Desde las fiestas electrónicas más convocantes hasta boliches con vista al mar, pasando por afters beach a lo largo de toda la costa marplatense. La diversión para los jóvenes en Mar del Plata está asegurada de la mano de un abanico de opciones que crecen, se asientan y atraen. 

El ojo entrenado de un operador turístico con años en la ciudad o el excel del empresario más cuidadoso no son necesarios para aquellos que, en alguna tarde o noche de enero, pasaron por algunos de los puntos “calientes” en cuanto a divertimento se refiere: el número de jóvenes en la ciudad es alto y su predisposición a no perderse alternativa disponible, también.

La “fiesta” arranca con los after beach. Algunos hacen el esfuerzo y se levantan temprano para copar la playa desde las primeras horas del sol. Otros, prefieren descansar y hacer su ingreso en el momento exacto en el que, al caer la tarde, arrancan esas fiestas a orillas del mar con la misma música que en un boliche pero con menos ropa, en general gratis y con la posibilidad, si Inspección General no requisó antes, de contar con el alcohol comprado a precio de supermercado, lo que abarata los costos. Además de los ya clásicos de Playa Grande y paradores sureños, la novedad de esta temporada fue que las fiestas en la playa también llegaron al norte, a unos metros del Museo MAR.

La multitud también se refleja en los balances. Referentes de afters de las playas sureñas aseguran que la temporada “viene muy bien” y que pese a que algunas opciones no se destacan por ser “económicas”, los jóvenes dicen presente.

A la noche la distribución se achica. En un mismo sector -Playa Grande- se concentra una gran parte de la oferta de la ciudad, provocando que una multitud circule y se concentre en no más de 700 metros.

Federico Goransky, responsable de Bruto, uno de los boliches más elegidos de la zona, aseguró que en el sector se suma al entusiasmo esbozado por otros operadores turístico ante el balance parcial de la temporada.

“Se viene trabajando muy bien, se ve que vino mucha gente y sobre todo jóvenes“, señaló el empresario, al tiempo que indicó que la primera quincena de enero fue a todas luces lo mejor de la temporada. “En relación al año pasado el incremento de laburo rondará el 50%”, aseguró.

A la oferta de entretenimiento clásico como pueden ser los boliches, desde hace varios veranos que Mar del Plata es escenario de fiestas electrónicas con los más altos exponentes del género.

En plena playa y con una espacio disponible para contener cerca de quince mil personas, los espectáculos y fiestas que allí se realizan son, para muchos jóvenes, garantía de diversión.

De lo que va de la temporada, aseguran que este último fin de semana fue uno de los más importantes en cuanto a convocatoria. Con entradas a partir de los 3.000 pesos, el DJ alemán y productor de música electrónica conocido como Claptone especializado en los sub-géneros techno, house, y deep house llegó a reunir a cerca de 10.000 personas.

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