"Queremos ser el faro del cine en Latinoamérica", afirmó Romulo Pullol. Destacó la importancia del cine de la región en el resto del mundo.
“La primera consigna que me dio Alejandro Cacetta (presidente del Incaa), fue un desafío inmenso y muy saludable: poner a cargo de la gerencia de Relaciones Institucionales al Festival Internacional de Cine de Mar del Plata como insignia, puntualizando en su Clase A, único en Latinoamérica”.
Rómulo Pullol, gerente de Relaciones Institucionales del Incaa, tiene una apasionante tarea por delante y la asume con entusiasmo.
“Cacetta me indicó seguir por el camino de la búsqueda de la identidad, tratando de consolidarlo. De modo que a partir de ahora queremos ser el faro del cine en Latinoamérica para que el resto del mundo sepa que acá tiene las puertas de entrada para ver el mejor cine, las mejores producciones, los mejores actores, los mejores trabajos y todas las posibilidades infinitas que hay en nuestra inmensa Latinoamérica”, dijo luego.
– ¿Se inicia entonces una nueva etapa a partir de esta 31ª edición del Festival?
– Sí, definitivamente. Teniendo en cuenta el porcentaje de alrededor de un 45 por ciento de películas latinoamericanas. Esto nos da una pauta del camino que estamos tomando. Tal es así que esto mismo que sucede hoy parecía hace años un sueño muy lejano. Que venga un festival europeo, como es el de Málaga, tan importante como es; que venga a presentar su edición 2017 en este festival de Mar del Plata, habla a las claras del significado que tiene para ellos lo que en otros tiempos era apenas la sección denominada “Territorio Latinoamericano”. Tanto ha crecido esa sección, y la demanda de cine en estas latitudes, que eso habla perfectamente de la importancia que en el mundo se le está dando al cine de nuestra región. A partir del 2017 la decisión política del Festival de Cine de Málaga es transformarse en un festival de cine en español, y eso nos da la posibilidad de seguir creciendo y continuar trazando ese puente que venimos construyendo y que hoy se está haciendo realidad en esta querida y amada ciudad de Mar del Plata, en este amado país y en esta amada Latinoamérica.
– Si el cine argentino ya tenía una presencia significativa en el Festival de Málaga a través de directores como Lucía Puenzo, Ana Katz, Julia Solomonoff, Mariano Mucci y tantos otros que han exhibido allí sus realizaciones y obtenido galardones, ahora con este nuevo perfil imagino que el cine argentino definitivamente encuentra allí una auténtica puerta a Europa…
– Absolutamente. Hubo un tiempo en que se intentó denostar al festival de cine de Málaga por ser un certamen “español” y no internacional. Como que se marcaba el territorio, se lo minimizaba respecto de otras muestras más importantes. Pero ahora quedó consolidado como festival de cine en español y esto es muy positivo para nuestro cine. Y la demanda principalmente era nuestra; no solo de nuestro país, sino de toda nuestra patria grande; de realizadores que no eran tenidos en cuenta. De Argentina, Chile, Perú, México, Uruguay. Si bien el cine argentino siempre fue muy premiado allá, ahora definitivamente encontrará mayor espacio junto a las realizaciones de todos estos países que también necesitan el suyo.