El hombre, 60 años, detuvo el taxi en la puerta del COM, en la avenida Juan B. Justo, al detectar al intendente Guillermo Montenegro, quien salía del edificio tras una reunión matutina. Con respeto y cierta timidez lo abordó en la misma vereda. “Señor, quiero felicitarlo y agradecerle por el trabajo que están haciendo. En Mar del Plata la verdad estamos bárbaro, casi sin casos de coronavirus y eso es un alivio. Pero le pido un favor: haga abrir todo lo que se pueda porque de lo contrario nos fundimos”, casi suplicó. Montenegro lo escuchó con atención, agradeció los conceptos, lo saludó con el codo y respondió que esa era la idea pero “con tranquilidad, cuidando que todo el esfuerzo hecho no quede en la nada. Créame que soy el primero que quiere que todo vuelva a la normalidad”, remarcó.

En el pedido del “tachero”, se resume sin dudas el sentir de miles y miles de marplatenses que ya claman por volver al trabajo por encontrarse ahogados económica y financieramente. El sábado será una jornada clave. El Presidente de la Nación deberá anunciar la modalidad a implementar en la prolongación de la cuarentena que finaliza el domingo 10. No se reanudarán las clases ni las actividades estatales, pero lo que sucederá con el resto es una verdadera incógnita. La forma de movilizarse de los trabajadores es lo que más preocupa en estas horas a las autoridades nacionales para definir los grandes lineamientos de las nuevas medidas, aunque nuevamente se determinará que serán las distintas jurisdicciones, en nuestro caso Provincia y municipio, quienes consensúen la “letra chica” de la nueva cuarentena. Porque, cabe destacarlo, el haber permitido en Mar del Plata la reanudación con cuenta gotas de algunas actividades –las últimas autorizadas fueron para el tejido de punto, industria metalúrgica y el desmantelamiento de carpas e instalaciones de balnearios- implicó la elevación de protocolos y permisos teniendo la última palabra la Provincia. Cada municipio tiene una realidad distinta. Mientras Pinamar autorizó la reanudación de las obras privadas hace dos semanas, en Mar del Plata, para el mismo rubro, se aguarda el ok del gobierno de Kicillof.

La ciudad afronta una situación por demás paradójica. Por los resultados en material sanitaria, en el combate contra el coronavirus, se exhiben estándares que merecen el elogio de los principales sanitaristas del país. Con una población que orilla el millón de habitantes, seis semanas después de haberse iniciado la cuarentena, con un amplio sector de su comunidad siendo parte de las franjas de altísimo riesgo, hoy Mar del Plata cuenta con sólo un caso activo, registrando apenas 17 personas infectadas a lo largo de todo este tiempo. “Es el mejor comportamiento de todos los grandes conglomerados urbanos del país”, reconocen desde el Ministerio de Salud de la Nación. Al mismo tiempo, esta realidad –cabe recordar que desde algunas entidades científicas locales estimaban en 1.500 los casos para estas horas, donde apenas hay 17- lleva a comerciantes, empresarios e industriales a reclamar la inmediata reapertura de las actividades comerciales en una ciudad que ya venía castigada antes de la pandemia, con índices de desocupación y pobreza que claramente se incrementaron en estos días. La cadena de pagos está rota en vastos sectores, y muchos aducen que no pueden soportar más semanas sin actividad.

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Las quiebras, cierres de comercios y despidos de personal constituyen una amenaza cierta. ¿Quién hubiese imaginado que la CGT impulsaría un acuerdo con sectores industriales, y con el aval del Gobierno para reducir salarios de los trabajadores? La realidad ha superado cualquier cálculo previo. En la Municipalidad también se necesita imperiosamente que la ciudad se ponga en marcha. La recaudación tributaria local cayó a niveles inimaginables, y ya para abonar los sueldos de los municipales del pasado mes de abril, Montenegro debe acudir al auxilio financiero de la Provincia, como prácticamente la mayoría de los intendentes bonaerenses que han destinado la mayor parte de sus fondos al sistema sanitario, precario por cierto. No hay que olvidar que la mentada necesidad de “extender la curva de contagios” se basa pura y exclusivamente en las deficiencias del sistema de salud argentino que no está preparado para recibir al mismo tiempo a centenares de contagiados. La ciudad y la Provincia tienen coincidencias en la materia. No fue por casualidad que Nicolás Kreplak, viceministro de Salud de la provincia, mirando hacia el conurbano y a algunos sectores del interior bonaerense, haya señalado que la cuarentena debe continuar “todo lo posible”, incluso hasta después del invierno. En este contexto, mucho pesará a la hora de tomar decisiones por parte del Presidente, la opinión del grupo de expertos en salud que lo está asesorando. Uno de los profesionales más destacados es el doctor Pedro Cahn. El legendario epidemiólogo es categórico. “Si no les gusta la cuarentena prueben la terapia intensiva y morirse”, disparó sin anestesia.

