LA PLATA
Corresponsal

El lunes por la mañana, en una reunión en la que representantes del Ejecutivo bonaerense y dirigentes gremiales de los trabajadores judiciales discutían cuestiones salariales, resultó por lo menos intrigante la presencia del titular de la Asesoría General de Gobierno, Gustavo Ferrari.
Menos de 24 horas después, el misterio corrió su velo y lo que antes eran intrigas, luego fueron certezas, la renuncia de Carlos Mahiques a la cartera de Justicia provincial, allanó el camino para la llegada de Gustavo Ferrari, cuyo reemplazante todavía no fue designado.
Y si bien la noticia fue dada a conocer en la jornada de ayer, la presencia del asesor general de gobierno en la discusión paritaria del lunes muestra a las claras que la decisión ya estaba tomada y que la gobernadora estaba en conocimiento de la misma. Lo que no se sabe a ciencia cierta y sobre lo que hay muchas especulaciones, son los motivos que alejaron a Mahiques de su cargo en el Ejecutivo bonaerense.
Están los que dicen que la Cámara Nacional de Casación Penal no le renovaría nuevamente la licencia y que ante esa posibilidad, prefirió volver. No son pocos los que afirman que las aspiraciones del ahora ex ministro no se veían satisfechas con su cargo en el gabinete de Vidal, sino que pretendía el lugar que desde hace más de una década ostenta María del Carmen Falbo al frente de la Procuración, que supo aguantar las embestidas del poder cuando a fines de 2015 escaparon los tres presos más buscados del país de la cárcel de General Alvear. Finalmente, también están los que aseguran que desde aquella fuga, Mahiques no se sintió cómodo al frente de Justicia, aunque no tuvo que hacerse cargo de los platos rotos, cuyos pedazos en aquel momento recogió el encargado de la Seguridad provincial Cristian Ritondo.
Cualquiera sea el motivo que lo impulsó, su renuncia se hizo efectiva tras conocerse la carta que le envió a la gobernadora María Eugenia Vidal, en la que sostuvo que “fue un privilegio haber contado con su confianza y estímulo en este tramo fundacional de su gestión”.
El ahora ex funcionario de la administración provincial, agregó además que “La inminencia del vencimiento, el próximo 10 de junio, del plazo de la licencia otorgada por el Poder Judicial de la Nación ?que integro como juez de la Cámara Nacional de Casación Penal- me persuaden de la necesidad de retomar la función a la que me he dedicado más de cuarenta años de mi vida”, agregó. Y finalizó diciendo “sentamos las bases para la impostergable reforma del Servicio Penitenciario bonaerense”.