MEX (Modo Experimental), el Taller de arte contemporáneo que dirige Claudio Roveda, está presentando la muestra colectiva “Insólita e insolente”, en Espacio Cabrales (Güemes 2557).

Con curaduría de Roveda, exponen sus experimentaciones los artistas Adriana Ibañez,Carolina Rumbo, Patricia Bourdieu, Adriana Di Michele, Matias Occhi, Laura Galeotti, Rocío Moreno, Any Aprea y María Amelia Lopez.

La exposición responde al espíritu de MEX. Es un “espacio de experimentación del arte contemporáneo en todas sus expresiones: pintura, dibujo, escultura, instalaciones y medios alternativos, fotografía y todas aquellas nuevas versiones que los artistas participantes quieran explorar.

“Ahondamos en los proyectos personales y si no los hubiera, recorremos juntos el camino del encuentro con ellos. No nos fijamos en los niveles de cada integrante está abierto a los que tienen experiencia y los que recién se inician, en este camino de experimentar el arte y sus producciones” indicó Roveda.

El espacio funciona todos los jueves de 10 a 20, en el taller ubicado en Strobel 5141, donde cada integrante dispone el tiempo que quiera estar y “donde además generamos los vínculos que se acercan a un colectivo, que emana con fuerza creativa constante y del cual surgen manifestaciones como la muestra de espacio de Cabrales”.

Sobre “Insolita e insolente”

Roveda consideró la muestra como “un verdadero acto de fe”.

“El título es claro y contundente, no nos preocupa la calidad de lo exhibido, sino la carga de su significado. En ésta volcamos las experiencias de manera cruda, sin detenernos ante la primer duda que surja, pero con la convicción que genera el saber que abordamos con seriedad y muchas ganas de progreso, los procesos creativos de cada integrante” indicó.

Además señaló que “es una oportunidad para los experimentados de desarrollar sus proyectos y, para los que se inician, de sentir que pueden exhibir sin pruritos, sus primeras incursiones en la producción de sus obras, con el agregado curatorial que significa elegir para que no se note. En definitiva todo un desafío insólito, por el corto tiempo de trabajo (seis meses), e insolente por la manera de irrumpir ante los espectadores, sabiéndonos generadores de estímulo para que muchos decidan involucrarse en la experiencia de crear”.

Las artistas en la visión del curador

Adriana Ibañez Aborda la geometría y el concretismo como argumento a sus relatos. Siempre basada en metáforas resuelve desde lo formal la aparición de las mismas , con ideas que la involucran en una especia de autorreferencia constante. Elije por intuición y ve la fotografía y la arquitectura como nexos que se manifiestan a favor de sus contenidos, siempre construyendo.

Carolina Rumbo. Pintora, escultora, instalacionista, pero bajo el sostén del dibujo y la materia. Con el papel como protagonista fundamental, dibuja calando al mismo y hace brotar de sus manos e instrumentos para hacerlo, aquel vacio constante que se encadena dando sentido al dibujo. La sombra luego aparece, fantasmal dando multiplicidad a la imagen, la sorpresa siempre es compañera , la naturaleza el abordaje temático, la admiración siempre de este lado de la luz.

Patricia Bourdieu. Su imaginario, constante forma de vivir cada momento con pasión, amiga de las anécdotas, onda y estímulo que brota de sus historias, que por ingenuas que parezcan, nos hacen reflexionar sobre como ser mejores. Sus dibujos son frescura, sus frases y anotaciones, consejos que hacen sentirse bien. Caminando sin obstáculos visibles hacia lo que la hace y nos hace reflexionar sobre lo simple y como poder ser felices.

Adriana Di Michele. Pintora y dibujante por naturaleza y oficio de muchos años, su proyecto deja de ser formal y técnico y se propone investigar la representación. Para ello elige la cotidianeidad que no es más que la vida misma.
La carga de expresión es su búsqueda y lo logra acentuando cada vez mas en lo emocional, tanto de lo que dice, como de los que lo reciben. También aborda con gran destreza la abstracción y allí se saca las ganas con el color , su enamoramiento de siempre.

Matias Occhi desarrolla su proyecto artístico “con la sensación de que en cada decisión que toma, es eso y no hay nada mas que eso para explicarlo todo”. Sus viajes largos y sus incursiones diarias cortas toman a la naturaleza como soporte de su obra. Su excusa, la geometría , sus actores principales, la luz, el tiempo, la oscuridad que sobreviene, la autocontemplación. Los materiales, todos. La documentación en fotos, videos, objetos e instalaciones, los vestigios de la voluntad del artista por compartir algo con nosotros. Una especie de cineasta haciendo su autorretrato de vida.

Laura Galeotti es una artista múltiple y de larga experiencia, docente, ceramista por excelencia, supo elegir esta técnica para elevarla al mismo rango de la escultura sin escalas, se mimetiza con su entorno lleno de naturaleza y lo transforma en su sello. El oficio la lleva a intentar conseguir que lo natural elegido trascienda, venza a la opresión racional, aparecen sus joyas naturales, descubre el oro para endiosarlas, una revisión de tradiciones históricas y reconocimiento del poder creativo que muchos tienen. Y ella lo posee a gran escala.

Rocío Moreno es la mas novel de todo el grupo. Comenzó a pintar hace apenas dos años y su entusiasmo lo plasma en directo sobre papeles y telas sin miedos que la detengan.

Se podría decir que sus trabajos remiten a lo cercano, a lo cotidiano, familiar, por momentos la figuración y el relato de la misma es su interés, pero también surgio en ella la necesidad de experimentar . Hoy también expresa un minimalismo geo que comienza a dialogar con lo anterior dentro de su discurso.

Any Aprea trabaja sobre un proyecto bien definido, su apasionamiento con la pintura la llevó a encontrar un color muy especial y dejar que le vuele la cabeza. Lo lleva a relatos extremos de relaciones con los demás colores y también sus formas. Minimalista en apariencia, pero dándonos un montón de conceptos que devienen de esas relaciones. Una de sus virtudes es la creación de una cadena imaginaria como tal , pero certeza cuando cada eslabon aparece y se conecta al todo.

María Amelia López es un explosivo en mano. Tira por todos lados, convulsiona con la pintura y el dibujo, nunca se detiene, desde tomar un apunte de paisaje en su cuaderno de viaje, hasta intervenir con mucho humor unas fotografías antiguas encontradas en la calle. Multiples son sus temas de abordaje, haciendo que encare entre seis y siete proyectos a la vez, escalonados en su atención y realización . Artista de la abundacia del saber hacer y compartirlo con todes los que se cruzan con ella. La monocromía en la acuarela es uno de sus puntos altos .