Las dificultades económicas y financieras también llegan al corazón de la comuna, donde la recaudación se redujo notablemente al tiempo que la coparticipación hoy no existe. En estas horas deben abonarse los sueldos de los trabajadores municipales –cerca de diez mil personas-, lo cual implica una suma cercana a los 650 millones de pesos. Si a eso se le suma el contrato de la recolección de residuos -168 millones de pesos mensuales- se determina que hay 820 millones de pesos a abonar sólo entre ambos conceptos. Para hacer frente a tales erogaciones, la comuna utilizará 140 millones de pesos provenientes de los fondos afectados –liberados con autorización del Concejo Deliberante-, y otros 190 millones de pesos girados por la provincia de Buenos Aires (llegaron 130 y faltan 60) más la recaudación por las diferentes tasas. De prolongarse este panorama, el próximo mes deberá ser necesario volver a acudir al socorro financiero del tesoro provincial, seguramente por sumas más altas. Un panorama por demás complicado.

En la provincia hay disponibles 11.723 camas, de las cuales están ocupadas 5.667 y sólo 600 tienen pacientes con coronavirus. En Mar del Plata, en tanto, hay poco más de 1.600 camas –la mitad corresponde al sector privado- y mientras la Organización Mundial de la Salud recomienda de 8 a 10 camas por cada 1.000 personas, en este distrito sería de 1,5. En estas horas ninguna de esas camas están siendo ocupadas por infectados con el Covid-19. Sin embargo, todo puede cambiar vertiginosamente en cuestión de horas. “¿Preferías que a esta altura hubiera 1.500 casos y cien muertos en Mar del Plata?”, pregunta visiblemente molesta la reconocida epidemióloga al periodista que le expresa su preocupación por la economía lugareña. Y añade: “Sería bueno que todos los militantes del ‘abramos todo ya’ sepan que con 100 respiradores para todo Mar del Plata no se van a poder hacer milagros cuando los contagios sean masivos”. Mar del Plata, volvió a recalcar la secretaria de Salud, Viviana Bernabei, no tiene circulación comunitaria del virus. Mar del Plata hoy es una isla. A menos de 400 kilómetros, en La Plata, el virus ya está circulando y se llevan registrados 54 casos (17 en Mar del Plata). Sin embargo, en la capital bonaerense no hubo fallecimientos, mientras que en este distrito se registraron dos. “Es difícil encontrar parámetros y espejos donde mirarse”, coinciden en señalar los especialistas. En este contexto, son horas cruciales para la adopción de medidas por parte de las autoridades.

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El intendente –lo mismo sucede con el gobernador y el Presidente, sin dudas- tiene sobre su escritorio informes de sanitaristas y especialistas, recomendaciones y sugerencias, y junto a ellos, documentos que también evidencias las consecuencias de la pandemia en el aspecto económico. “Es el momento para comenzar a reactivar la economía”, sostuvo Montenegro mientras un amplio informe de especialistas determinaba que la capacidad instalada utilizada en la industria local se ha visto reducida a la mitad a partir del comienzo del aislamiento, con empresas con valores iguales a cero y con una fuerte caída de las ventas. El principal problema financiero mencionado es la ruptura en la cadena de pagos, lo cual se profundizará en tanto persista la baja demanda o la falta de permiso para operar. Mientras, ocho de cada diez familias postergaron el pago de deudas en abril. Son 11,1 millones de hogares que deben 1,7 billones de pesos entre gastos de tarjeta de crédito, préstamos y distintos servicios. Se resalta que el Estado está intentando auxiliar económicamente a millones de personas, con subsidios, créditos, postergación de pagos y hasta el pago de parte de los sueldos, pero también es cierto que todo ello no alcanza…

