Las columnas de la costa, en un estado calamitoso
El deterioro se extiende en distintos sector con varillas flameando por efecto del viento, columnas blancas convertidas en naranja por efecto del óxido y carteles rotos por las ráfagas con mitades colgando.
Varillas flameando por efecto del viento, columnas blancas convertidas en naranja por efecto del óxido y carteles rotos por las ráfagas con mitades colgando son algunas fotos de la situación actual de las columnas de iluminación y farolas ubicadas en la costa marplatense, en especial en la zona de Playa Chica y Cabo Corrientes.
Después de la caída, en horario matutino, de una farola ubicada en Playa Chica, durante la tarde LA CAPITAL recorrió la zona y comprobó el mal estado en que se encuentran las columnas de iluminación que, a la sazón, también funcionan como porta banners, muchos de los cuales ya quedaron derruidos por las inclemencias climáticas.
Sobre Boulevard Marítimo, entre Castelli y Roca, en la vereda del Parque San Martín hay instaladas 16 columnas de iluminación, pero el estado de las mismas es calamitoso: derruidas, cubiertas de óxido y muchas veces agujereadas por efecto de la erosión eólica y marina.
Justo enfrente a donde está instalada la estatua de autor misterioso, las altas columnas además funcionan como porta estandartes de banners publicitarios.
En las 12 columnas instaladas entre Castelli y el semáforo que habilita la bajada vehicular a Playa Grande, los banners ya se encuentran todos destruidos, pero acarrean un peligro extra: en la mayoría de los casos quedaron colgadas las varillas metálicas que los sostenían.
El viento los hacía “hamacarse” una y otra vez, mientras que algunos transeúntes circulaban por la zona sin saber que se exponían a ese peligro.
Por su parte, el mástil del parque San Martín perdió el blanco original y ya se muestra naranja, por efecto del óxido. Además, las pérdidas de agua son numerosas en ese espacio público verde, con múltiples lagunas que no se cansan de alojar a mosquitos.
La falta de mantenimiento también se puede observar en las columnas ubicadas enfrente a Cabo Corrientes, justo en la curva, donde los banners también quedaron partidos por el viento y hasta fragmentos de ellos quedaron desparramados en el asfalto.