparición de algunos organismos. Esto, a la vez, conllevará la reducción de más de un 30 por ciento de la actual planta política. “Se buscará optimizar la eficiencia administrativa garantizando una gestión más ágil y austera”, se indicó. Por lo pronto, ya se están visualizando algunas señales como la reducción drástica, y en algunas dependencias directamente la eliminación, de las horas extras.
Y en coincidencia con lo que sucede con Javier Milei a nivel nacional y Axel Kicillof a nivel provincial, el intendente Guillermo Montenegro comenzó a delinear con sus colaboradores y aliados políticos lo que será el nuevo gabinete. En tal sentido, ya hubo un encuentro entre el jefe comunal y el senador nacional electo Maxi Abad, quien en su carácter de máximo referente de la UCR constituye una de las patas del actual gobierno de la coalición municipal. En este marco, Montenegro y Abad buscan afianzar esa alianza en momentos en los cuales se hace añicos Juntos por el Cambio, tras la división del PRO, el alejamiento de la Coalición Cívica y el rol del radicalismo ante el nuevo mapa político argentino. “No hay ninguna posibilidad de que acá se rompa este sistema de gobernabilidad que tan buen resultado arrojó. Gracias a esta unidad se ganaron las elecciones”, coinciden en afirmar cerca de Montenegro y de Abad.
La idea del intendente es realizar fusiones de secretarías y entes, “refrescar” el gabinete y ejecutar algunos cambios de nombres en dependencias neurálgicas. En este contexto, y tal como lo viene adelantando esta columna, una de las modificaciones más importantes se concretará en la Secretaría de Gobierno, donde dejará su cargo Santiago Bonifatti. ¿Quién será su reemplazante? Si bien en un primer momento, desde el mismo oficialismo algunos voceros dejaron correr el nombre del radical Gustavo “Tato” Serebrinsky, quien aparece con mayores posibilidades para cubrir ese cargo es el actual secretario de Legal y Técnica (“el hombre que le cuida la firma al intendente”), Mauro Martinelli. No obstante, Serebrinsky “complementaría la parte política de esa dependencia, haciéndose cargo de una subsecretaría. En tanto, con el correr de los días se fue desvaneciendo la posibilidad de crear la Jefatura de Gabinete. Proyecto que pasa al archivo y puesto con el que muchos soñaban…
Para Bonifatti, representante de la agrupación Sumar y ex dirigente de Acción Marplatense, estaría reservado el manejo de un nuevo ente de servicios urbanos que además absorbería alguna otra dependencia. Otro de los cargos a cubrir en el futuro gabinete es el de secretario de Educación, teniendo en cuenta que su titular, Sebastián Puglisi ya le anunció al intendente sus deseos de no continuar. En este contexto, “hay ruido” en el radicalismo puesto que con Puglisi deberían irse otros tres o cuatro funcionarios que están enrolados en la UCR. En tanto, mientras en el celular de Alejandro Rabinovich y del mismo Montenegro se recepcionan mensajes de varios funcionarios de municipios -incluso del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires- “buscando trabajo en la mejor ciudad del país” tras las derrotas electorales de Juntos por el Cambio, se multiplican los interrogantes sobre el futuro de otras dependencias. En este sentido, se desconoce si Carlos Katz seguirá al frente de Obras Sanitarias Sociedad de Estado, o si el exsecretario de Producción y actual concejal, Fernando Muro, deja su banca para volver al Ejecutivo o directamente al sector privado desde donde le llegó una atractiva propuesta.
En caso de que Muro deje el Concejo, su banca debería ser ocupada por el actual subsecretario de Desarrollo Social, Cristian Beneito, primer reemplazo de los ediles ingresados en 2021. En cuanto a la Secretaría de Desarrollo Social, como también se anticipó en esta columna, seguirá estando a cargo de Vilma Baragiola, quien también deberá “adecuarse” a los nuevos tiempos con la reducción de la actual planta política, acudiendo a “funcionarios que funcionen”, como alguna vez lo sostuvo el intendente. El contacto y la relación de Baragiola con las organizaciones sociales son valorizadas por Montenegro y de allí su continuidad. Cabe recordar que Baragiola fue electa concejal en los últimos comicios. En consecuencia, su lugar debería ser ocupado por Mónica Lence, aunque esta última tampoco asumirá la banca ya que continuará en el Concejo Escolar, donde se desempeñará como presidenta. Finalmente, quien sí asumirá como concejal para sumarse al bloque de la UCR será el actual número 2 del Emder, Ricardo Liceaga Viñas.