Con una economía en negro monumental –son miles los trabajadores que se encuentran en tal situación-, esos beneficios no llegan. “Dejar de pagar compromisos y acumular deudas fue una de las estrategias de las familias para sobrevivir sin ingresos o con recortes de ingresos en marzo y abril. Esa situación tenderá a agravarse incluso a pesar de las ayudas del Estado en mayo, ya que los ingresos hoy se están utilizando mayormente para alimentos y otros gastos corrientes necesarios e impostergables. Es decir, la mayoría no tiene espacio para pensar en cancelar deuda”, sostiene un informe elaborado por el Centro de Economía Regional y Experimental.

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Todos los esfuerzos desde la Municipalidad, en relación a la reanudación de actividades, están enfocados en lo inmediato en permitir que se reactive la construcción privada y comience a funcionar a pleno el Parque Industrial. Se espera que la Provincia apruebe el protocolo elevado por el municipio, trabajo que fue consensuado entre el gobierno local, la Uocra y las cámaras empresarias del sector. El presidente del Colegio de Arquitectos, en una de las reuniones, sostuvo que las obras privadas representan un 92 por ciento del total de la mano de obra, y un 10 por ciento del producto bruto global de la ciudad. En tanto, uno de los principales empresarios del sector se mostró confiado en que se puedan reanudar las tareas con absoluta responsabilidad y manteniendo los protocolos. “Las medidas de seguridad sanitaria se pueden tomar sin problemas ya que se trata de una actividad al aire libre. En cuanto al transporte de los trabajadores, la mayoría se mueve en bicicleta, moto o automóvil y no mayoritariamente en micro como puede llegar a creerse”, refirió.

“La situación del sector es angustiante tras 46 días de parálisis total de la actividad, mientras el Estado no ha otorgado la asistencia para el pago de sueldos a la gran mayoría de las empresas constructoras. Es imposible seguir y peligra la continuidad de una enorme cantidad de pymes y el sustento de miles de trabajadores que a diario se expresan en el gremio ante una situación acuciante de gran vulnerabilidad”, expresaron el lunes, en un documento, la Uocra y el Centro de Constructores de Mar del Plata. Además reclamaron la apertura de la actividad de la obra privada con las “mismas garantías sanitarias fijadas para la obra pública”. En este sentido, hicieron referencia al hospital modular donde están trabajando 70 personas, obra en la que “se respeta el protocolo de seguridad y no se han presentado casos de contagios”.

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La necesidad de comenzar a percibir ingresos ha llevado a numerosos comerciantes a violar la cuarentena vigente. “No me queda otra”, señala el propietario de una inmobiliaria de la avenida Tejedor. A pocos metros, una pinturería también abrió sus puertas, al igual que una vinería, una peluquería y un taller mecánico. Panorama similar se registra en numerosos barrios. Mientras, otros comerciantes buscan alternativas. “Bajó la venta un 30% más o menos, pero seguimos abiertos y también con la tienda online. Tenemos 16 locales diseminados en toda la ciudad y empezaron a vender mucho mejor los de barrio que los del centro, por el tema de que la gente va porque son de cercanía y en el centro no hay casi movimiento”, sostuvo Patricia Martí, del departamento de compras de la tienda de golosinas Zanetti. En tanto, los restaurantes trabajan con el sistema de delivery preparando platos del día con buenas ofertas. “Empezamos a preparar dos opciones diarias a precios económicos y esto ha permitido que estemos todos trabajando. De hecho hasta del delivery nos encargamos todos, los mozos, los cajeros, los cocineros. Una forma de hacerle frente a esta situación”, dicen los responsables de Sarasanegro.

