LA PLATA
Corresponsal

El gobierno de Carlos Arroyo y el Sindicato de Trabajadores Municipales (STM) no lograron ayer en esta ciudad lo que no pueden desde principios de noviembre en Mar del Plata: ponerse de acuerdo en la paritaria municipal.

El municipio ofreció una recomposición salarial que deberá ser analizada por el cuerpo de delegados del Sindicato de Trabajadores Municipales pero que “no satisface las demandas del gremio”, tal como se lo explicó a LA CAPITAL Antonio Gilardi, secretario general del STM.

Pero tras la reunión celebrada en la sede del Ministerio de Trabajo en La Plata hubo consenso entre las partes para reencontrarse el próximo jueves, a las 12 para darle continuidad a la negociación.

Mientras tanto la retención de tareas que lleva más de dos semanas se sostendrá hasta que no haya una determinación en contrario de la asamblea. De todos modos, fue solicitado por los representantes de la cartera laboral que “la medida de fuerza se levante durante las negociaciones”.

“Fue una reunión desarrollada en un clima distendido”, aseguro a LA CAPITAL Horacio Barreiro, viceministro de Trabajo bonaerense.”Hemos ofrecido un 10 por ciento de aumento para octubre (retroactivo a pagar el 15 de enero) y 4% para diciembre. También el pase a planta de contratados temporarios a partir del 2 de enero”, sostuvo el funcionario provincial.

Según pudo saberse, no se aplicarían los descuentos por lo días no trabajados. En tanto uno de los representantes del Ejecutivo, además, deslizó que de continuar la medida de fuerza “se complicaría” el pago de sueldos de enero.

La oferta

El Ejecutivo ofreció un 10% de aumento retroactivo para octubre y un 4% para diciembre, además del pase a planta de 200 empleados con contrato temporario.

Antonio Gilardi, titular del STM, dijo que hoy será analizado por los delegados. “En definitiva son los que van a tomar la decisión de los pasos a seguir. En principio es una propuesta que no satisface”.

Los trabajadores volvieron a escuchar un ofrecimiento que elevaría el incremento salarial de 2018 a un 32% (10% retroactivo a octubre y 4% en diciembre), dejando el salario 15 puntos por debajo de la escalada inflacionaria anual, con la posibilidad de reabrir la paritaria en marzo de 2019, año en el que se prevé que desde gobierno ofrezcan un 20% escalonado (lo que les dejaría recuperar los puntos que pierden hoy, pero no los del año próximo) algo a lo que seguramente no van a acceder.

El Ejecutivo hizo esa propuesta salarial la semana pasada. Ofreció un incremento de 14% a diciembre, para llevar el aumento anual a 32%, y la reapertura de la mesa paritaria a partir de febrero. La primera reacción del STM fue desconocer la presentación. “No lo hicieron formalmente”, dijo Gilardi durante una concentración de trabajadores frente al palacio municipal. “Lo cierto es que en esa manifestación hubo un rechazo generalizado a la propuesta”, contaron en el STM, donde buscan un acuerdo salarial que se acerque al 50% de inflación prevista para este año. Ahora se oficializó aquella propuesta.

Por el momento, los municipales percibieron una suba de 12% en el primer semestre, a lo que se sumó un 6% en agosto, lo que redondea un 18%.

En el gobierno sostienen que el salario no va a igualar el índice inflacionario, pero prometieron “recuperarlo en 2019” en tanto “haya buena voluntad de entender la postura del municipio”.

“No da solución”

Visiblemente agotado tras una reunión que duró más de 4 horas, el secretario general del Sindicato de trabajadores municipales, Antonio Gilardi, remarcó que “ha hecho una propuesta el Ejecutivo, prácticamente igual que la anterior con otra forma y que no da solución a los requerimientos de los trabajadores. De cualquier manera mañana vamos a informar a los compañeros en una reunión de delegados y en definitiva serán ellos los que decidan aceptar o no”.

Sobre la propuesta informó “ofrecen un 10% para octubre y un 2% para diciembre y el salario quedaría más de 15 puntos debajo de la inflación de 2018. También ofrecen el pase a planta de los trabajadores, el funcionamiento de la junta de ascenso y el tema de los docentes no tuvo tratamiento porque está en el marco de la justicia”.

Consultado sobre la posibilidad de ese 20% escalonado que podría haber intervenido en la negociación, el representante de los trabajadores aseguró que “queremos cerrar el 2018. El 2019 es otra discusión que se dará en otro momento y se verá. Indudablemente esta es una propuesta que no satisface lo que se había planteado oportunamente y la necesidad de no caer tan abajo del índice inflacionario”.

