La familia de Lucas Nahuel Jérez (27), el delincuente abatido por un jubilado que lo sorprendió ingresando a su vivienda, reconoció no tener nada en contra del hombre e incluso sostuvo que “reaccionó como cualquiera de nosotros lo hubiera hecho”.

En un valiente texto enviado a la redacción de LA CAPITAL, la tía del joven muerto de un disparo en la casa de Azopardo al 3300, reafirmó la postura familiar al decir que “nosotros no condenamos al hombre mayor por lo que hizo, reaccionó como cualquiera de nosotros lo hubiera hecho, no vamos a tomar represaria contra el ni contra su hogar, somos una familia de gente trabajadora”.

Debido a algunas publicaciones y a los dichos -erróneos- del intendente Guillermo Montenegro sobre la salida anticipada de Jerez de la cárcel de Batán, la familia del ladrón abatido quiso “desmentir que él haya salido antes de tiempo de la cárcel por cuestión del Covid, el cumplió su condena y es más, el tendría que haber salido en marzo pero por la pandemia se retrasó al mes de abril, no fue beneficiario de nada”.

“Más allá de como ustedes lo llaman delincuente chorro etc, él ante todo era hijo, hermano, sobrino y nieto y atrás hay una familia que sufre, respeten nuestro dolor. No justificamos el accionar de Lucas, nunca estuvimos de acuerdo con su forma de vida pero era una persona adulta que tomaba sus propias decisiones, siempre tuvo una familia atrás que lo amaba y lo contuvo lo mejor posible pero cada uno elige su camino”, señala otro pasaje de la carta.

Por último, la familia Jérez pidió a los medios la posibilidad de “hacer nuestro duelo tranquilos”.