Nacida en plena pandemia, con el arte como estandarte para combatir la quietud interior, la desesperanza y el “no se puede”, la murga marplatense Despuntando Vicios nació como emergencia de la palabra y el canto, pero también para el afuera, pensando en la difusión del género y en la escucha del pueblo.

Dirigida por Pablo Martínez Ferrari, esta agrupación está formada por 18 artistas con experiencia en la murga uruguaya. Además, un equipo de más de 30 personas suman maquillaje, vestuario y escenografía.

En el espectáculo que fue titulado “No todo está en venta” que subirá a escena esta noche a partir de las 21 de este sábado en el Auditorium, se pone en discusión la impoluta vigencia del “cuanto tengo, cuanto valgo”, la venta, la compra, el dinero y las deudas, el poder y la necesidad, el consumo y el tiempo, la vida, la muerte y los abrazos. Este grupo asoma la cabeza después de un tiempo muerto, momento histórico de quietud y silencio.

El coro de Despuntando Vicios está integrado por Miguel Arriaga, Sebastián Gómez, Emanuel Palavecino, Iván Bassi Bengochea, Ignacio Rabinovich (primos), Marita Moyano, Rocío Baraglia, Belén Bravo (sobreprimas), Franco Amoros, Juan Xifra, Jorge Ruggiero, Juan Álvarez, Santiago Guarco, Manuel Orbea (segundos), Braulio Lartigue (redoblante), Giuliana Mastragostino (bombo), Federico Campis y Gonzalo Campo (platillos).