Con la cotización del dólar billete superando la barrera de los mil pesos, la mayoría de los productos de la canasta básica familiar sufrieron, en mayor o menor medida, una suba en sus precios en concordancia con la corrida.
Si bien los incrementos son sostenidos desde hace un tiempo, se aceleraron en los últimos días: según el rubro, los aumentos en lo que va de octubre oscilan entre un 10 y 20 por ciento.

“Las subas de los precios en los productos de la canasta básica viene siendo una constante desde hace varios meses, independiente de las oscilaciones en la cotización del dólar, aunque se fueron potenciando en esta semana preelectoral”, reconoció el representante local de la Asamblea de Pequeños y Medianos Empresarios (Apyme), Gustavo Casciotti.

Esa realidad se vio reflejado en los carteles de los precios de determinados artículos que, en muchos casos, se superponen con las nuevas cotizaciones debido a que los comerciantes no hacen a tiempo a cambiarlo.

Así las cosas, los incrementos en los principales productos alimenticios fueron “del 8, 9, 10 por ciento, lo que genera una lesión en los bolsillos más vulnerables, de menores ingresos, que son los que compran en los comercios de formato pequeño o mediano en los barrios de la periferia, donde no están las grandes cadenas”, explicó el dirigente pyme. Y, en ese sentido, reiteró sus quejas porque “el tope de aumentos en los programas como Precios Justos solo se dan en los supermercados de las grandes cadenas y nos dejan afuera a los comercios de cercanía, a las ferias comunitarias y a los supermercados chinos”, enumeró.

De esa manera, las listas de los proveedores se “resetean” semanalmente con aumentos que “van del 8 a 10 por ciento”, tal como viene sucediendo en estos primeros 10 días de octubre. Y, en algunos casos puntuales, ya comenzó a detectarse la falta de mercadería como por ejemplo “con un determinado aceite o el azúcar”, describió.

Cambios

La volatilidad en los precios abarca a todos los rubros. En una recorrida por carnicerías de diferentes barrios realizada ayer por LA CAPITAL, coincidieron en que la suba ronda “el 20 por ciento en este mes”. “La semana pasada no se habían movido los precios, pero comenzaron a aumentar entre el viernes y hoy”, especificaron en la carnicería de Alberti y La Rioja. Misma situación reseñaron en el eslabón de la cadena ubicado en Alem y Saavedra.

Eso se traduce en los cambios en las estrategias de compra. “La gente compra menos, se fija los precios y trata de buscar cortes económicos”, añadió el carnicero. También se eligen los días para comprar, por ejemplo a aquellas jornadas en las que rigen los descuentos -del 35 por ciento- de la cuenta DNI. “En éste marco verificamos cambios en los hábitos de consumo -describió Casciotti-. La gente  además de caminar buscando precios, elige segundas o terceras marcas”. Y reconoció: “Van espaciando las compras de determinados productos, porque los precios se volvieron inaccesibles, como las conservas de pescado, algunos fiambres como el jamón crudo o el yogur”.

No solo los precios de los alimentos crecen, sino también de la canasta de artículos de limpieza. “Hay una marca de lavandina que no la encontraba por ningún lado, ahora la conseguí, pero un 20 por ciento más cara”, contó Liliana, en la caja de un autoservicio ubicado en Independencia entre Garay y Rawson.

Algunos, incluso, optaron por stockearse comprando algunos productos al por mayor, como rollos de papel de cocina, papel higiénico y yerba.

Ayer, durante toda la jornada, los estacionamientos de los mayoristas ubicados en la zona de la avenida Champagnat y la ruta 88 se vieron colmados. “Mucho movimiento -señaló un empleado que pidió anonimato- y mucha espera en las colas. Como en la época de la pandemia, vinieron a stockearse con determinados productos”. Y contó que, en determinados horarios, “la gente tuvo que esperar porque no había carritos libres”.

Incertidumbre

En las ferreterías la situación fue similar. “Quieras o no, cuando el dólar aumenta se ve en los precios, se refleja. Este mes llevamos un aumento promedio de entre el 15 y 20 por ciento en casi todos los productos”, señaló Ariel desde detrás del mostrador de la ferretería de Italia y Alberti.

“En éste marco se incrementa la incertidumbre y cada empresa responde a su realidad”, describió el titular de la Unión del Comercio, la Industria y la Producción (UCIP), Blas Taladrid, aunque reconoció como denominador común en todos los rubros “el achicamiento de los plazos de pago”. “Los que pagaban a 30 días pasaron a 7 y los de 7 pasaron al contado”, explicó.

De acuerdo a un relevamiento de la entidad, los alimentos y las ferreterías fueron los rubros que más incrementos sufrieron “por cuestiones disímiles”. “En las grandes cadenas de supermercados -detalló el dirigente- aplicaron el aumento autorizado del 5 por ciento de Precios Justos y si llegaban artículos con aumentos superiores, los rechazaron”.

También reconoció que algunos proveedores “restringieron” las entregas, aduciendo “cualquier excusa”, no conformes con ese aumento. Asimismo, productos importados o enlatados se encarecieron “en un 15 por ciento”, mientras que ratificó que “en algunos mayoristas se vieron compras con fines de stockearse, como papel higiénico, porque se sabe que en algún momento lo vas a consumir y los pesos queman”.

Las ferreterías fue otro de los rubros con incrementos en los precios “de entre el 15 y 30 por ciento”. Incluso muchos restringieron las ventas hasta que se aclare el panorama porque no saben a qué precio van a tener que reponer.