por Martín Malaspina

Luego del capítulo anterior, bastante tedioso y lento, llegamos al cuarto en donde las cosas van más avanzadas y comienzan a tejerse las nuevas batallas.

El norte recuerda

Comenzamos en el muro en donde un resucitado Jon Snow deja su puesto de Lord Comandante, por suerte para los Stark, Sansa llega antes que su medio hermano abandone las instalaciones, el encuentro entre estos dos personajes deja más que evidente la situación que ha pasado esta casa luego de la Boda Roja.

Sansa le pide que vuelva al campo de Batalla para recuperar Invernalia. Jon luego de su resurrección se encuentra cansado de pelear, aunque una carta del Guardián del Norte y el apoyo de Sansa lo hacen cambiar de opinión, sobre todo porque tiene secuestrado a Rickon Stark.

Una de las escenas a destacar es el encuentro entre tres personajes importantes, La dama Roja, Davos y Brienne. Con su impotente altura; este último personaje afirma que no olvida lo que le sucedió a Renly Barethon, asesinado por una sombra, y que observo lo que le sucedió a la princesa. Una escena en donde con poco dialogo y miradas profundas se ha dicho todo.

Lord del Valle

Luego de no verlo en los primeros tres episodios, por fin Meñique se decide aparecer, con un regalo a su “sobrino” el rey del Valle, que por cierto lo tiene bien ganado y dominado, esto le sirve para ganar un ejército y ayudar a los Stark en su lucha por recuperar Invernalia, pero claro, que traera entre manos este personaje, ¿ni más ni menos que la mano de Sansa? Puede ser…

Sin fe

En otro continente vemos a unos de los Lannister, aunque para muchos no lo es y quien escribe cree que tampoco, negociando con los opresores al mejor estilo Desembarco del Rey.

Sin irnos de continente, vemos a los dos enamorados de la Madre de Dragones yendo a su rescate; ante una pelea con dos Dothraki, Jora casi muere, logran encontrarla, pero Kalesshi decido no escaparse así; por lo que planea un plan. Al final del análisis comentaré sobre las llamas…ups…

Ahora sí, lo que sucede en Desembarco del Rey no puede quedar atrás y la reina Margaery tiene una gran conversación con el Gorrion Supremo, tal es así que este deja que ella vea a su hermano Loras. Los Lannister cansados de no ser escuchados, manipulan a Tommen para volver a obtener poder en el consejo privado, ante ello convencen a la casa Tayrell y a su Tío para ponerle fin a la Fé de los Siete.

Volviendo a casa

Theon Grejoy llega a las Islas de Hierro donde no es bienvenido como esperaba, para colmo a mitad de su viaje se entera que su padre ha muerto. Cabizbajo y con miedo le dice a su hermana que ella debe gobernar a los hijos de Hierro.

Regresando al Norte, principalmente a Invernalia, Osha es bañada y entregada al sádico Lord Bolton, en un intento de “supervivencia” Osha trata de tomar un cuchillo y asesinar al nuevo Guardián del Norte, pero este es más rápido y sin dudarlo le corta la yugular, un triste final para personaje que no veíamos desde la tercer cuarta temporada.

La que no arde

Volviendo a Essos, retomamos el plan de la Madre de Dragones, ella ingresa al templo en donde los lideres Dotraki decidirán que hacer con ella.

Aunque no nos olvidemos que ella es Targayren y como tal siempre tiene un as bajo la manga, por eso afirmo que ella será la nueva líder y no ellos, “Ustedes morirán hoy”.

En ese momento una lluvia de fuego se desprendió en todo el templo, pero la que no arde no se preocupa por eso, mientras el templo se cae en llamas, ella sale desnuda y ante una multitud arrodillada porque ven a una nueva líder, finaliza este magnifico cuarto episodio de la serie más atrapante de los últimos seis años.