Por Pablo Amalfitano

El tiempo corre y la final de la Copa Davis entre Croacia y Argentina se acerca a pasos agigantados. El fin de semana del 25 al 27 de noviembre pondrá todos los focos sobre el imponente Arena Zagreb y colocará al equipo “albiceleste” de tenis ante una nueva y factible posibilidad de ganar la ansiada Ensaladera de Plata.
El correntino Leonardo Mayer no atraviesa su mejor año en el circuito pero transita en alza el epílogo de una temporada tan irregular como sorpresiva. Una dura lesión en el hombro derecho lo eyectó del Top 100 del ranking ATP y lo apartó incluso del sueño de disputar los Juegos Olímpicos de Río. “Me lo quiero cortar (el hombro) y ponerme otro pero no se puede. No sé qué es lo que tengo, pero me lo cortaría”, deslizaba tras sentir las dolencias que lo despidieran rápido de Roland Garros y le impidieran disputar los cuartos de la Copa Davis ante Italia, en Pésaro.
Una paulatina recuperación, no obstante, le otorgó la continuidad que le faltaba para iniciar el regreso que comenzó con el título en el Challenger de Manerbio y culminó con un cimbronazo mundial en las semifinales de la Davis contra Gran Bretaña, en el Emirates Arena de Glasgow. El “Yacaré” alcanzó nada menos que 9 triunfos consecutivos en singles de la Copa: luego de las victorias de Juan Martín Del Potro sobre Andy Murray y de Guido Pella ante Kyle Edmund, el correntino superó a Daniel Evans en el quinto punto y depositó a la Argentina en la quinta final de su historia. Un récord global de 13 triunfos y 5 derrotas lo convierten en un jugador que rinde por encima de la media cuando se trata de la Davis.
La realidad es que Mayer sigue fuera de los 100 mejores del mundo pero tiene dos momentos importantes en el horizonte próximo que pueden reimpulsar su carrera. Con 29 años, espera su primer hijo para el 30 de enero junto a su mujer Milagros: “Me va a cambiar la vida; mi hijo será la prioridad. El año 2017 será diferente porque no voy a hacer la gira de Australia”” La escala previa, sin embargo, será la definición por la Davis dos meses antes ante Marin Cilic, Ivo Karlovic y compañía.
-¿Cómo estás después del triunfo contra los británicos? ¿Cómo te preparás para la final?
-Estamos bien. El triunfo en Glasgow ya pasó y el tenis te obliga a enfocarte rápido en el calendario. En este deporte todo lo bueno se pasa volando y lo malo dura un poco más. Lo que logramos fue muy importante pero ya pasó? Es obvio que siempre pienso en la final. Ojalá me llamen para jugar porque será algo muy importante. Primero está mi calendario; todavía tengo varios de torneos por delante?
-¿Volviste a ver la victoria contra Evans?
-La verdad es que esa misma noche casi ni dormí. Volví a ver el partido hace poco pero no completo. Fue un muy buen partido, uno de los mejores de mi temporada. Hubo mucha presión, pude resolverlo muy bien, también noté que saqué con mucha soltura. No analicé el juego pero sí me gustó ver lo que sucedió en torno al partido.
-En el Circuito tuviste una temporada irregular por las lesiones y demás circunstancias pero parece haber una certeza de que en la Davis siempre vas a jugar bien?
-Siempre tengo muchas ganas de jugar en la Copa Davis; me gusta mucho jugarla. Levanto mucho el nivel en los partidos por mi país. Me tocó tener un año malo pero son cosas del deporte. Las buenas se festejan el domingo y ya está. Enseguida todo vuelve a la normalidad. Intento recordar las buenas y tomar las malas para mejorar. Pero la Davis tiene todo para sacar lo mejor de mi tenis.
-Te entrenaste con Del Potro cuando recién regresaba, ¿qué pensás sobre su vuelta?
-Yo no esperaba nada parecido. Es un mágico. Se nota que tiene otro nivel. Lo que hizo es totalmente imposible. No hay muchos que lo hayan logrado. Tiene una facilidad impresionante para competir. Es muy bueno que Juan Martín sea argentino y que juegue para nosotros.
-¿Qué cambios notaste en su juego y en la parte mental?
-Hizo un cambio muy grande en todo su juego. Empezó a jugar mejor el slice y a usarlo como un recurso muy importante. Juega diferente y consigue mejor rendimiento con todos sus golpes. Es muy bueno todo lo que hace dentro de la cancha. No le cuestan los cambios?
-En cuanto a Croacia, Borna Coric se operó de la rodilla y los croatas llamaron a Karlovic?
-Creo que no les quedaba otra; si no tenían a Karlovic ellos habrían bajado mucho su potencial. Es un cambio bueno para ellos. Será muy difícil la serie. Ojalá que nosotros llevemos el mejor equipo posible. Cilic también está en un buen momento.
-¿Cómo se le juega a un gigante sacador como Karlovic?
-Hay que ponerse un casco, usar un escudo y devolver el saque de cualquier forma, ja. Después hay que tratar de sostener siempre el servicio, es muy importante que no quiebre. Y de ahí intentar robar algún game. Va a ser muy complicado pero Argentina tiene sus posibilidades. Esperemos llegar en las mejores condiciones posibles.