La noticia se viralizó: un joven de 23 años protagonizó un choque múltiple en su camioneta en el barrio La Perla, volcó y después prendió la radio y se quedó dormido. Una abuela intenta explicarle a la policía y al personal de Tránsito que su nieto está bajo tratamiento psiquiátrico desde hace unos tres meses. Los vecinos lo resumen de manera tajante: “Un pibe drogado chocó con unos autos”.

El test de alcoholemia le dio negativo al conductor, pero de todos modos se presentaba con la conciencia claramente alterada: irascible, frenético, agresivo. Violentó a una vecina, quiso pelear con la policía y se mostraba incontenible. El joven fue detenido por dos policías, quienes tuvieron dificultades en reducirlo, y quedó imputado por “resistencia a la autoridad”.

“Dejalo mamá, ya está. Te va a hacer perder todo. Está quemado por la droga. Si tiene que quedarse preso que se quede preso. Basta.”. La frase la dijo el padre y a quien estaba dirigida era a su propia madre, es decir la abuela del joven. Sin dudas, las tensiones familiares surgieron de inmediato y todo por culpa del consumo problemático de estupefacientes.

Desde el Municipio solicitaron la suspensión provisoria de la licencia de conducir del joven, para que tenga que hacer en los próximos días un test psicofísico, amparado en el artículo 48 de la ley 24449, que explica que está prohibido conducir habiendo consumido alcohol, estupefacientes u otras sustancias que disminuyan la capacidad para conducir.

#MardelPlata Conductor causó múltiple choque y se quedó dormido: “Disculpame, estoy drogado” pic.twitter.com/07VJ8Aer4D

— La Capital MdP (@lacapitalmdq) January 8, 2025

A raíz de esta situación, que ocurrió el jueves, rápidamente el concejal de Unión por la Patria Diego García solicitó la implementación de narcotest en los controles de tránsito que se realizan en el Partido de General Pueyrredon.

“Hace días un joven produjo un choque múltiple en el Barrio La Perla. Cuando el personal de tránsito le realizó el test de alcoholemia el resultado fue negativo. Sin embargo, el mismo conductor admitió encontrarse bajo los efectos de sustancias psicoactivas. Esto nos obliga a repensar qué tipo de test estamos realizando en esta temporada y la necesidad de hilar más fino en los controles”, expresó García y justificó su pedido también en el turismo nocturno que crece en la ciudad, las fiestas electrónicas y el consumo de drogas.

“General Pueyrredon debe estar a la altura de otras jurisdicciones y garantizar un tránsito más seguro, especialmente durante la temporada de verano, cuando la actividad nocturna alcanza su punto máximo”, finalizó Diego García.

Si bien es cierto que estos testeos permiten detectar drogas ilegales como la cocaína, marihuana o éxtasis y medicamentos que afectan al sistema nervioso central, no indica las cantidades o el tiempo en el que fueron consumidas esas sustancias.

El titular del área de Tránsito del municipio, Héctor Ragnoli, habló con LA CAPITAL y consideró que sería importante contar con narcotest en la ciudad, pero con personal con la formación suficiente para poder describir el comportamiento de la persona. “El indicador de consumo tiene que estar acompañado del indicador de comportamiento”, remarcó.

“Estos controles, en otros países, se hacen con paramédicos, entonces su palabra sirve para hacer la descripción correcta, están formados y están habilitados para que sus palabras sean tenidas en cuenta por jueces y fiscales”, explicó.

Para Ragnoli también hace falta un cambio en la legislación, para que se indique las cantidades de consumo que debe arrojar el narcotest, ya que también eso puede marcar el tiempo que la sustancia lleva en el organismo de la persona: no es lo mismo que el dé positivo de cocaína, pero con un consumo de hace 48 horas o que dé positivo de marihuana, después de una semana de haber fumado.

Por ejemplo, en España su ley indica que con 5 nanogramos de marihuana en sangre está prohibido manejar, lo que indica que los efectos son recientes.

Además del test, Ragnoli insiste en la necesidad de describir y contemplar la conducta de los conductores a los que se les hace el narcotest. Esos indicadores, más un resultado positivo, son los que marcan la conciencia alterada por el consumo de sustancias. “Solo con el resultado positivo, pero sin la descripción de la conducta el resultado podría ser invalidado”, consideró.

El joven que, bajo los efectos de psicofármacos, manejaba la camioneta había obtenido una licencia categoría B en 2022, con vencimiento en 2027. Una vez que se haga efectiva la suspensión de su carnet de conducir deberá demostrar tener las mismas actitudes psicofísicas que tenía cuando el Municipio se la otorgó y, de ser así, podrá volver a estar al volante.

Junto con la discusión de los narcotest, también se debería debatir el rol del Estado en la prevención del consumo de drogas y la conducción. No solamente cómo penalizar, si no también cómo se puede recuperar al adicto.

Tanto el oficialismo como la oposición consideran la importancia de poder contar con narcotest, más allá de las diferencias en su formas de uso, el impacto que podría tener en la seguridad vial de Mar del Plata está claro: se podría detectar a quienes conducen bajo los efectos de sustancias que los vuelven tan peligrosos al volante.

Pero además de la problemática del consumo de estupefacientes, a este caso también lo atravesó las patologías psiquiátricas. Una persona en tratamiento psiquiátrico al mando de un automóvil. Sucede con frecuencia, mucha más que la que se puede imaginar. Y allí los controles son casi imposibles, aunque las consecuencias pueden ser gravísimas.