El gobernador Axel Kicillof, junto a su vice, Verónica Magario, juró ante la Asamblea Legislativa e inició su segundo mandato al frente de la provincia de Buenos Aires con un mensaje para el gobierno nacional: “Sin igualdad de oportunidades, la famosa libertad es una estafa”.

El acto contó con la presencia de destacados dirigentes nacionales, como la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner. Y también legisladores locales, como el senador provincial Alejandro Rabinovich (PRO) y los diputados Diego Garciarena (UCR) y Gustavo Pulti (Unión por la Patria), entre otros.

El saludo entre Cristina Fernández y el senador provincial Alejandro Rabinovich (PRO).

Kicillof analizó sus primeros 4 años de gobierno y lo que vendrá a futuro, con el desafío de tener una administración de distinto signo político en la nación.

“Estoy muy emocionado. Nos tocó transitar 4 años extremadamente difíciles, con sucesos inesperados e inéditos. Pero estamos acá, firmes como siempre. Quiero agradecerles a todos los bonaerenses, hayan votado como hayan votado. Mi compromiso es gobernar para todos, sin distinción”, aseguró en primer lugar el ex ministro de Economía.

Kicillof consideró que la reelección “se produce en circunstancias de extendido malestar social, con muchos oficialismos derrotados”. Y remarcó que su gestión volvió a tener el apoyo en las urnas “no para mantener lo hecho, sino para seguir transformando”.  

“Ese es el contrato electoral que vamos a honrar en los próximos 4 años: no pedimos el voto por lo hecho, sino por todo lo que falta”, añadió.

El diputado Diego Garciarena (UCR) fue otro de los representantes locales en la asunción.

El gobernador recordó que, en los últimos 4 años la provincia, “atravesó muchas dificultades”. Y dijo que “falta mucho para asegurarle a la mayoría una vida con más paz y sin incertidumbre”.

Pese a ello, “los bonaerenses evaluaron que lo que falta en materia de vivienda, educación, salud, e infraestructura no se consigue con motosierra ni con ajuste; hacen falta más derechos y más Estado”, advirtió el referente de Unión por la Patria.

Coparticipación

De cara a los años que se avecinan, Kicillof apuntó hacia la necesidad de fondos. “Buenos Aires es la provincia que, proporcionalmente, menos recursos recibe de la coparticipación. Más allá del compromiso solidario, esta situación constituye una enorme injusticia: aportamos casi el 40% de la coparticipación y recibimos poco más del 20%”, reclamó. 

Gustavo Pulti (UxP) siguiendo el discurso desde su banca.

Con esta “semejante desproporción” entre lo aportado y lo recibido, Kicillof subrayó que “es imposible dar respuestas adecuadas” a la población. Por lo que invitó a todos “los partidos políticos” representados en la Legislatura a “recuperar los recursos que le fueron quitados” a la provincia.

Frente de Todos y Milei

Con respecto al escenario nacional, Kicillof analizó que durante la presidencia de Alberto Fernández “se lograron muchos avances, pero faltó más rebeldía, más justicia social, más distribución de la riqueza y más igualdad”.

“Se votó al Frente de Todos para recuperar el salario, el trabajo, la producción y para reducir una inflación muy alta. Se pudo hacer mucho en materia de actividad, de producción y trabajo. Pero, 4 años después, la inflación siguió creciendo y los ingresos no se recuperaron. Eso no da condiciones para una vida tranquila. Y esa es una de las causas del resultado electoral”, consideró.

Luego del traspaso del mando presidencial, Kicillof señaló que La Libertad Avanza es una orientación política con “otras ideas”, que están en “las antípodas” de su visión política y económica. 

Y alertó: “La mayoría de los argentinos no eligió la caída de los salarios, la destrucción de la producción y el empleo. Y menos el perdón a los genocidas o la privatización de la salud o la educación pública”.

“En la campaña se sostuvo que el ajuste no iba caer en los trabajadores. Espero que el nuevo oficialismo no tome su triunfo electoral para ese tipo de medidas. Sin igualdad de oportunidades, la famosa libertad es una estafa”, concluyó.