El observatorio de la ciudad de la Universidad Fasta realizó un trabajo sobre las características del uso y la valoración que los residentes de la ciudad hacen del comercio electrónico. El uso de internet, un fenómeno tecnológico y social, promovió una nueva modalidad de oferta y demanda de productos y servicios llamada comercio electrónico o “e-commerce”.

“Se trata de una vía que satisface necesidades de las empresas como reducción de costos, ampliación del potencial de la clientela sin costo diferencial, mayor difusión y también de los consumidores como el acceso a productos que no se encuentran en el mercado local, disminución de precios y comodidad”, afirmó la directora del observatorio, doctora Amelia Ramírez, investigadora del observatorio.

Asimismo, explicó que el proceso del comercio electrónico supone “distintas fases que incluyen la búsqueda y localización del producto, la comparación, el pago y la recepción”.

En ese sentido, advirtió que “este proceso sólo puede ser completo cuando se trata de un producto o servicio que puede ser obtenido por vía electrónica. Esto no es lo que sucede en la mayoría de las transacciones en las cuales hay un momento en el que es imprescindible que se haga efectivo un movimiento o traslado para que la operación se complete”.

De la muestra, que se realizó en la ciudad el pasado junio, participaron 507 personas residentes en Mar del Plata, de ambos sexos, mayores de 18 años, distinto nivel de educación y diversas ocupaciones. La selección se hizo en base a un diseño muestral por cuotas.

Compras virtuales

El mayor porcentaje de los encuestados, el 63 por ciento, manifestó haber hecho uso del comercio electrónico, es decir, que realizó alguna compra de producto o servicio por este medio en el último año.

La diferencia entre los que realizan compras virtuales y los que no radica en la edad: el promedio de edad de quienes realizan compras a través de la red es de 38 años, mientras que quienes no lo hacen, en promedio, tienen 50 años.

En cada segmento de edad los comportamientos (en referencia al uso o no de esta modalidad de compra) se distribuyen equilibradamente salvo en los segmentos de jóvenes comprendidos entre los 21 y 30 años y en los adultos mayores de 61.

En el caso de los jóvenes quienes lo hacen son la mayoría, en cambio, entre los adultos mayores sólo una minoría compra mediante internet.

Los productos y servicios más requeridos son los vinculados al turismo, como pasajes y alojamientos, aunque también varían con la edad.

La música, videos, espectáculos o recitales son los más solicitados entre los jóvenes, mientras que la compra de moneda extranjera, acciones o valores y artículos para el hogar lo son entre los mayores.

Quienes no hacen compras por internet aluden a diversas razones diversas: prefieren el contacto directo con lo que se compra; no usan habitualmente internet porque resulta complejo e inseguro o por falta de confianza.

En tanto, desde el observatorio no observaron diferencias entre el sexo de quienes adquieren productos a través de internet y quienes no lo hacen.

Sin embargo, según se trate de varones o mujeres “prevalece o no el interés en algunos productos: electrónicos y licencias de programas aumenta en los varones, mientras que en las mujeres hay un aumento en la compra de ropa y artículos para el hogar”, señaló el informe.

Frecuencias

La mayoría de los encuestados reconoció que compra a través de la web “cada dos meses o más”, mientras que el dispositivo preferido para efectuar la compra es la computadora, seguida por el celular y la tablet. Algunos de los encuestados reconocieron utilizar más de un dispositivo para la compra virtual.

Muchos reconocieron que eligen esta forma para comprar por “la comodidad y los precios”, mientras que consideraron como puntos negativos “la falta de confianza, la demora en la entrega y el costo de envío”.

En el informe se consignó que “los comportamientos señalados como habituales al hacer la compra muestran que la mayoría cumple mediante internet todos los pasos hasta tomar la decisión y concretar”.

Y los sitios consultados a la hora de realizar la adquisición son páginas web oficiales; sitios de venta reconocidos y redes sociales. Otras vías mencionadas fueron las aplicaciones para celular, sitios de turismo, venta de pasajes en avión y páginas específicas de descuentos.

El grado de satisfacción al realizar las compras por internet -del 0 al 10- estuvieron en el promedio del “8,36”.