por Natalia Prieto

El ministro de Economía de la provincia de Buenos Aires, Hernán Lacunza, acompañó a la gobernadora María Eugenia Vidal en su breve estadía en la ciudad y compartió tanto las reuniones que mantuvieron con los distintos actores del sector turístico como en la inauguración del 54° Coloquio de IDEA.

En una entrevista con LA CAPITAL, el funcionario reveló que las cuentas bonaerenses están “más ordenadas” que cuando asumieron, destacó las continuidad de la obra pública a pesar de la crisis y “la previsibilidad”, a la vez que se despegó del secretario de Economía de la municipalidad local, Hernán Mourelle, a quien consideró “un funcionario municipal que responde al intendente Arroyo”.

Por otra parte, reconoció que hay déficit pero dijo que se está “en camino” de no gastar más de lo que se genera; se mostró esperanzado en conseguir el dinero que reclamaron a la Nación por el Fondo del Conurbano; y consideró que los gremios docentes rechazan las propuestas recibidas por “intransigencia”.

– Está transitando las tres cuartas partes de su mandato al frente del ministerio de Economía ¿cómo está la dirección?

– Más ordenada que al principio, tenemos previsibilidad. También la reacción, la posibilidad de la provincia para actuar como amortiguador de la crisis y no propagador como ocurrió en otras oportunidades obedece a esa mayor previsibilidad que tenemos en las cuentas públicas. Las cuentas públicas no son del gobernador, ni del ministerio ni de ningún funcionario, sino que son de todos los bonaerenses. La manifestación más clara de ese beneficio es que este año, a pesar de la crisis, logramos bajar impuestos -sobre todo ingresos brutos y sellos y también impuestos a la energía en abril pasado-, pagamos sueldos, aguinaldos y proveedores en tiempo y forma, no como en otros momentos de la provincia que había muchos atrasos, misma la coparticipación a todos los municipios. Hoy un intendente sabe desde el primer día del año cuánto va recibir, cuándo y cómo.

– ¿Hubo atrasos en el envío de fondos?

– No hubo un día de atraso en estos tres años. Es más, pagamos la deuda de períodos anteriores. No paramos la obra pública y no nos endeudamos a tasas irracionales. Por ejemplo, ahora que la tasa está muy alta, la Provincia no sale a buscar fondos porque no es conveniente, entonces todas esas consecuencias son haber podido haber ordenado las cuentas públicas y dar previsibilidad al sector privado, a los empresarios, a los empleados públicos, a los contribuyentes, que no haya sorpresas.

– ¿Qué pasará con el reclamo que hicieron ante el gobierno nacional por el Fondo del Conurbano?

– Bueno, les planteamos al ministro de Economía, del Interior y al jefe de Gabinete de la Nación cual es el fundamento de nuestro reclamo.

– ¿Cuál es?

– Es que cuando se firmó el consenso fiscal, en diciembre pasado, la previsión inflacionaria para este año y el próximo era bastante menor, del 10 y del 5 por ciento. Y eso se ha visto superado por la realidad. Entonces, como en todo convenio, un acuerdo de buena fe que todas las partes firman, incluso con las otras provincias con una previsión determinada, si eso se altera mucho, lo que pedimos es actualizarlo. Eso es por el diferencial inflacionario y de ahí surgen los 19 mil millones de pesos.

– ¿Y el gobierno nacional lo va a pagar?

– Bueno, estamos en conversaciones, pero el argumento fue entendido y correspondido por Nación.

– Dijo que en la provincia de Buenos Aires no se paró la obra pública. ¿Cómo lo lograron a pesar de los recortes sufridos?

– Hubo recortes pero no afectaron a la obra que ya estaba decidida e iniciada, porque justamente no empezamos obras si no tenemos los fondos asegurados. Eso hace también que los bonaerenses sepan que todo lo que empezó se va a terminar.

– ¿Cómo están las cuentas del municipio de General Pueyrredon?

– La ciudad tuvo todo este periodo una transición difícil, fue una de las peores herencias a nivel municipal. Había mucho desequilibrio, se ha tratado de ordenar, fue un proceso bastante dificultoso. Igual, sigue siendo uno de los municipios más afectados por el desequilibro que tiene en sus cuentas.

– ¿El municipio sigue girando en descubierto?

– No lo sé, eso tiene que preguntarle al gobierno local.

– ¿El secretario de Economía local, Hernán Mourelle, fue enviado por ustedes desde la Provincia?

– No, Mourelle es un funcionario municipal que obviamente reporta al intendente (Carlos) Arroyo. Después, lo demás, es mitología.

– ¿En la provincia de Buenos Aires lograron el objetivo de no gastar más de lo que se genera, tal como dice el presidente Mauricio Macri?

– Estamos en ese camino. Todavía tenemos déficit. Teníamos déficit inicial, ahora lo logramos con lo que se llama el resultado operativo, el resultado corriente: para el funcionamiento de la provincia, que es pagar sueldos, transferir a las municipalidades y jubilaciones tenemos superávit, o sea, los impuestos alcanzan para eso. Cuando incorporamos la obra pública, ahí, tenemos déficit, o sea que si no hubiera obra no habría déficit y si no hubiera déficit no habría deuda. La deuda es para la obra pública. Le diría que lo logramos con el funcionamiento diario de la provincia. El déficit se debe a que había un déficit de infraestructura superior, muy importante, en rutas, agua y cloacas. La provincia se inundaba cada vez que llovía y eso lo estamos atendido con deuda.

– Ante el nuevo paro de docentes, ¿qué piensan hacer?

– Es un mecanismo que nosotros condenamos, nos parece que no es la solución. En la provincia hubo 176 días de paro en los últimos diez años y eso en nada ayudó a la educación pública, cuyos resultados están muy distantes de lo que todos queremos. Hicimos una propuesta la semana pasada, que entendíamos era la mejor que escuchamos tanto en el sector público como privado, un aumento del 31,7 en octubre y volver a juntarnos en diciembre, no obstante lo cual también fue rechazada. Así que hicimos 10 propuestas a lo largo del año, ninguna satisfizo. Notamos una intransigencia a cualquier propuesta que hagamos.