Con una ceremonia prevista para las 9 en la plaza de armas “Ofrendaron su Vida por la Patria” -dentro de la Base Aérea Militar Mar del Plata- a la que asistirán autoridades civiles, militares y religiosas, veteranos de guerra y público en general, la Fuerza Aérea Argentina conmemorará este domingo el 34º aniversario de su bautismo de fuego ocurrido durante el enfrentamiento bélico con el Reino Unido por las Islas Malvinas. Luego de la presentación de los efectivos al jefe de la Unidad, comodoro Héctor Eduardo Biasutti, el presbítero Luis Espósito tendrá a su cargo una invocación religiosa tras lo cual se dará lectura al mensaje del Jefe de Estado Mayor General de la Fuerza Aérea, Brigadier Mayor (VGM) Enrique Víctor Amrein.
Posteriormente el comodoro Biasutti pronunciará palabras alusivas y se realizará un desfile que contará con el acompañamiento de la Banda de Música “Santa Bárbara” -perteneciente a la Base Aérea Militar Mar del Plata- tras lo cual se servirá el tradicional chocolate.

Historia

Cabe recordar que, en el marco del conflicto del Atlántico Sur, el 1º de mayo de 1982 las Fuerzas Británicas tenían la intención de desembarcar en las Islas Malvinas y presionar la rendición de las tropas argentinas. Para lograr el objetivo, a las 4,40 aviones Vulcan y Sea Harrier comenzaron a bombardear los dos aeródromos militares establecidos por la Fuerza Aérea en Puerto Argentino y Puerto Darwin, respectivamente. Decididos a intentar su desembarco, los británicos enviaron buques del grupo de asalto anfibio a las costas malvinenses lo que dio lugar a una reacción inmediata de la Fuerza Aérea Argentina. Luego de que a las 16 diera comienzo la batalla, ese día los aviones argentinos realizaron 57 salidas en misiones de cobertura y ataque a blancos navales británicos lanzando, solo contra la flota enemiga, 20 toneladas de bombas.
Además de 14 bajas, el 1º de mayo de 1982 la Fuerza Aérea Argentina sufrió la pérdida de dos Mirage III, un Mirage, un Canberra Mk 62 y un Pucará IA-58. Entre los británicos, en tanto, hubo una fragata hundida, dos seriamente averiadas con explosiones y en llamas, un buque de asalto significativamente afectado y auxiliado para abandonar la zona, dos aviones Harrier derribados (el primero por parte de un efectivo del grupo de Artilleria Antiaérea que tiene su sede en Mar del Plata, el cual no sufrió bajas) y varios helicópteros pertenecientes a las fragatas dañados.-