Impactantes revelaciones del crimen de Claudia Schaefer
A cuatro días de iniciarse el juicio a Fernando Farré, ex gerente de la empresa multinacional de cosméticos Coty, por el asesinato de su esposa Claudia Schaefer se conocieron detalles periciales del mortal ataque.
Fernando Farré empleó tanta fuerza cuando asesinó de 74 puñaladas a su esposa Claudia Schaefer que dobló las hojas de los dos cuchillos que empleó para asesinarla y le quebró la punta a uno de ellos cuando, al momento de degollarla, el arma se le enganchó en su campera.
Así lo concluyeron los peritos de la Policía Científica que presentaron en la causa el informe de “secuencia fáctica” del crimen.
De acuerdo a la reconstrucción que hicieron los expertos en criminalística, Farré tomó dos cuchillos de la cocina, los llevó hasta el vestidor donde estaba Schaefer, cerró la puerta con llave y concretó un ataque que se inició con golpes, siguió con puñaladas aplicadas con las dos armas blancas en forma simultánea y culminó cuando la degolló de espaldas con cortes que afectaron las tres cuartas partes de la circunferencia del cuello.
Respecto a los cuchillos, los peritos informaron que ambos fueron tomados de un taco ubicado detrás de una licuadora sobre la mesada en un rincón de la cocina de la casa del country Martindale, un sitio que para los expertos hace concluir que las armas blancas empleadas para este crimen “no son de acceso rápido o sencillo”.
Ambos cuchillos son de la marca “Euro Home Premier”, tienen el mango de goma color verde lima y poseen prácticamente la misma longitud, aunque uno es más ancho y pesado que el otro.
El catalogado como “cuchillo N° 1” es el más angosto, mide 35 centímetros, de los cuales 20,5 son de una hoja monofilo que está deformada levemente hacia la izquierda y tiene la punta doblada.
El “cuchillo N° 2” es más ancho -tipo cuchilla-, y mide 34,5 centímetros porque tiene la punta partida y una leve curvatura hacia la derecha.
“Ambos cuchillos se encuentran deformados, lo cual es producto del ejercicio de una fuerza intensa frente a un plano lo suficientemente duro para producir dicha variación, por empleo el tejido óseo”, señalaron los peritos en el informe.
Además explicaron que la campera impermeable marca “Moncler” y la camisa “Hugo Boss” que aquel día vestía el femicida, tienen en sus mangas del lado izquierda, a la altura de la cara anterior del antebrazo, dos roturas que se produjeron cuando, en la maniobra de degüello, a Farré se le enganchó la punta del cuchillo que apareció roto, con esas prendas de vestir.
Farré comenzará el próximo lunes a ser juzgado por el femicidio de Schaefer, cometido hace dos años, cuando la degolló y le aplicó 74 puñaladas en una casa del country Martindale de Pilar, en un juicio por jurados en el que se deberá definir si será condenado a prisión perpetua, si actuó bajo un estado de emoción violenta o si es inimputable.
El juicio se iniciará el lunes a las 9 en la sala del entrepiso de los tribunales de San Isidro, ubicado en la calle Ituzaingó 340 de esa ciudad bonaerense.
El debate estará a cargo de un único magistrado, el juez Esteban Andrejin, del Tribunal Oral en lo Criminal 2 de San Isidro, y la acusación estará en manos de dos fiscales especializadas en violencia de género, Carolina Carballido Calatayud y Laura Zyseskind, titulares de las fiscalías de esa temática de Pilar y San Isidro respectivamente.
Carballido Calatayud, es la fiscal que encarceló a Farré y realizó la instrucción de la causa, mientras que Zyseskind es recordada como una de las fiscales que en 2011 logró condenar por el encubrimiento del crimen de María Marta García Belsunce a tres familiares, un vecino y un médico.
La defensa de Farré estará encabezada por el abogado Adrián Tenca -el mismo que defendió en el juicio por el crimen de Ángeles Rawson al condenado portero Jorge Mangeri-, y por su colega María Inés Bergamini Urquiza.