El fiscal Leandro Arévalo solicitó la prisión preventiva para los dos detenidos por el asesinato del cartonero Juan Cruz Taltavull (41), aunque redujo la responsabilidad penal de uno de ellos por considerar que su rol fue secundario, y ahora deberá resolver la Justicia de Garantías.

El crimen se produjo a mediados de mayo en el barrio Autódromo cuando Taltavull arrastraba un carro con cartones junto a su hijo y fue atacado a los tiros por Alexis Brizuela desde una motocicleta. Junto a Brizuela iba a Patricio Berón, quien luego diría que ser sorprendió por la reacción de su amigo y que ni siquiera sabía que llevaba un arma.

Este argumento fue aceptado por el fiscal Arévalo y corroborado al analizar las cámaras de seguridad que muestran con precisión y nitidez el momento del ataque. Por eso motivo es que decidió modificar la calificación respecto a Berón, aunque, de todos modos, pidió que siga en prisión. “En la semana vamos a tener la audiencia con la jueza de garantías y seguramente interpondré la falta de mérito en relación a Berón”, dijo su abogado, Matías Quiñones.

🔴Fiscalía pide prisión preventiva para los acusados de matar a un cartonero
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— La Capital MdP (@lacapitalmdq) June 1, 2024

El homicidio tuvo lugar el 17 de mayo de 2024, alrededor de las 19.14, en las inmediaciones de las calles Soler al 12000 de esta ciudad. Por allí Juan Cruz Taltavull y su hijo Javier Oscar Galmez empujaban un carro con cartones de regreso a su casa, ubicada a menos de una cuadra. Brizuela, que llevaba a Berón de acompañante, detuvo la motocicleta en la que se movilizaba, extrajo una pistola calibre 9 milímetros y disparó repetidamente

La emboscada fue desde atrás a unos 50 metros y las víctimas fueron tomadas por sorpresa. En una primera instancia, Brizuela disparó al menos cuatro veces sin bajarse de la moto y luego, ya en retirada, efectuó otro más mientras doblaba por calle Río de la Plata. Uno de los proyectiles impactó en la espalda de Juan Cruz Taltavull y otro alcanzó a Edelmira del Carmen Beltran, quien se encontraba en un almacén ubicada a casi 100 metros de los primeros disparos.

Tras el ataque, Brizuela y Berón se retiraron rápidamente del lugar en la motocicleta, aunque días después se presentaron ante la Justicia.

El motivo del trágico ataque había sido un altercado previo entre Brizuela y Galmez. Según el testimonio de Galmez, mientras él y su padre regresaban a su casa tras recolectar cartones se encontraron con Brizuela y Beron en una motocicleta. En un momento dado, Brizuela intentó agredir físicamente a Galmez, quien se defendió y logró hacer caer a Brizuela de la moto. En medio de la confrontación, Brizuela amenazó a Galmez y su padre advirtiéndoles que lo atacarían a tiros.

Esta pelea previa entre Brizuela y Galmez evidencia un ambiente tenso y violento que culminó en el posterior ataque armado por parte de Brizuela hacia las víctimas. La confrontación inicial entre Brizuela y Galmez fue el preludio de la tragedia que se desencadenó minutos después.

Para el fiscal Arévalo las características del ataque configuran el agravante de alevosía, ya que tanto Taltavull como su hijo se encontraban totalmente indefensos, desprevenidos, y fueron tomados por sorpresa por los agresores, quienes, sin correr riesgo alguno, le efectuaron varios disparos mientras estos caminaban hacia su vivienda. Ninguno de ellos tuvo la posibilidad cierta de defenderse, guarecerse, resguardarse. Ninguno de los agresores corrió peligro alguno ante el ataque perpetrado. Por lo tanto, quedó imputado de homicidio agravado por alevosía y por el uso de arma de fuego respecto a Taltavull y homicidio agravado por el uso de arma de fuego en grado de tentativa respecto a la mujer herida.

Berón, de coautor pasó a ser partícipe secundario.