Por Mariana Isa

“Primero hay que saber sufrir” reza un tango de Goyeneche del que se deben haber acordado varios simpatizantes de Kimberley. Porque un partido que parecía dominado en la primera etapa, terminó empatado en el segundo final (1-1) dejando el futuro en manos de la fortuna y la puntería.

Kimberley se impuso 4-3 en los penales a Independiente y avanzó a semifinales, instancia en la que se medirá con Alvarado.

El encuentro tuvo un comienzo vibrante. Al minuto de juego, Gonzalo Gómez tuvo el primer mano a mano con Albete, y en la contra contestó Dierckx con un ataque veloz. Sin embargo, con el correr del reloj el desarrollo del partido quedó sólo en los pies del local.

Las pelotas cruzadas se transformaron en las armas principales de Kimberley, y cuando conectó una de manera precisa fue letal. A los 8′, Gonzalo Gómez recibió un pelotazo de Goiburu sobre el palo derecho del arquero y remató cruzado para abrir el marcador.

El “dragón” conquistó las riendas y el marcador del partido. Independiente sufrió la efectiva presión rival que no le permitió tener la pelota y le costó muchísimo alejar el juego de su campo. No obstante, le mantuvo el ritmo a Kimberley y cuando tuvo la chance encontró la situación más clara. A los 37′ Santiago Gilardi fabricó un centro, de zurda, a la cabeza del siempre atento Benavidez, pero la “caprichosa” se fue rozando el ángulo externo del arco de Barucco.

En el complemento, Independiente encontró en las pelotas paradas el recurso para generar peligro. Apostó al juego aéreo de Esteban Benavidez, con efectivos centros de Gilardi u Otazo, pero los centrales y el arquero frustraron cada oportunidad generada.

El ingreso de Cristian Casas le dio “picardía” a las ofensivas del “rojo”, pero chocó con una defensa inquebrantable. Y al mismo tiempo, Franco Mañas se hizo cargo de las embestidas de su equipo, pero con un desarrollo más parejo producto de las necesidades de Independiente por seguir en carrera.

El árbitro Gabriel Millas adicionó cinco minutos. Y cuando el cronómetro marcó 50′, Fermín Iriarte, con una patada alta, frenó la llegada de Santiago Gilardi al área. Se fue expulsado por doble amonestación y le dio una oportunidad única a Independiente de pelear la clasificación. Dierckx canjeó el penal por gol y llevó el partido a la definición por penales.

Los tiros desde los 12 pasos implican muchas cosas, entre ellas una cuota de fortuna. En el último penal de la serie, Pasquali remató muy alto y la pelota se fue, junto a la ilusión del “rojo”, por arriba del travesaño. La suerte del campeón acompañó a un Kimberley que tiene serias chances de defender su título.

Síntesis

Kimberley 1 (4): Gabriel Barucco (8); Iriarte (5), Emiliano Fortete (6), Solabarrieta (7) y Cebada (6); Juan I. Briones (6), Juan M. Rodríguez Rendón (5), Barreiro (5) y Mañas (6); Goiburu (6) y Gonzalo Gómez (7). DT: Mariano Mignini.

Independiente 1 (3): Albete (7); Crocitta (5), Nahra (5), Esteban Benavídez (7) y Otazo (6); Lucas Bustos (5), Pasquali (6), Luciano Martínez (-) y Gilardi (8); Matías Molfese (5) y Dierckx (6). DT: Mariano Charlier.

Goles: en el primer tiempo, 8′ Gómez; en el segundo tiempo, 50′ Dierckx, de penal.
Cambios: en el primer tiempo, 26’ Nicolás Díaz (6) por Martínez; en el segundo tiempo, 13′ Patricio Rodríguez (6) por Rodríguez Rendón, 25′ Franco Cajal por Barreiro, 26′ Cristian Casas por Bustos, 39′ Rondanina por Gómez y 46′ Yevenez por Otazo.
Incidencias: en el segundo tiempo, 50′ expulsado Iriarte.
Definición por penales: para Kimberley convirtieron Solaberrieta, Fortete, Briones y Rondanina, mientras que Abete le contuvo la definición a Mañas; para Independiente convirtieron Gilardi, Dierckx y Nahra, Barucco le contuvo la definición a Benavídez, mientras que Pasquali desvió su remate.
Cancha: Kimberley (buena).
Árbitro: Gabriel Millas (5).