Los comercios de Mar del Plata acumulan una progresiva recesión en las ventas desde hace al menos 15 meses consecutivos, escenario que se aceleró en el último semestre, y que llevó a que muchos emprendimientos deban cerrar sus puertas o bien mudarse de zona en busca de pagar alquileres más accesibles. Según un estudio, actualmente hay 208 locales cerrados en la ciudad.

Al recorrer los centros comerciales a cielo abierto, la imagen de negocios con sus persianas bajas definitivamente ha crecido en el último tiempo. Para cuantificar y analizar la situación, la Unión del Comercio, la Industria y la Producción de Mar del Plata (UCIP) presentó este fin de semana los resultados del relevamiento realizado a través de su Departamento de Estudios Sociales y Económicos (Dese) durante el mes de junio en 2.533 locales de los centros comerciales de Alberti, San Juan, Microcentro, Talcahuano, Juan B. Justo, 12 de Octubre, Tejedor, Güemes, Constitución y Playa Grande.

El objetivo fue establecer el número de locales comerciales por zona o arteria comercial, cuántos de estos están operativos y cuántos han cerrado hacia el final del primer semestre del año, todo ello en respuesta al actual escenario económico caracterizado por una brusca caída del consumo.

El estudio, realizado en junio, indica que hay al menos 208 locales cerrados. La tasa de desocupación de estos comercios arrojó un promedio del 8,21% en la ciudad.

“Es una luz amarilla”

Este relevamiento se viene llevando a cabo en los últimos años. El presidente del UCIP, Blas Taladrid, recordó en diálogo con LA CAPITAL que el “pico” de locales cerrados se registró en noviembre de 2020, en plena pandemia, cuando se detectó un 15,61% de los locales inactivos, un indicador alarmante.

En mayo de 2021, en plena recuperación tras lo peor de la emergencia sanitaria, la cifra bajó al 9,81%, mientras que en abril de 2022 se registró un 8,94% de locales cerrados, un panorama similar al actual.

“Ho tenemos en promedio el 8,21% de locales cerrados en la ciudad. No es un número óptimo, de hecho, es una luz amarilla, es para prestar atención, y preocupa en muchos sentidos”, aseguró Taladrid.

Blas Taladrid, presidente de UCIP.

Las razones

Con la aclaración de que no sería correcto afirmar que hay 208 locales comerciales cerrados como consecuencia únicamente de la crisis, sino que influyen también otros factores, como la estacionalidad y el el carácter dinámico de la actividad comercial, aparecen algunas explicaciones para analizar la situación.

Taladrid planteó en este sentido que, aparte de la estacionalidad, de locales que se mudan o cambian de rubro, “en muchos casos la caída de la actividad económica hace que no puedas acompañar el resto de los aumentos”.

En otras palabras, cuando un comerciante en momentos de inflación mantiene su nivel de actividad, acompaña la facturación con los gastos. “El problema es cuando cae la venta, cae la facturación y empiezan a aumentar los gastos, porque ahí la utilidad pasa a ser cada vez menor hasta dejar un margen negativo”, señaló.

Entre los comercios más chicos, el primer ajuste que muchos aplican es “empezar a atender con su familia”, debido a que de esta manera los sueldos que se pagan pasan a ser parte de su ingreso. Esta realidad se presenta principalmente en los centros comerciales barriales, aquellos cuyo principal cliente es la gente del barrio, como sucede en 12 de Octubre, Tejedor o Constitución, entre otros.

Pero en simultáneo a la caída de las ventas, “el aumento tarifario también ha pegado mucho”, reconoció el presidente de la UCIP en relación a los fuertes incrementos aplicados en este último tiempo a las facturas de los servicios básicos.

“También están los aumentos salariales que se deben afrontar este contexto”, mientras que “el tema de los alquileres todavía es algo negociable con el propietario”, explicó Taladrid.

Por zona

En cuanto al análisis por centro comercial, se observan diversas realidades, pero queda en evidencia que en la zona sur de la ciudad es donde en mayor medida se siente el cierre de locales.

El microcentro, con 601 locales en total, reporta que 575 están actualmente abiertos mientras que 26 han cerrado, reflejando una tasa de desocupación del 4,33%.

Por otro lado, el centro comercial Juan B. Justo cuenta con 225 locales, de los cuales 196 están operativos y 29 han cerrado, mostrando una tasa de desocupación significativa del 12,89%.

El área de Güemes, que incluye 526 locales en total, tiene 491 abiertos y 35 cerrados, con una tasa de desocupación del 6,65%. En contraste, el centro comercial 12 de Octubre presenta una situación más crítica, con 167 locales, de los cuales solo 135 permanecen abiertos y 32 han cerrado, resultando en una alta tasa de desocupación del 19,18%.

El centro comercial Constitución, compuesto por 194 locales, muestra que 179 están abiertos y 15 han cerrado, con una tasa de desocupación del 7,79%. En Playa Grande, de 108 locales en total, 96 están operativos y 12 han cerrado, generando una tasa de desocupación del 11,11%.

Alberti cuenta con 227 locales, de los cuales 207 siguen en funcionamiento y 20 han cerrado, reflejando una tasa de desocupación del 8,81%. En Tejedor, de 162 locales, 152 están abiertos y 10 han cerrado, con una tasa de desocupación del 6,17%.

Por otro lado, San Juan, con 249 locales en total, tiene 225 abiertos y 24 cerrados, presentando una tasa de desocupación del 9,64%. Finalmente, en Talcahuano, que cuenta con 74 locales, 69 permanecen abiertos y 5 han cerrado, con una tasa de desocupación del 6,76%.

Desde la UCIP marcaron que los centros comerciales con tasas más altas de comercios cerrados corresponden a la zona sur de la ciudad, cuyos centros comerciales son 12 de octubre, con el 19,16%, seguido por Juan B. Justo, con el 12,89%, y Playa Grande (Alem), con el 11,11%.

En tanto, el microcentro se destaca con la tasa de desocupación de locales más baja en el 4,33% totalizando solo 26 locales cerrado por encima de los 600 locales disponibles.