Por Juan Miguel Alvarez

Matías Soulé tiene apenas 18 años y muchos sueños realizados. Pero también otros tantos por cumplir, como tirar paredes con Lionel Messi, su gran ídolo. Eso seguramente ocurrirá durante los próximos días, en los entrenamientos de la Selección Argentina, previo a los choques con Uruguay y Brasil por las Eliminatorias Sudamericanas.

Soulé es una de las gratas sorpresas en la lista de Lionel Scaloni. Fue convocado al seleccionado albiceleste incluso antes de debutar en el primer equipo de Juventus. Pero hay una explicación: el mediocampista ofensivo zurdo es una de las grandes promesas del fútbol argentino, de hecho, el año pasado fue elegido entre los cien mejores jugadores jóvenes del mundo.

Matías nació el 15 de abril de 2003, en Mar del Plata. Fue “con una pelota abajo del brazo”, según le contó meses atrás a LA CAPITAL. Adquirió de su padre, Néstor, la pasión por el fútbol e Independiente de Avellaneda.

A los 3 años, el pequeño ya quería jugar en un club. Y si bien era muy chico, el querido y recordado Carlos Soria le hizo un lugar en Argentinos del Sud. Pero también tuvo mucho “potrero”: todos los días jugaba en la “canchita” de su barrio, el SOIP.

Los inicios de Matías en Argentinos del Sud.

Cuando llegó el momento de pasar a “cancha de nueve”, se mudó a Kimberley, club con una de las mejores divisiones menores en la ciudad.

“Yo siempre quiero ver a los chicos durante una semana para que tengan tiempo suficiente para desenvolverse, porque al principio no están tan sueltos. Recuerdo claro el primer día que vino Matías porque hizo cosas que no se las vi a otros nenes. En un trabajo reducido empezó a tirar fantasías. Me impresionó con su dribling” contó Ignacio Méndez, uno de sus formadores en el club de la Avenida Independencia.

Con la categoría 2003 de Kimberley ganó varios títulos, entre ellos el anual de la Liga Marplatense, en 2011.

Soulé (10) celebra el título de la LMF 2011 con Kimberley 2003. Foto Diego Berrutti.

Con apenas 11 años, el marplatense se fue a jugar a Vélez Sarsfield. Y nunca dejó de aprender y crecer. Tal es así que fue convocado a las selecciones juveniles de Argentina, incluso dando uno o dos años de ventaja.

Durante un torneo internacional en Portugal llenó los ojos de los “captadores” de instituciones muy prestigiosas a nivel mundial. Todavía no tenía contrato en Vélez y recibió propuestas de Atlético Madrid, Monaco y Juventus.

Finalmente, se inclinó por el club de la ciudad de Torino, hacia donde partió acompañado por su familia: Néstor, Virginia (madre), Agustín (hermano) y poco después Candela (su novia).

Tras una salida conflictiva de Vélez, por la “patria potestad”, debió afrontar un largo tiempo de inactividad. Llegó a Italia en enero de 2020, pero por lesiones y la pandemia apenas jugó dos partidos ese año.

Claro que todo cambió en un 2021 inolvidable. Pronto se ganó la titularidad en el Torneo Primavera (Sub 19), el certamen más importante de inferiores del Calcio: marcó 5 goles en 28 partidos. Por sus actuaciones destacadas, fue elegido en el “Equipo Ideal” del campeonato.

En julio, fue convocado por el entrenador Massimiliano Alegri para realizar la pretemporada con el plantel superior de Juventus. El DT lo tuvo muy en cuenta en los amistosos y el joven cumplió con creces: ante Cesena, de la Serie C (3-1), marcó un gol y dio una asistencia; y frente a Monza, de la Serie B (2-1), también dio un pase-gol. Metido de lleno en la elite del fútbol mundial, se dio el gusto de compartir entrenamientos con Cristiano Ronaldo y Dybala, entre tantas estrellas.

Tras la pretemporada, pasó al filial de “la Juve” que compite en la Serie C. Allí se desempeña regularmente. Aunque en septiembre fue al banco de suplentes del equipo principal en el clásico ante Napoli, en un choque de la Serie A.

En Juventus juega, principalmente, como extremo derecho. Le gusta enganchar y rematar o asistir de zurda. “Mis características son la gambeta, el dribling, el uno contra uno. Trato de marcar diferencia con el cambio de ritmo”, se describió. También tiene una precisa pegada: convirtió varios goles de tiro libre. El zurdo, dueño de una técnica exquisita, es comparado con Di María.

Pero Soulé no se queda con los elogios y los sueños cumplidos. Siempre busca dar un paso más. Su carrera profesional recién comienza y tiene un largo camino por delante.

Ahora, le llegó la oportunidad del seleccionado. La que empezó a imaginar cuando integrantes del cuerpo técnico argentino, incluido el propio Walter Samuel, fueron a ver sus partidos en Juventus.

“No hay nada más lindo que estar en el predio de Ezeiza o viajar con la Selección”, aseguró el marplatense ante este medio.

En los próximos días, el joven probará con sus precisos remates al arquero marplatense “Dibu” Martínez e intentará gambetear en las prácticas a Lucas Martínez Quarta, otro jugador de esta ciudad que pasó por Argentinos del Sud y Kimberley. Y, como soñó desde niño, podrá jugar al lado de Messi. Nada más y nada menos…

Matías junto a su papá, mamá, hermano, abuela y novia. Todos lo apoyaron en este gran sueño.