A propósito del Ente Municipal de Deportes (Emder), Andrés Macció, su actual presidente no continuaría en ese cargo a partir del 10 de diciembre. En este sentido, si bien en algún momento se mencionó al exbasquetbolista y actual concejal Nicolás Lauría (su mandato vence justamente el 10 de diciembre), el puesto de titular del Emder quedaría para el marplatense Facundo “Chino” Mazzuchi, director deportivo de la Asociación de Padel Argentina (APA), y propietario del emblemático complejo “Los Naranjos”. Finalmente, se estableció que en el marco de la reducción de puestos y cargos, en el Ejecutivo y en gran parte del cuerpo deliberativo, habría consenso para que en lugar de tres, General Pueyrredon cuente en el futuro inmediato con un solo defensor del pueblo, como sucede en la mayoría de las ciudades argentinas.
En tanto, en el Concejo Deliberante, el próximo 7 de diciembre a las 10 asumirán los nuevos ediles, para una nueva etapa que volverá a tener a Marina Sánchez Herrero como presidenta, acompañado en la próxima gestión por un o una vicepresidente primero que corresponderá, de acuerdo al resultado electoral local a Encuentro Marplatense y un vicepresidente segundo de La Libertad Avanza. Según pudo saberse, con el objetivo de “ordenar” y al mismo tiempo desterrar algunos viejos vicios en cuanto a la elección de los despachos, la presidenta del Concejo elevó un memo a todos los concejales cuyo mandato finaliza en estos días. Se les notificó que “deberán entregar las llaves de sus oficinas el 4 de diciembre en la presidencia de este cuerpo, sin excepción, a efectos de realizar el control del inventario correspondiente”. En este contexto, quien tendrá un despacho de lujo en el Congreso de la Nación será el marplatense Maxi Abad, quien el 5 de diciembre asumirá como senador nacional, el primero en la historia de la ciudad. Según pudo saberse, el presidente del comité provincial de la UCR ocupará un despacho de 300 metros cuadrados en el edificio principal (muchos tendrán sus oficinas en el anexo) que oportunamente perteneciera a Carlos Reutemann, Esteban Bullrich y José Torello.
En cuanto a la conformación del nuevo Concejo Deliberante -el intendente contará con mayoría propia para la aprobación de las iniciativas que se presenten desde el Ejecutivo- la gran incógnita pasa por la conformación del principal bloque opositor. Así como el interbloque de Juntos por el Cambio se integra por las bancadas de la Coalición Cívica, Vamos Juntos (PRO) y UCR; no se descarta que Encuentro Marplatense irrumpa con el Frente Renovador, Acción Marplatense y Unión por la Patria. Son horas de definiciones internas en este sentido, en una fuerza que se encuentra en debate, incluso con pases de facturas, tras la derrota a nivel local y recientemente nacional. Completará la conformación del Concejo el bloque de La Libertad Avanza, con sus dos ediles.
Quienes no paran de recibir llamados telefónicos y mensajes por Whatsapp son Fernanda Raverta y Alejandro Carrancio. La excandidata a intendenta dejará su cargo como presidenta de la Anses a nivel nacional, y con ella se irán también las autoridades y gerentes locales de esa repartición como así también decenas de funcionarios políticos de organismos nacionales con delegaciones en el distrito. “Si llegás a tener algo no te olvides de mí”, coinciden en señalar quienes deberán buscar nuevos horizontes, al tiempo que también recibe pedidos de quienes dejan sus cargos como concejales o no entraron tras los últimos comicios. Raverta podrá mantener en sus puestos a algunos funcionarios de organismos provinciales con asiento en la ciudad -IOMA, Registro Provincial de las Personas y Consorcio Portuario, entre otros- o cambiarlos, lo cual se decide en estas horas. En cambio, el referente local y diputado provincial electo por La Libertad Avanza, Alejandro Carrancio, tendrá la potestad para nombrar una importante cantidad de puestos políticos -los que deja la gente de Raverta- y mientras espera definiciones de nombres a nivel nacional, acumula solicitudes. Para Rolando Demaio, quien fuera candidato a intendente, están reservados los principales casilleros a ocupar. Demaio será a partir de diciembre, el nuevo titular de la regional local de la AFIP o se hará cargo de la Regional de la Anses hoy conducida por Marcos Gutiérrez.
