Ubicado en el corazón del barrio Constitución, el Jardín de Infantes y Casa del Niño Juanito Bosco busca dar una lección que trascienda las paredes de las salitas. Afectados por la presencia de microbasurales en sus inmediaciones, una problemática presente en varias zonas de la ciudad, el establecimiento decidió poner manos a la obra y resolver por su cuenta la situación.

La directora del lugar, Mariela David, habló con LA CAPITAL y detalló cómo lograron, junto a las familias de los más chicos, transformar la esquina de Miguel Sagastizabal y Manuela Pedraza, por entonces repleta de residuos, en un espacio de oración con la imagen de la Virgen de Luján y un cantero con flores.

“Todo comenzó con una reflexión que fuimos haciendo, primero en función de la realidad del barrio, que tiene varios de estos basurales a cielo abierto, y después en lo que implica esto para la salud”, detalló la educadora.

Según dijo, la acumulación comenzó con restos de poda, pero en poco tiempo la esquina que da justo al espacio de juegos de los alumnos del jardín se transformó en el espacio elegido por vecinos y no vecinos para depositar sus desechos individuales.

“Yo misma vi cómo autos y camionetas frenaban para tirar su bolsa de basura”, recordó, indignada.

Observado esto, tanto Mariela como el resto del personal educativo de la institución comenzaron a preocuparse por la salud de los chicos.
“No es sólo una cuestión de que quede mal a la vista, hacía mal a la salud. El olor era horrible”, detalló.

Vieron entonces la oportunidad para impulsar un proyecto educativo “basado en el cuidado de la naturaleza, de la higiene y en el amor a la Madre de Jesús”. Junto a la ayuda de los padres y abuelos de los chicos comenzaron así a construir la estructura donde colocarían la imagen de la Virgen y el colorido cantero que lo rodearía.

“Por supuesto que los chiquitos no podían ayudarnos a remover la basura, pero hicimos con ellos un importante trabajo de concientización”, señaló la mujer, quien además explicó que muchas de las familias que acuden al lugar, la mayoría de los barrios Parque Peña y Alto Camet, hacen de la basura su trabajo.

“Es nuestro granito de arena y esperamos que sea el punto de partida y que se empiece a contagiar. Hay que dejar eso de ‘yo cuido lo mío, no me importa el otro’ y llevar la basura a otro lugar que no sea la puerta de nuestra casa“, reclamó la mujer, asegurando estar “esperanzada” de que así sea.

El Jardín de Infantes Juanito Bosco también se encuentra transitando el año de sus “Bodas de Plata”. Con 25 años de trayectoria en la ciudad, el establecimiento trabaja de manera incansable en “la educación y promoción humana de miles de niños de los barrios periféricos de la zona norte de nuestra ciudad, que desayunan, almuerzan y meriendan” en el establecimiento educativo.

La inauguración del espacio tendrá lugar este lunes a las 11, en concordancia con el día de la Virgen de Luján. El pequeño acto contará con las palabras y bendiciones del Padre Silvano, párroco referente del barrio y comprometido con la causa.