El jueves poco después de las once de la noche, sonó el celular de la entonces ministra de Desarrollo para la Comunidad de la provincia, Fernanda Raverta. “Hola, soy Alberto…”. La charla con el Presidente de la Nación sorprendió a la ex candidato a intendenta. Le tomó unos minutos recuperarse y procesar lo que acababa de escuchar. Inmediatamente llamó a su compañero de vida y militancia, Pablo Obeid, titular de la Anses Mar del Plata. “Me convocó el presidente a una reunión para mañana a las 11. Quiere que me haga cargo de la Anses”, refirió. Obeid se había enterado minutos antes del pedido de renuncia al director ejecutivo de la Anses, Alejandro Vanoli, viendo televisión, pero seguramente jamás imaginó que sería Fernanda Raverta la reemplazante…y su nueva jefa máxima. Luego la marplatense se comunicó con el gobernador. “Pierdo a una gran funcionaria pero no puedo menos que felicitarte”, le dijo Axel Kicillof.

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Ya en la mañana del viernes Alberto Fernández no sólo le ratificó el ofrecimiento sino que le pidió que se enfoque en una gestión “cerca de la gente. Sé quién sos y cómo trabajas y confío en tu capacidad”, añadió el primer mandatario. Al mismo tiempo, en declaraciones a la prensa, el jefe de Estado reconocía que “no estaba funcionando bien Anses y le pedí a Alejandro Vanoli que dé un paso al costado. Fernanda Raverta –añadió- es una mujer extraordinaria en términos de honestidad, de compromiso y de conocimiento”. Esa misma tarde, Raverta y parte del equipo que la acompañó en el Ministerio, se instaló en la sede de la Anses en Córdoba 720. “Nos internó viernes, sábado y domingo ahí. Entrábamos a las 9 y nos íbamos a las 12 de la noche. No había nadie laburando. Entre la cuarentena y el feriado del primero de mayo no había absolutamente nadie, por lo que se convocó en forma urgente a las autoridades de las distintas áreas para comenzar a realizar un diagnóstico de situación”, reveló uno de los colaboradores de confianza de Raverta que no se cansa de resaltar la capacidad de trabajo que tiene la ex diputada nacional. Concretamente se le pidió a la nueva funcionaria que se diferenciara claramente de Vanoli, quien “no le atendía al teléfono a nadie”. “Se necesita mucha cercanía, trabajo con la gente y gestión compartida con gobernadores e intendentes”, le reiteró el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, en otro de los encuentros.

El sábado, Raverta –quien, cabe recordarlo, fue jefa de la Unidad de Atención Integral (UDAI) de la Anses en el Puerto de Mar del Plata, hace una década exactamente- llamó a cada uno de los gobernadores argentinos y al jefe de gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta. Les pasó su número de celular y se puso a disposición para “trabajar codo a codo, más aún en este delicado momento”. Un gesto que fue valorizado por los mandatarios provinciales, quienes venían reclamándole al Presidente tener un acceso más directo a la Anses. La referente del Frente de Todos de Mar del Plata pasa ahora a jugar en las grandes ligas de la política. “Ahora va a manejar un transatlántico. La Anses es el principal espacio de financiación del Tesoro Nacional. Si a Fernanda le va bien salta a la cancha nacional, en cuanto a su futuro político, en forma directa”, comentaba este fin de semana un funcionario del gabinete de Montenegro, quien recibió con beneplácito la designación. “Es un buen desafío para ella y es muy bueno para Mar del Plata”, refirió Montenegro luego de felicitarla en comunicación telefónica.

“Por la Anses pasaron Aime Boudou y Sergio Massa. Uno fue vicepresidente y el otro es el presidente de la Cámara de Diputados. También es cierto que pasó por allí Emilio Basavilbaso, que era de los nuestros, sin pena ni gloria. Pero la Anses es un trampolín político tremendo”, continuó diciendo el funcionario marplatense, quien resaltó que a su entender “Raverta no va a a descuidar Mar del Plata. Ella es la jefa política de la oposición y siempre dijo que soñaba con ser intendenta, aunque ahora el mapa haya variado sustancialmente”, añadió. En cercanías de Montenegro, además, creen que hay un endurecimiento, un crecimiento del ala dura del kirchnerismo. “Cuando llegó el avión de Cuba con la ex presidenta cambió todo. Hubo una decisión global de ponerse enfrente de la actitud dialoguista y de consenso de Alberto. No es casual que en estas horas le estén pegando tanto a Horacio (por Rodríguez Larreta) y que vuelva a crecer la grieta”, reflexionó el funcionario, quien también remarca una mayor virulencia en la oposición del Concejo Deliberante. “Es parte de la política y nosotros no nos vamos a apartar un centímetro de nuestro lineamiento de diálogo, consenso, y trabajo en conjunto. Esto, y ahora más que nunca, o lo sacamos a flote entre todos o nos hundimos todos juntos”, apuntó con crudeza.

