Un ciudadano paraguayo comenzará a ser juzgado el próximo miércoles por la Justicia Federal de Mar del Plata bajo cargos de contrabando y transporte de estupefaciantes luego de que en el año 2017 fuera sorprendido, junto a otros integrantes de su banda en cercanías de Chivilcoy, custodiando una avioneta con casi media tonelada de marihuana.

La audiencia está prevista para las 10.30 del miércoles próximo y será el inicio de un debate en el que la acusación -a cargo del fiscal general Juan Manuel Pettigiani junto al auxiliar fiscal Carlos Fioriti- buscará probar los hechos que fueron investigados por la justicia federal de Junín.

El 24 de marzo de 2017 Cicinio Cardozo Benítez, un hombre con vinculaciones con el narcotráfico, habría ingresado a Argentina desde un punto no determinado de la República del Paraguay cerca de 445 kilogramos de marihuana organizada en 34 bultos que contenían 533 panes de esta sustancia compactada.

El destino de los estupefacientes era su distribución y comercialización en distintos puntos del país, con centro en la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense.

De la maniobra delictiva habrían participado también otras tres personas. Una de ellas ofició de piloto de la aeronave con la que se ingresó al país la mercadería prohibida, que fue luego descargada en un camino rural del partido de General Belgrano en cercanías de la ruta provincial 29.

En ese punto del interior bonaerense esperaban tres vehículos. En uno de ellos, un Volkswagen Tiguan, conducido por una mujer, se cargaron los paquetes de marihuana. Y en apoyo se encontraban otros dos vehículos, un Volkswagen Voyage ocupado por otros dos hombres y un Chevrolet Aveo conducido por Benítez.

La pesquisa permitió advertir la maniobra que había sido organizada para un viernes feriado y todos los involucrados –seis varones y una mujer- fueron detenidos en el momento.

Los imputados que son siete, a excepción de uno de los acusados que es nacido en la provincia de Misiones, son extranjeros y deberán afrontar penas, en expectativa, de hasta 20 años de prisión. Al juicio llegaron embargados con fines de decomiso los tres vehículos y la avioneta color blanca con detalles en rojo y azul donde se transportó la marihuana.