Milei y su oda al pragmatismo. La “eterna” campaña electoral ya quedó en la historia y ahora es tiempo de gobernar. La mujer a la que acusó en campaña de haber sido “una montonera que colocaba bombas en jardines de infantes” (Patricia Bullrich) será su ministra de Seguridad, el hombre al que identificó alguna vez como uno de los responsables de haber dilapidado más de u$s15.000 millones de reservas del Banco Central cuando estuvo al frente de la autoridad monetaria (Luis Caputo) será su ministro de Economía, la dolarización deberá esperar un mejor momento para ser aplicada y la demolición del Banco Central quedará para más adelante, el presidente de Brasil Lula da Silva y el chino Xi Jinping ya no son tan tiranos de izquierda -la futura canciller Diana Mondino, que extrañamente no formó parte de la delegación que viajó a Estados Unidos, buscó de entrada bajar la tensión con ambos países, principales socios comerciales de la Argentina- y la casta va perdiendo el miedo. Todo parece haber quedado en la historia. Para Milei arranca la etapa de gobernar un país al que encuentra al borde de la hiperinflación y al parecer, con organizaciones sindicales y sociales que, adormecidas durante muchos meses, parecen despertar en estas horas, en algunos casos, con amenazas que poco tienen que ver con el juego democrático. “El pragmatismo creciente del presidente electo emana de la comprensión paulatina de ese cuadro complejo”, escribía días atrás en estas páginas el destacado analista político Jorge Raventos.
Son horas de tensión y reconfiguración. Adecuando la teoría a la realidad, Milei intenta conformar su próximo gabinete tras haber tenido algunos tropiezos, como el portazo dado por Carlos Rodríguez y Emilio Ocampo, quien aparecía como el liquidador del Banco Central, o la desprolija salida de Carolina Píparo, quien mientras anunciaba por Twitter la fecha en que se reuniría con Fernanda Raverta para la transición en la Anses era corrida de esa función en el corazón de las filas libertarias. Hay un cortocircuito con la vicepresidenta electa Victoria Villarruel, quien soñaba con hacerse cargo de las fuerzas de seguridad y a quien le sorprendió la designación -aun no confirmada oficialmente- de Patricia Bullrich como ministra del área, y también mucho por resolver en la relación con el expresidente Mauricio Macri, quien pretendía tener a un hombre de su confianza (Germán Garavano) en el sensible ministerio de Justicia, finalmente a cargo de Mariano Cúneo Libarona, y a Javier Iguacel en YPF, donde finalmente el máximo responsable será Horacio Marín, hermano del productor de espectáculos de Fátima Florez, Guillermo Marín. Milei, de acuerdo a sus últimos movimientos, parece dispuesto a contar con algunos hombres y mujeres del PRO para cubrir espacios en su gobierno, pero, señalan en su entorno, no consentirá formas de cogobierno como deslizan a sus medios amigos ciertos cuadros del PRO macrista. “Javier no va a ser con Macri el Alberto de Cristina. Olvídense. La lección está aprendida”, desliza uno de los hombres con acceso irrestricto al piso 21 del Hotel Libertador.
“Presten atención al tandem conformado por Nicolás Posse (Jefe de Gabinete), Guillermo Francos (Interior) y Diana Mondino (Cancillería), que están blindando políticamente a Javier y estrechando lazos y puentes con todo el arco político. No le van a regalar el gobierno a Macri como se entusiasmaron en algunos canales de cable”, añadió el libertario. Sí es real que Milei escucha atentamente los consejos de Macri, con quien incluso intercambia mensajes de Whatsapp en forma constante. El presidente electo tomó nota de una insistente recomendación de Macri. “Cometí el error, cuando asumí, de no explicarle a los argentinos en detalle y claramente el desastre con el que me encontré. Desde el vamos tenés que ser claro y contar lo que te dejan en esta tierra arrasada”, le recalcó. En cuanto a la relación Milei-Macri, todo quedará muy claro en las próximas horas cuando se libre una de las “batallas” políticas más fuertes tras el balotaje, con la elección del presidente de la Cámara de Diputados de la Nación. “El Congreso y la calle serán vitales para el próximo gobierno”, recalca el colaborador del libertario, el mismo que le recomendó al presidente electo, al menos hasta que asuma, usar chaleco antibalas cada vez que abandona el hotel bunker que ocupa desde días antes de las elecciones.
En algo coinciden Mauricio Macri y Cristina Fernández de Kirchner. Ambos se oponen a que el ex ministro del Interior y ex candidato a vicepresidente, Florencio Randazzo, se quede con la presidencia de la Cámara de Diputados tal cual le gustaría a Milei. Macri insiste en que ese espacio debería ser cubierto por Cristian Ritondo. El haber salido a la luz sin tapujos las preferencias de Milei y Macri para la presidencia de la Cámara de Diputados que actualmente ocupa la massista Cecilia Moreau, dejará a un vencedor y un perdedor cuando se produzca la definición, salvo que la salida elegante sea optar por un legislador de La Libertad Avanza para ese lugar neurálgico, por lo que Oscar Zago se anotó para esa competencia. La sesión preparatoria está pautada para el 7 de diciembre, y todo parece indicar que hasta ese día no habría definiciones. La desventaja de que la conducción de la Cámara baja recaiga en alguien de La Libertad Avanza es justamente la falta de conocimiento. Ni siquiera los 38 diputados de la fuerza conducida por Milei se conocen entre sí, más allá de algunas excepciones.
