MIRAMAR (Corresponsal). – En 2012 los hermanos Federico Faccin (30) y Franco Faccin (27), elaboraron de acuerdo a una tradición familiar mantenida en el tiempo, su primer alambique, quizá sin conocer realmente el alcance que ese proyecto surgido gracias a una tradición familiar iba a tener a futuro.

En principio, la idea de acuerdo a un legado de destiladores, era contar con un equipamiento para uso casero, pero con el tiempo y apostando a un mercado que fue demandando otros caminos, se convirtieron en los mayores distribuidores del país.

En la actualidad la fábrica “Fratelli”, constituida en Miramar, es la marca número 1 de Argentina de alambiques y destiladores de bebidas alcohólicas, acaparando el 90% del mercado.

“Es un emprendimiento que empezamos con mi hermano Franco en 2012 cuando hicimos nuestro primer alambique para uso propio, pero en realidad la producción de los equipamientos para comercializarlos comenzó en hace tres años”, contó Federido Faccin a LA CAPITAL.

La idea fue comenzar a proyectar equipos de destilación, por una tradición familiar ya que sus antecesores se dedicaban en su momento a este proceso con la grapa.

“Con mi viejo construimos el primer alambique hace mucho tiempo, probamos varias cosas. Terminé la facultad, donde me recibí de Ingeniero en Materiales, trabajé en Conicet dos años para luego volcarme a armar una destilería de ron, que se llamó “Rocas Negras”. Ese proyecto duró poco más de un año en Miramar y la zona”, reflejó Faccin.

Después al observar que había un mercado expectante y analizando una demanda que crecía, los hermanos se volcaron directamente a fabricar equipos. “Visualizamos un gran interés para elaborar gin sobre todo y nos empezaron a preguntar quién había fabricado nuestros equipos. Eso nos dio el pie para arriesgarnos e iniciar nuestra propia producción de la maquinaria”, contó el miramarense a este diario.

“En mi familia son todos ingenieros, les gusta desarrollar ideas y este tipo de proyectos, así que armamos la fábrica y actualmente ya llevamos vendidos casi 500 alambiques en Argentina y otros países limítrofes como Bolivia y Uruguay, donde ya estamos por exportar un equipo más grande”, expresó.

“Hoy en día las marcas argentinas líderes de gin como Heráclito, Buenos Aires, Heredero, Oid Mortales, Gina son clientes nuestros al igual que el whisky Casares”, se explayó Faccin.

Mayor alcance

De a poco el mercado llevó a estos jóvenes empresarios a impulsar nuevas ideas de acuerdo a las necesidades comerciales que iban planteándose.

“Desde hace dos temporadas elaboramos equipamientos caseros e industriales para originar aceites esenciales, y el último año y medio sumamos extractores de aceites de cannabis por método de roto vapor y arrastre de butano que funcionan en vacío y de esa manera se extrae resina de cannabis de altísima calidad”, expresó Federico Faccin.

“Esos son los rangos de aplicación de nuestros productos, con las legislaciones nuevas sobre el cannabis creció mucho la venta de estos equipos y de a poco nos vamos metiendo en ese mercado, siendo el único proveedor del país de forma profesional”, se explayó.

No obstante, para alcanzar el éxito, como todo proyecto existen cuestiones difíciles de afrontar. “Es un trabajo lindo, pero lleva mucho esfuerzo y stress. Nos gusta, por eso le metemos para delante”, aclaró el hermano mayor de los Faccin.

“Hoy la fábrica tiene 8 personas trabajando, hacemos también dispositivos automáticos, electrónicos, alambiques que funcionan solos. Los materiales de construcción son importados, es decir que las piezas los adquirimos a distribuidores o directamente los compramos nosotros en el exterior ya que en Argentina no hay prácticamente nada”, concluyó.