Tras ser echado de su cargo por haber intentado ocultar el vuelco de una camioneta del municipio, el ex presidente del Ente de Vialidad y Alumbrado, Miguel Angel Guzmán, realizó un descargo a través de su cuenta de Facebook, mediante

el cual justificó su conducta, dio una nueva versión acerca de lo ocurrido y reveló ciertos hechos que podrían complicar todavía más su situación.

Entre todo lo dicho, aseguró haber llevado por decisión propia el rodado a la casa de un pariente y luego a un taller de chapa y pintura de San Luis, sin explicitar cuáles eran sus intenciones.

Tras el papelón que protagonizó al mentir sobre las circunstancias en las que destrozó el vehículo -había dicho que simplemente se le había roto el motor- el ex funcionario redujo todo a un simple error por haber “omitido” comunicarle lo sucedido a las autoridades.

Cabe recordar que Guzmán le había negado a LA CAPITAL haber volcado en San Luis con la camioneta del Emvial en un viaje particular que realizaba junto a su hija, asegurando que el rodado había tenido un desperfecto mecánico en Córdoba.

Ante la flagrante mentira, un día después de que el ex funcionario fuera puesto al descubierto, el intendente Carlos Arroyo se vio obligado a echarlo.

En su carta Guzmán confesó algunos detalles desconocidos sobre qué hizo después del accidente, como por ejemplo, que llevó el vehículo al domicilio de un familiar de su padre y luego, a un taller de chapa y pintura de San Luis.

El dato se presenta como algo revelador toda vez que todavía hoy el Emvial no informó sobre cuál es el destino de la camioneta ni cuáles fueron los actos administrativos adoptados tras el accidente, probablemente conocido por otros funcionarios que también intentaron mantenerlo oculto.

Yo, Miguel Ángel Guzmán, Siento la necesidad y obligación de dirigirme a la comunidad de Mar del Plata y Batan por lo ocurrido en estos últimos días. Primero informarle que nunca me consideré un Funcionario Político y si un Servidor Público, por este motivo atendí a todos aquellos que se han acercado a mi lugar de gestión y concurrí personalmente a todos los lugares del Partido en donde se ha requerido intervención inmediata del EMVIAL (Caminos Rurales, Sociedades de Fomento y Barrios Periféricos).
En el mes de Enero con el objetivo de agilizar y tratar de economizar recursos de la comunidad, tome la iniciativa de viajar a la Provincia de Córdoba con los fines de ir a buscar una maquina hidroelevador que se encontraba en esa provincia hacía meses por falta de pago.
Para ello consulto con la administración del EMVIAL, de cómo llevarlo a cabo, solicito un mecánico y un chofer de camión para que puedan verificar el estado del Hidroelevador y sus reparaciones y me dan la orden de compra con el detalle de las reparaciones de la empresa AXION. Además de este traslado tenía asignado en este viaje oficial, dos reuniones en la ciudad autónoma de Buenos Aires el día lunes 11 de enero del corriente año.
El día viernes 8 de enero por la madrugada paso a buscar a los dos empleados del EMVIAL por sus respectivos domicilios y por mi hija quien me acompaño en este viaje, por la tarde luego de recorrer 1100 kilómetros aproximadamente llegamos a la ciudad de San Francisco, Córdoba donde nos dirigimos a la empresa antes mencionada para tomar conocimiento de la maquina en cuestión, luego de realizar las verificaciones pertinentes del estado del hidroelevador, cargamos combustible en el mismo y los empleados municipales regresan a la ciudad de Mar del Plata. Ya solo y como debía continuar mi viaje a la ciudad de Buenos Aires, pero como estaba el fin de semana por medio a las mencionadas reuniones decido descansar con mi padre en la ciudad de Alto Pelado, San Luis y dejar a mi hija pasar diez días con el abuelo.
En el recorrido hacia dicha ciudad, se pincha la rueda trasera de la camioneta, mordiendo la banquina produciéndose el descontrol del rodado con su posterior vuelco, pido ayuda telefónica a mi padre y a un conductor que paso por el lugar, se acerca la policía para tomar conocimiento del hecho y nos trasladan a la localidad de BEAZLEY para realizar la denuncia pertinente, luego de ello hacia la ciudad de San Luis para los controles médicos de rutina.
Se traslada el vehiculo para su resguardo primeramente por tratarse de un sábado al domicilio de un familiar de mi padre y luego quedando en un taller de chapa y pintura de la ciudad de San Luis.
El día lunes regreso a la ciudad de Buenos Aires para cumplir con los compromisos acordados, en el marco de dichas reuniones oficiales, me reuní con el Sr. Amaya titular de la Secretaria de Desarrollo Urbano y Vivienda y el Sr. Abogado Hugo Capeloni en representación de Empresas por redeterminación de precios por obras del Plan Mas Cerca Mas Municipios. También realice gestiones por liquidaciones adeudadas del Plan de obras de Fresado y Recapado demoradas en la ciudad de Mar del Plata. Luego de asistir a esa reunión me dirijo a Petrolera San Jorge, con quien mantengo la otra entrevista pactada con el Sr. Arquitecto Hernan Goñi por tratamientos de residuos urbanos. Terminados con estos compromisos emprendo el regreso a la ciudad de Mar del Plata el mismo lunes.
El día 14 de enero hago un informe interpretando de buena fe que se trataba de un suceso accidental en el marco de mi actividad oficial programada, motivo por el cual omití comunicarlo a las autoridades.
Se encuentra a disposición de quien lo solicite, toda la documentación que avalan mis traslados y actividades de las fechas 8,9,10 y 11 de enero.
Me queda el sabor amargo de no haber tenido la oportunidad de darle más a mi querida Mar del Plata, tengo un gran sentimiento de dolor por todo lo expresado en los medios, pero lo entiendo, no me conocen, en los dos meses de gestión trabajé sin cesar con el corazón como siempre actúo y cada decisión que tome fue pensando en optimizar los recursos para la gestión y la comunidad.
No hice ningún papelón, no soy corrupto, y el viaje que realicé no fue de placer, soy solo un trabajador.
Estoy a disposición del Sr. Intendente Carlos Fernando Arroyo y la comunidad
Muchas Gracias
Ing. Miguel Angel Guzmán