Dos hombres, de 24 y 30 años, que habían asaltado a un remisero esta madrugada en inmediaciones a la Villa Mateotti fueron baleados por un motociclista que pasaba por el lugar y que tras el ataque se escapó.

Según informaron fuentes oficiales, el joven de 24 años recibió un disparo en el intercostal izquierdo, mientras que el más grande fue alcanzado por cuatro balazos. A pesar de la gravedad de las heridas, mientras esperaba a ser atendido en el Hospital Interzonal se escapó del lugar antes de ser entrevistado por la policía. En el transcurso de la mañana regresó al nosocomio para ser atendido por el personal médico.

Este confuso episodio comenzó a gestarse pasada la medianoche, cuando una de las víctimas solicitó un remís a Paso Cars para su casa de Mateotti al 3100.  Al llegar el auto, el hombre le pidió al chofer ir hasta la avenida Colón y Bahía Blanca, donde se encontraba un amigo.

Según declararía luego el remisero en la comisaría quinta, en el transcurso del viaje, los dos hombres lo sorprendieron y lo amenazaron con un arma de fuego para que detuviera el auto. Luego lo golpearon y le robaron unos 5500 pesos de recaudación, el celular y la consola de la agencia.

Siempre según el relato de la víctima, cuando los delincuentes descendieron del remís fueron interceptados por un hombre que iba en una moto, quien les gritó, sacó un arma de fuego y les disparó en varias ocasiones. Ante esta situación, los delincuentes se escaparon y el motociclista se fue por Mateotti hacia Lynch y de allí a Peralta Ramos.

Cerca de la 1 de la madrugada, un hombre de 24 años y otro de 30 ingresaron al Hospital Interzonal con heridas de arma de fuego. Habían llegado por sus propios medios y, cuando dieron sus datos explicaron que uno vivía en Mateotti al 3100 y otro en la avenida Colón y Bahía Blanca, las direcciones a las que el remisero había ido en el viaje solicitado por los asaltantes.

Para los investigadores, el ataque está lejos de haber sido perpetrado por un “vecino justiciero” y dado el contexto, el horario y la zona, la principal hipótesis es que las agresiones estarían vinculadas con un conflicto territorial entre delincuentes.

El hecho es investigado por la fiscal Andrea Gómez, quien ya solicitó las imágenes de seguridad de la zona para intentar esclarecer lo sucedido.