La declaración de Romina Ulloa Igor (29), la novia de Juan Jesús Piero Pinna (34), podría reformular la investigación que se desarrolla en esta ciudad por el asesinato de Maximiliano Rihl, ocurrido en la madrugada del último domingo durante una fiesta de cumpleaños.

A juzgar por el tono del reclamo de la fiscal María Florencia Salas a la familia de la testigo para que no trascienda la nueva versión de los hechos, se trataría de un enfoque totalmente distinto de lo ocurrido.

“Si quieren que la investigación no se entorpezca, ella no debería contar nada de esto a los medios”, le dijo la fiscal Salas a la ex diputada provincial, Estela García, madre de Romina Ulloa, en el segundo piso del edificio de Tribunales este mediodía.

Si bien se esperaba que Ulloa ofreciera una declaración para mejorar la comprometida situación de Pinna, quien está acusado del homicidio de Rihl y detenido por ahora en Tucumán, los datos que proporcionó sobre la secuencia de los sucesos son absolutamente novedosos.

“Se dijeron muchas cosas y queremos que se conozca la verdad”, dijeron desde el entorno de la mujer de 29 años en un breve contacto con LA CAPITAL. La propia Romina Ulloa al salir de la extensa audiencia en el despacho de la fiscal Salas se disculpó por no poder atender a los medios y acentuó ese deseo de que “se sepa todo”.

Vale recordar que el abogado de Pinna, Sergio Faiad, había dicho en Tucumán que el homicidio de Rihl había sucedido en una situación de legítima defensa. Dio a entender que tanto Pinna como su novia habían sido blanco de una agresión y que el ex rugbier tucumano pretendió defenderse con el arma, con el trágico resultado de la muerte de Rihl.

En esa línea se habría mantenido Ulloa al hablar con la fiscal Salas esta mañana y ante la incorporación de estos nuevos elementos será necesaria una batería diligencias para corroborarlos.

Llamativamente el balneario Horizonte donde se celebraba el cumpleaños del polémico empresario Mauricio Ríos (51) comunicó a la fiscalía que no contaban con las imágenes de las cámaras de seguridad. Según los dichos de un testigo, el DJ de la fiesta, la pelea se inició en una de las mesas y luego se trasladó al exterior.

Una vez fuera del salón Ariel Nuñez (49), empresario de la localidad de Quilmes, sufrió la fractura de una pierna en lo que habría sido una segunda etapa de la pelea que tenía a Pinna como principal involucrado. Luego de eso, el tucumano Pinna, acompañado por Romina Ulloa, se habría dirigido a su Toyota Corolla, tomó un arma y segundos después disparó. Cuatro proyectiles impactaron en Rihl, quien murió prácticamente en el acto.

Lo que tanto Ulloa como Pinna sostienen (Pinna por medio de los dichos de su abogado) es que en el momento previo a accionar la pistola calibre 9 milímetros se produjo una situación extrema en el que estuvo en riesgo la vida de ambos.

En la escena del crimen se rescataron 8 vainas servidas y un plomo, pero al no estar secuestrada el arma de Pinna no se puede saber si le pertenecen.