Si bien se señala que el PRO viene colonizando espacios de poder en el Gabinete, aunque aclara que la mayoría de las incorporaciones, como las de Patricia Bullrich en el Ministerio de Seguridad o el posible desembarco de Luis Caputo en Economía, no fueron negociadas con el partido amarillo sino que fueron ofrecimientos a título personal. La verdadera obsesión del macrismo es que la silla que hasta el 10 de diciembre ocupará Cecilia Moreau sea concedida a Ritondo. Sin la conducción de Diputados, se desdibujaría la influencia del que fuera el principal partido de la oposición. Y por si acaso dejan trascender que sin ese papel para Ritondo no habrá alianza formal con La Libertad Avanza ni apoyo automático a las leyes que envíe al Congreso el Poder Ejecutivo. En el entorno de Ritondo están en estado de alarma, conscientes de que el propio Milei se estaría inclinando por Randazzo. Señalan que el PRO le garantiza a Milei 40 diputados propios a excepción de una media docena de díscolos larretistas, que se sumarían a los 38 de La Libertad Avanza, y un puñado más entre los que se encuentran José Luis Espert y Ricardo López Murphy. Así, el interbloque podría tener entre 80 y 90 diputados, aún muy lejos del quórum de 129, pero al menos sería una base sólida y segura para después pensar en ampliar la base de sustentación.
Y si bien es cierto que Randazzo no tiene capital propio para ofrecerle a La Libertad Avanza, la apuesta por él se explica más por la posibilidad de seducir a diputados de Unión por la Patria que respondan a gobernadores del PJ, de manera tal de romper la alianza panperonista. El modelo que está analizando Milei con atención es lo que sucedió poco después de la derrota peronista del 2015, cuando una veintena de diputados rompieron lanzas con el Frente para la Victoria, y aunaron esfuerzos con el Frente Renovador de Massa para garantizarle gobernabilidad al Gobierno de Mauricio Macri. Cerca del de Chivilcoy puntualizan que los votos del PRO ya están asegurados, más allá de si le otorgan o no al partido amarillo la presidencia de Diputados. En cambio, Randazzo le permitiría a Milei seguir ampliando en volumen parlamentario y acuerdos con otros espacios. No obstante, desde Unión por la Patria dejaron trascender que ni Ritondo ni Randazzo forman parte de La Libertad Avanza y que al no ser oficialistas no debería haber luz verde para ellos. Para poder designar un presidente, se necesitan 129 votos y Milei no los tiene, por lo que necesitará imprescindiblemente del consentimiento de Unión por la Patria. Todo por resolverse y mucho en juego.
Asimismo, con mucha atención habrá que seguir de cerca lo que suceda en el Senado. Sin dudas, la presidencia provisional del Senado, otro de los lugares sin nombre, reviste importancia porque integra la línea de sucesión presidencial (presidente, vicepresidente, presidente provisional del Senado, presidente de Diputados y presidente de la Corte Suprema). No está escrito en ningún lado, pero la costumbre de la política argentina dice que el jefe de Estado que llega al poder coloca a un dirigente de su confianza en ese lugar, dado que además de ser parte de la sucesión tiene un rol estratégico en la promoción y sanción de leyes. No obstante, según trascendidos periodísticos, el peronismo será primera minoría en el Senado y un sector pretendería aprovechar eso para quedarse con el control de la Cámara. El martes próximo jurarán sus nuevos integrantes y serán elegidas las nuevas autoridades. Se decidirá ese día qué legislador será presidente provisional de la Cámara que dirigirá la hoy vicepresidente electa, Victoria Villarruel.
El PJ es muy fuerte en el Senado. Con 33 bancas propias queda a 4 del quorum propio. Las autoridades del Senado se eligen por el voto de la mitad más uno de los presentes en la sesión. La Libertad Avanza tiene apenas 7 senadores electos, por lo que deberá hacer una gran tarea de negociación para aprobar el paquete de reformas que el nuevo gobierno promete enviar al parlamento. En principio, los senadores del PRO serían dadores de gobernabilidad. Se señala al formoseño José Mayans como el principal impulsor de que el peronismo retenga la titularidad provisoria al ser la primera minoría del cuerpo legislativo. Mayans no está alineado con la tradición parlamentaria de otorgarle la presidencia provisional de la Cámara al partido del nuevo presidente. No obstante, según pudo saberse, en las últimas horas cobró fuerza la posibilidad de que se busque un presidente provisional “de consenso”.
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