Daniel Campos (52), un hombre que se dedicaba a hacer changas y trabajos temporarios, fue asesinado en su humilde vivienda del barrio Florencio Sánchez cuando se enfrentó a cuatro jóvenes, entre ellos dos mujeres, que acusaban a su hijo de haberle robado un televisor.

La víctima recibió al menos una puñalada por la espalda en medio de su intento por explicarle a los atacantes que su hijo no era la persona que estaban buscando.

“Son del barrio, sabemos quiénes son”, dijo Álvara Campos, hija del hombre asesinado, y conjeturó que el conflicto surgió porque en los fondos del terreno de la casa hay una “especie de aguantadero”.

El homicidio de Campos es el cuarto en Mar del Plata en 2023 -uno más, el de Valeria González, ocurrió en Batán- y es investigado por la fiscal María Florencia Salas, quien dispuso distintas medidas para certificar que las personas señaladas por los testigos sean las involucradas. De ese modo, se espera que en las próximas horas puedan realizarse algunas detenciones.

Todo se inició en horas de la madrugada de hoy cuando la familia Campos, integrada por Daniel, su hijo y su esposa, se encontraban durmiendo en la edificación delantera de un terreno ubicado en Mario Bravo al 6300. En ese lote hay otras dos viviendas hacia los fondos: en la del medio vive una mujer con varios menores y en el extremo posterior algo que los propios Campos definieron como “aguantadero”.

En ese momento arribaron dos varones y dos mujeres jóvenes para reclamar por el robo de un televisor en medio de gritos y amenazas. El primero en salir, naturalmente por vivir en la casa del frente, fue Campos y luego su hijo, quien los enfrentó.

“Mi hermano empezó a gritarles para que se fueran, más que nada porque la mujer del medio tiene muchos chiquitos y no quería problemas“, explicó Álvara y agregó: “Pero los pibes estos se la agarraron con mi hermano y ahí pasó lo que pasó”.

“Se pelean con mi hermano y mi viejo lo defiende. Ahí lo acuchillan y se van”, narró la hija de Campos y agregó: “Son del barrio, sabemos quiénes fueron”.

Según contó la familia Campos hubo una confusión ya que el reclamo debía haber sido hecho a las personas que, ocasionalmente, ocupan la vivienda de los fondos. “Dos personas, que no sabemos quiénes son, le robaron a otro pibe del barrio y después se juntaron en el fondo del terreno, que es como un aguantadero”, dijo Álvara.

Campos no sobrevivió al ataque y quedó tendido en el mismo patio delantero de su casa. De inmediato la familia de Campos pidió asistencia a la policía y tras narrar los hechos describió a los autores.

La fiscal Salas analiza por estas horas distintas pruebas para avanzar en el esclarecimiento, mientras que la policía reforzó su presencia en la zona.

Años atrás en ese domicilio se realizó un importante operativo policial en el que se secuestró cocaína, marihuana y se estableció que funcionaba un point de drogas. Lo particular del caso es que la fachada usada por los dealers era un falso Comedor Infantil llamado Brisa del Mar.