CERRAR

La Capital - Logo

× El País El Mundo La Zona Cultura Tecnología Gastronomía Salud Interés General La Ciudad Deportes Arte y Espectáculos Policiales Cartelera Fotos de Familia Clasificados Fúnebres
Más allá de las noticias 21 de mayo de 2019

Llega a su fin un matrimonio de 82 años al fallecer uno de los cónyuges

Masao y Miyako con el certificado Guinnes por ser la pareja en vida con la mayor convivencia conjunta.

Un matrimonio japonés que se extendió por casi 82 años de convivencia común llegó a su fin al fallecer uno de los cónyuges, Masao Matsumoto, a la edad de 108 años.

Matsumoto y su esposa, Miyako, de 101 años, se casaron el 20 de octubre de 1937 y conservaban el récord Guinness desde el año pasado por ser la pareja en vida con la mayor convivencia conjunta.

Pero, según informa este martes el diario Asahi, el anciano pereció el pasado viernes en un asilo de la localidad de Takamatsu, al sudoeste de Tokio, dejando tras de sí a su esposa y a cinco hijas, que estuvieron a su lado en sus últimos momentos.

“Creo que ha vivido una vida feliz”, afirmó su segunda hija, Chizuyo Mano, de 76 años, en declaraciones reproducidas por el diario.

Ello a pesar de que durante la II Guerra Mundial Masao Matsumoto fue llamado a filas para cumplir el servicio militar en tres ocasiones, dejando a Miyako y a sus dos primeras hijas intentando sobrevivir en medio del conflicto bélico.

Pero pudo regresar a su hogar en 1946, aunque sólo era “piel y huesos”, según recordaba su esposa en palabras recogidas por Guinness cuando concedió el récord.

Al parecer, la longeva vida de ambos se debe, entre otras razones, a los platos que cocinó Miyako hasta que dejó los fogones, a la edad de 98 años.

Desde que nació, el 9 de julio de 1910, Masao Matsumoto vivió bajo cinco emperadores, desde Meiji, fallecido en 1912, hasta Naruhito, que llegó al trono el pasado 1 de mayo tras abdicar su padre, el ahora emperador emérito Akihito.

Según la menor de las hijas, Hiromi Sano, de 67 años, el anciano andaba mal de salud en los últimos años, pero en 2018 recobró bríos y el apetito, cuando se anunció el récord Guinness en favor de la pareja.

“Estaba encantado por ser capaz de vivir lo suficiente para ser testigo de la nueva era, Reiwa”, la que lleva el nombre del emperador Naruhito, agregó Sano.