Considerado como un artista renacentista y figura icónica del under en la Argentina, Fernando Noy es un poeta, performer, actor, director, dramaturgo, traductor, representante de artistas. Desde hace años colabora en numerosas publicaciones y en suplementos culturales sudamericanos y europeos.
Luego de su autoexilio en Brasil, donde vivió en la aldea hippie de Arembepe y en Salvador, y a su regreso se convirtió en protagonista indiscutido y pionero del under porteño, junto con figuras como Alejandro Urdampilleta, Humberto Tortonese y su alter ego entrañable: Batato Barea, con quien presentó su legendario espectáculo “Androrock”, entre otros.
-Has sido y sos un ícono del under argentino y sudamericano, ¿te ves así reconocido en las generaciones más jóvenes?
-Difícil reconocerse en los jóvenes, que a veces pierden este tiempo y se miran en el espejo de un futuro siempre incierto, pero sí, algunos me conocen, otros buscan en mi obra, y en la de Batato, el gran Urdampilleta, Tortonese, el agua de la que nutrirse y así todo se liga y se transforma y yo me siento agradecido y como un puente entre lo que fue, lo que es y lo que será.
-Desde aquel under del Parakultural hasta ahora, tiempo en el que incluso tu figura y tu obra, según algunos estudiosos, dos caras de la misma moneda, han trasvasado el límite y hoy en día y ya desde hace tiempo estás también en circuitos más comerciales o populares, ¿cómo ves ese cambio? ¿A qué creés que se debe?
-A la fuerza del trabajo y al libre pensamiento y libre sentimiento de personas que han compartido mi arte, como espectadores, pares, colaboradores y que no se dejan encasillar por rótulos. Hace años vine a este maravilloso Auditorium, estuve en Villa Victoria, también en el café Astor… mi obra fue publicada y apreciada por gracia de quién sabe qué, y hasta soy materia de una tesis académica de la licenciada Virginia Ceratto que dirigió una doctora en Letras, Marta Villarino, y que pronto vamos a publicar, es decir, la gente, la maravillosa gente, que tampoco viene de esta vida, sino de otras, hace que los tránsitos, los pasajes, este ir y venir por puentes mágicos sean posibles.
-Mar del Plata es uno de los destinos terrenales de esos puentes y en esta realidad…
-Mar del Plata lo es, sí, sobre todo en este tiempo, con sudestadas y todo. Aquí he estado y siempre volveré. Aquí tengo amigos y referentes entrañables, algunos que están, como Marán, o Vir, y otros que han partido y que se quedaron en mí, como Blanca Saager, Juan Carlos García Reig, Juan Kunta Miagros, a quienes les dedico mi espectáculo del viernes… ellos son motores, todos, con ellos formamos una familia estelar que no se puede romper y que no conoce fronteras. Además aquí he logrado mis mejores performances y algunos de mis grandes amores, los que te nombré, por ejemplo.
-Una definición de la poesía…
-La vida misma, con todo su amor, y su desgarramiento, con su magia y su oquedad… y sobre todo con su poder de transformación y de reencarnación, ya, aquí, ahora, uno puede, si se funde con y desde la poesía, superarse y ser otro… en este mismo tiempo, en este mismo lugar, solamente así se trasciende.
Fernando Noy se presentará hoy a las 21 en la sala Nachman, con un precio más que popular, con su espectáculo “La poesía en escena”, con textos de Alejandra Pizarnik, Olga Orozco, Amelia Biagioni, Marosa Di Giorgio y Adelia Prado, más un monólogo inédito de su autoría: “El cuarzo oscuro”.