Superó a John Isner en más de 6 horas. Djokovic vencía a Nadal por 2 a sets a 1 y continúan hoy la otra semifinal, antes de la final femenina, que animarán Serena Williams y Angelique Kerber.
LONDRES, Inglaterra – El sudafricano Kevin Anderson se clasificó para la final de Wimbledon, su segunda en Grand Slam, al derrotar al estadounidense John Isner durante un duelo de más de 6 horas y media en cinco sets, por 7-6 (8-6), 6-7 (5-7), 6-7 (9-11), 6-4 y 26-24.
Ambos tenistas disputaron el segundo partido más largo de la historia del torneo. Anderson se enfrentará hoy en la final al español Rafael Nadal o al serbio Novak Djokovic, que suspendieron ayer con ventaja de “Nole”, por 6-4, 3-6 y 7-6 (11-9), en la otra semifinal.
A sus 32 años, el sudafricano disputará su segunda final de Grand Slam, después de la perdida en septiembre de 2017 en el Abierto de Estados Unidos ante Nadal. Es el primer jugador de su país en alcanzar este nivel de la competición en Wimbledon desde 1921 (Brian Norton).
El reloj marcaba 6 horas y 35 minutos cuando el 8° jugador del mundo finalizó con la resistencia del estadounidense (10°).
El segundo partido más largo del torneo hasta la fecha había durado 6 horas y nueve minutos, en dos días; fue en 2006, en cuartos de final de dobles masculinos entre Mark Knowles, de Bahamas, y el canadiense Daniel Nestor, que superaron al sueco Simon Aspelin y al australiano Todd Perry 23-21 en el quinto set.
El segundo partido más largo de la historia del torneo en categoría individual era el que midió al croata Marin Cilic ante el estadounidense Sam Querrey (17-15 en el quinto set) en tercera ronda en 2012.
Isner sabe lidiar en partidos largos, ya que ganó en 2010 el más largo de la historia del Grand Slam inglés. Estuvo 11 horas y 5 minutos, en tres días, para ganar 70-68 en el quinto set al francés Nicolas Mahut. Y Anderson venía de otra épica batalla para vencer al suizo Roger Federer, el miércoles, en cinco sets y cuatro horas y 14 minutos.
A continuación, Djokovic se situó a un solo set de una nueva final en Wimbledon, tras dominar a Nadal luego de dos horas y 53 minutos.
En realidad, pese a lo avanzado de la hora, el partido entre Djokovic y Nadal comenzó con el techo rectráctil de la cancha central cerrado y con luz artificial. Sin embargo, había un tope horario (las 23 de Londres), ya que existe un acuerdo entre el All England Club y los residentes de los barrios contiguos a estas instalaciones de Southfields y Wimbledon Village .