La deuda que mantiene el municipio con la Obra Asistencial Mutual de los Agentes Municipales (OAM) creció de $4 a $10 millones durante el gobierno de Carlos Arroyo, lo que la pone en una situación límite que derivó en la demora de los pagos a los prestadores médicos.
A través de una carta documento, la entidad intimó al municipio a regularizar los pagos de los aportes patronales, que representan el 6% de los salarios de los agentes. Si en los próximos días no tienen novedades, una de las opciones que analizan las autoridades de la mutual es presentar una demanda judicial.
La deuda no es nueva. En rigor, el retraso en los aportes data de diciembre de 2014. Cuando en diciembre de este año terminó el mandato de Gustavo Pulti en el municipio, el monto ascendía a $4 millones. Aunque no era el escenario ideal, la mutual podía seguir funcionando con normalidad. Si bien ahora cumple con los afiliados, está cada vez más comprometida con los prestadores de los servicios. Entre ellos hay clínicas, médicos, centros de diagnósticos y laboratorios.
La mutual acostumbra dejar un monto reservado para trasplantes y emergencias que demanden sumas importantes. Pero, ante la crisis, está utilizando esas partidas para pagos cotidianos.
Al margen del aspecto sanitario, OAM también debe afrontar los salarios de los trabajadores del jardín maternal y de infantes, de la escuela primaria y del Instituto Superior Yumbel. Entre la mutual y los servicios educativos, unos 100 empleados trabajan en OAM.
Por el momento, las autoridades evitan hacer declaraciones públicas. Se limitan a decir que están en plena etapa de negociaciones con el gobierno municipal.
Cuando era concejal opositor, el secretario de Economía y Hacienda, José Cano, cuestionaba las demoras en los pagos a las obras sociales de la administración Pulti. “El oficialismo creía que este momento no iba a llegar nunca, pero los que estamos en economía sabemos que, cuando no se toman medidas concretas con respecto a algún desequilibrio, en algún momento esto explota”, disparó en noviembre del año pasado, cuando formaba parte, junto con Arroyo, del bloque de Agrupación Atlántica en el Concejo Deliberante.
Fue luego de que un grupo de agentes municipales saliera espontáneamente a protestar ante el envío de cartas de obras sociales que alertaban sobre cortes en las prestaciones. “A las obras sociales se les está debiendo en algunos casos aportes desde febrero y en otros hay retenciones efectuadas a los empleados que no están depositados”, agregó entonces Cano.
Pero el panorama, lejos de mejorar, se agravó en los últimos meses. Sobre todo respecto a los montos adeudados a OAM. Pero, según pudo saber LA CAPITAL, también continúan los retrasos con las prestatarias privadas.