Concentración de recursos en las capitales provinciales y situación complicada en el interior, falta de recursos humanos, presupuestos bajos y ausencia de datos oficiales son algunas de las conclusiones que se desprenden del informe “Un diagnóstico de la salud mental en Argentina. Una visión federal de nuestra realidad asistencial”, presentado ayer en el XXXV Congreso Argentino de Psiquiatría que culmina hoy.

“La realidad de la salud mental en Argentina es heterogénea, varía mucho de provincia a provincia. Son realidades, geografías, culturas, presupuestos y sociedades diferentes, es una situación muy disímil”, describió Ignacio Crespo, vocal de la Asociación de Psiquiatras Argentinos (APSA), que presentó el “paper” junto al presidente de la entidad y del congreso, Manuel Vilapriño.

En el salón Dauphin, se expusieron las realidades del sector en las distintas provincias, aunque en muchos casos se aclaró que “no ofrecen datos oficiales” relacionados, por ejemplo, con el presupuesto del área. También se denunciaron “casos de persecución de profesionales en Formosa solo por el hecho de denunciar las falencias del sistema”.

El presidente de APSA y del Congreso de Psiquiatría, Manuel Vilapriño.

La situación en el país es tan “heterogénea” que existen provincias, como Chubut, donde no existen hospitales especializados mientras que otras, como San Luis, limita los días de “internación a siete”, razón por la cual los pacientes son derivados a Mendoza o Río Cuarto.

Los datos, que fueron presentados por profesionales de cada lugar que hicieron el trabajo de campo, reflejó que la realidad actual de la salud mental en todo el país es “bastante uniforme, para abajo”, calificó Vilapriño.

La directora nacional de Salud Mental y Adicciones del Ministerio de Salud de la Nación, Mariana Moreno, escuchó la primera parte de la ponencia y, luego, se retiró.

Falencias

La ponencia de ayer fue la más esperada en la anteúltima jornada del evento que se desarrolla bajo el lema “Psiquiatría y salud mental pública en un mundo vulnerable. Psiquiatras en diálogo clínico ampliado centrado en la persona” en el NH Gran Hotel Provincial.

El titular de APSA valoró “el trabajo de recolección de datos en el campo” realizado por cada uno de sus colegas, ya que “en muchos casos los gobiernos no aportan la información requerida. Algunos no la tienen y otros son principados”, definió.

Por su parte, Crespo analizó que “la falta de recurso humano” en el área no es un problema “de ninguna provincia, ni siquiera de la Argentina, sino que es mundial”.

“Es una situación compleja. Sabemos que el número de psiquiatras en el mundo ha ido decreciendo y es una de las cosas que se empezaron a estimular, que se involucren más a las carreras de medicina”, describió.

Además, sobre la ausencia de datos oficiales, estimó que se debe “a las estructuras del Estado, los organismos tienen que organizarse”. “Aislar los datos de Salud Mental es un problema porque incluso Salud tiene los datos conformados no por apartados, sino todos globales. Es un trabajo minucioso que hay que hacer. Algunos lugares, como la Universidad de Córdoba, lo hacen y otros, no”.

A su entender, un primer paso para solucionar la cuestión consistiría en “promover que haya un sistema de información”, mientras que, sobre las carencias en los presupuestos, opinó que “no hay que apegarse al 10 por ciento del total del presupuesto que fija la ley, sino pensar en los lugares y las características de cada uno, para proyectar y diseñar un sistema acorde a las necesidades”.

Si bien el profesional se negó a elaborar un ranking de calidad de la salud mental en cada una de las provincias, aseguró: “Necesitamos un poco más de lo que tenemos”. Y detalló que “Mendoza, Buenos Aires, Santa Fe, me parece, están bien. Hay otras que tienen muchos menos recursos”.