La Cámara de Diputados de la Nación se prepara para sesionar este jueves y será la primera vez en la historia que se voten leyes en forma virtual. En esto mucho han tenido que ver dos marplatenses, tales los casos del ex diputado provincial y actual secretario general de la Cámara de Diputados, Juan Manuel Cheppi, y el director de Modernización de la Cámara, Manuel Cotado. En las paredes del recinto se colocaron pantallas LED gigantes que cubren todo el ancho del semicírculo y allí serán exhibidas las imágenes de cada uno de los legisladores que seguirán el desarrollo de la sesión en forma remota. Durante el fin de semana se llevaron a cabo numerosas pruebas de estrés a la herramienta tecnológica que se implementará junto a la aplicación desarrollada por los programadores de la Cámara, se estableció. Con el consenso unánime de todos los bloques, la Cámara de Diputados aprobó, con dictamen incluido, el protocolo de funcionamiento para las sesiones remotas, modalidad que reemplazará, mientras dure la pandemia de coronavirus, al formato tradicional de sesiones presencial.

Justamente Juan Manuel Cheppi había recomendado que cada diputado participe de la sesión desde el lugar en que mejor conexión pueda llegar a tener. En materia de seguridad, dijo, se trabajó con Arsat, con asesoramiento del Ministerio de Defensa, y remarcó que el acuerdo con Arsat permitió hacer una consultoría y una especie de autohackeo. “Este tipo de iniciativas –aseguró Cheppi- son muy buscadas por el mundo hacker para mostrar debilidades” por lo que se trabajó fuertemente en robustecer el sistema. Manuel Cotado, en tanto, coincidió en remarcar los cambios que se están produciendo, en algunos casos, acelerados gracias a la pandemia. “Estamos abandonando las grandes cantidades de papel por archivos digitales, los proyectos de ley se presentan por mail, las resoluciones se pueden firmar digitalmente y ahora también realizamos las reuniones de comisiones a distancia por videoconferencia”, detalló. En cuanto a lo específico de esta sesión virtual, se aclaró que se desarrolló una plataforma propia de la Cámara que permitirá la identificación de cada legislador, a través de un sistema de validación. Será la que otorgue el presente con la cual se conforme el quorum y se pueda realizar la votación. La certificación de la identidad de cada legislador se realiza con el servicio Renaper que cuenta con dos centros de datos independientes que funcionan de forma sincronizada, se detalló.

Hay mucha gente en Mar del Plata trabajando sin descanso en estos días. Rodolfo “Manino” Iriart se puso al frente de los controles de accesos a las ciudades. Coordina desde el Ministerio de Seguridad provincial con municipios y la policía. Hasta ahora los resultados son positivos y los propios intendentes lo reconocen. En Mar del Plata y la zona no se registra circulación comunitaria del coronavirus, pero semejante esfuerzo también trae sus consecuencias. El ex diputado provincial, pudo saberse, por prevención no ve a su familia desde hace varias semanas. Está en la primera línea, expuesto. Por eso optó por no volver a su casa y dormir en la casa de un colaborador. “Está aislado de sus seres queridos por prevención”, detalló uno de sus hombres de confianza. Mantiene contactos telefónicos y videollamadas con su mujer (la diputada bonaerense Débora Indarte) y sus tres hijos. Teniendo en cuenta que este martes es su cumpleaños, el pasado lunes se realizó un test en un laboratorio privado que arrojó resultado negativo, lo cual lo habilitó para ver a su familia un rato, al menos para cortar la torta y luego volver a las rutas.