Pagar lo que se puede

Por su parte, el secretario de Gobierno, Alejandro Vicente, indicó que “reformulamos la propuesta de recomposición salarial que hicimos la semana pasada. El Ministerio de Trabajo medió en el conflicto e hicimos una propuesta integral que incluía un aumento salarial retroactivo a octubre de un 10% y un 4% sumado en diciembre, con lo cual la masa salarial del trabajador se incrementa. Además se incluyó la propuesta de comenzar con la junta de reencasillamiento del personal para establecer los ascensos de los trabajadores municipales y el compromiso del pase a planta permanente de los trabajadores temporarios, y armar una mesa de trabajo con la provincia el municipio y el sindicato para discutir a partir de marzo el Convenio Colectivo de Trabajo, para que rija la relación laboral entre el municipio y sus trabajadores”.

El funcionario municipal informó sobre el pedido de levantamiento de las medidas de fuerza de los trabajadores por parte de los funcionarios vidalistas al decir que “el ministerio de trabajo instó al sindicato para que deje sin efecto las medidas de fuerza mientras realiza las consultas pertinentes y convocó a una nueva audiencia para el 3 de enero próximo en esta misma sede”.

Consultado sobre los puntos que perderían los trabajadores al aceptar una propuesta que terminaría un 15% por debajo del acumulado inflacionario, el marplatense sentenció que “es un efecto no deseado de la propuesta salarial. Todos los trabajadores que han sufrido la circunstancia de la alta inflación lo ven a diario, no se trata de querer perjudicar al trabajador municipal, sino de hacerle esta propuesta que es lo máximo que puede pagar la comuna o por lo menos dentro de las posibilidades, con recursos genuinos, con recursos propios para poder hacerlo en término dentro del plazo legal”.

Por el ministerio, participaron del encuentro el viceministro laboral provincial, Horacio Barreiro; la directora de Relaciones Laborales, Mónica Souza; el director de Delegaciones Regionales, Juan Jacket; y el delegado regional de Trabajo en Mar Del Plata, Gustavo Serebrinsky. Representando a los trabajadores municipales estuvieron el secretario General de Fesimubo, Rubén García; el apoderado de FESIMUBO, Enrique Espínola Vera, el secretario gremial del STM, Cristian Milasincic; el secretario General de STM, Antonio Gilardi; y el secretario de Seguridad e Higiene municipal, Gastón Armendariz.

Por el Ejecutivo estuvieron el secretario de gobierno, Alejandro Vicente; y el secretario de Producción Máximo Macchiavelo.

Concentración

Para hacer visible el reclamo de recomposición salarial, el gremio concentró ayer en las puertas del municipio. Lo acordaron los integrantes de la comisión directiva y el cuerpo de delegados en una reunión en la que volvieron a hablar de las “presiones” del gobierno de Arroyo para que los empleados no sigan con la medida de fuerza.

El sindicato ya presentó en la delegación local del Ministerio una denuncia. “El Ejecutivo no respeta el derecho constitucional a huelga”, dijo el secretario de Prensa, Luis María Muñoz. “Igualmente, el Ministerio está realizando las inspecciones para ver si se cumplen las guardias mínimas que garantizamos y si los empleados están en sus puestos de trabajo”, agregó.

La retención de tareas comenzó el martes 11 de diciembre, un día después de que concluyera la prórroga de la conciliación obligatoria dispuesta por el Ministerio. Al día siguiente hubo un paro con movilización y luego el gremio restableció la medida original, que consiste en concurrir a los lugares de trabajo pero no desempeñar ninguna tarea.

El impacto del conflicto se nota en la suciedad de los espacios públicos, la falta de reparaciones de luces y asfalto, la falta de atención en las salas de salud y el CEMA y la no entrega de carnets de conducir, entre otros aspectos.

También se advierte en la falta de inspectores en la calle, lo que convierte al tránsito en un caos en los primeros días del verano.

En Nochebuena, para tratar de disimular la carencia, el secretario de Gobierno salió a hacer controles de alcoholemia junto a los subsecretarios de Transporte y Tránsito, Claudio Cambareri; Inspección General, Emilio Sucar Grau, y Seguridad, Marcelo Lencina. Realizaron 20 test en Alberti y la costa y todos dieron negativo. “Fue sólo para la foto”, criticaron en el STM.