Rodolfo Monsón no pudo dormir el domingo a la noche. Desvelado intentó a hacer zapping en el televisor, pero nada hacia que pudiera conciliar el sueño y por fin descansar para poder enfrentar la difícil jornada que iba a comenzar el lunes: el juicio por la muerte de su hijo, Mauro “El Pipa” Monsón, y tener cara a cara por primera vez a Gastón Matías Jofré, el hombre que lo atropelló, mató y luego huyó.

Este lunes, en el Juzgado Correccional N° 3 comenzó el juicio contra Jofré, quien llegó en libertad e imputado por el delito de “homicidio culposo agravado” por la muerte de Mauro Monsón, ocurrida en 2019. Las paredes laterales de Tribunales se cubrieron con banderas en recuerdo de la víctima, en las que se pudo leer: “Un día nos encontraremos en otro carnaval“.

“Es la primera vez que estuve en un lugar con él (por Jofré), pero nunca crucé la mirada con él, a pesar de que el recinto es chico. Preferí no mirarlo nunca”, dijo Rodolfo Monsón al terminar la primera audiencia y agregó: “Estoy esperando que la Justicia haga lo que tenga que hacer: la terrenal acá y después la divina. Él no mostró arrepentimiento en estos casi 3 años, a él no le importó si mi hijo respiraba, lo abandonó”.

“A mi hijo lo tengo presente todos los días y más a su su último saludo”, expresó Rodolfo y recordó sobre todo ese último “chau viejito” que todavía lleva consigo. “Me la paso pensando en ese momento, este dolor no me lo saca nadie, pero al menos si lo hacen responsable y lo declaran culpable podré cerrar una etapa“, concluyó.

Rodolfo Monsón estuvo acompañado por su abogado, Maximiliano Orsini, quien explicó que la expectativa en el juicio es que Jofré sea condenado a al menos 4 años para que vaya a la cárcel a cumplir con la pena.

“Jofré no declaró nunca, por lo que no sabemos si lo vio o no a Mauro. Por eso nunca se cambió la calificación y se mantuvo en homicidio culposo“, expreso el abogado, un delito que tiene una pena máxima de 6 años.

Esta primera jornada del debate comenzó los testimonios de los peritos que realizaron la autopsia y los encargados de realizar la planimetría. En estas exposiciones, los profesionales explicaron que la víctima se encontraba en cuclilla cerca del cordón de la vereda, al lado de su moto. En ese contexto fue embestido por Jofré y el impacto fue con tanta violencia que produjo una explosión de su cráneo y arrastró el cuerpo de la víctima por 40 metros.

“Jofré venia con alcohol en sangre y por eso se presentó al otro día, a las 12 horas, para que no le saliera eso en un análisis. Pero hay testigos que lo vieron en dos bares antes tomando cerveza. Hay que tomar conciencia”, expresó Orsini y agregó: “Hay que tomar conciencia de lo peligroso que es el alcohol al conducir”.

El juicio de desarrollará durante toda la semana, con el fiscal Rodolfo Moure, quien sostendrá la acusación por “homicidio culposo”.

El hecho ocurrió el 11 de noviembre minutos pasadas las 4 de la madrugada en la avenida Tejedor entre Mariani y Daprotis. Jofre conducía su Chevrolet Corsa Classic por la avenida Tejedor y chocó a Monsón, quien se encontraba a mitad de cuadra junto a su moto que estaba estacionado y con el pie colocado.

El auto le impactó en la cabeza a la víctima y lo arrastró cuarenta metros. Tras el impacto, Jofré siguió su camino y se perdió en dirección hacia Caisamar. La huida quedaría registrada por las cámaras de seguridad del Municipio, en las que se podía ver el camino tomado por el Chevrolet Corsa previo al siniestro y luego del impacto. Un detalle clave para los investigadores fue que en las imágenes se observaba que en un inicio el auto tenía las dos luces delanteras en funcionamiento y en las otros solo funcionaban las del lado izquierdo, ya que las del derecho se habían roto al atropellar a Monsón.

Ese mismo 11 de noviembre, al mediodía, Jofré se entregó a Tribunales y se puso a disposición de la Justicia. En un principio mencionó que había arrollado a alguien que se encontraba acostado en la calle y sin vida, pero luego se negó a declarar y ratificar sus palabras ante la Fiscalía de Delitos Culposos.