El empresario Julio Argentino “Tino” Fernández falleció este martes a los 75 años y su deceso generó un profundo dolor en el ambiente empresarial marplatense.

Con una dilatada trayectoria en la ciudad, estaba al frente junto a sus hermanos de la planta procesadora de papas Fernández Hnos. SA.

Fernández estaba internado desde el jueves en el Hospital Privado de Comunidad (HPC). Según contaron desde su entorno, sufría una cardiopatía severa desde hace tiempo y periódicamente requería de internaciones y atención médica.

Nacido en La Dulce, partido de Necochea, el 9 de julio de 1945, Fernández se trasladó a Mar del Plata de muy joven con el objetivo de trabajar y progresar económicamente. Junto a sus hermanos, montaron una empresa que primero se dedicó al transporte de productos agrícolas y se diversificó a la producción.

Al ser consultado por LA CAPITAL, el hijo de Fernández, Fabián, lo recordó como “una bella persona”. “Hemos compartido muchas cosas. Nació en un pueblito chiquito, tuvo una vida de mucho trabajo y sacrificio, pero también de mucha alegría”, señaló, emocionado.

El hombre, que trabaja en la firma familiar, contó que su padre se mudó de La Dulce a Mar del Plata desde muy joven “para progresar” y a pesar de haber cumplido 75 años hace pocos meses continuaba activo.

“Por ser una familia numerosa, como ocurría antes, mi padre se trasladó a Mar del Plata para progresar. La nuestra siempre fue una empresa familiar, trabajó con sus hermanos y fueron creciendo. Todo lo que encaró siempre fue con mucho entusiasmo, mucha alegría y mucho esfuerzo, y él disfrutó de cada paso que fue dando”, sostuvo.

Con respecto a la vigencia de “Tino” Fernández en la actividad empresarial, Fabián fue tajante: “Él nunca se retiró, siempre estuvo activo a pesar de su edad. No estaba en su espíritu retirarse, siempre fue una persona muy emprendedora y muy activa”.

En cuanto a la trayectoria de la firma, que comenzó como una empresa de transporte a la que después se le agregó la producción agropecuaria, Fabián Fernández mencionó que “se fue dando y creciendo como tantas historias de empresas familiares en la ciudad”.

“Se inició acá y fue creciendo en la zona, con una trayectoria reconocida de más de 50 años. Yo trabajé siempre con él y como pasa en estos casos, tuvimos momentos dulces y amargos, como los tienen todos en las empresas familiares. Pero fue muy lindo”, describió. Y agregó: “Cada discusión o ‘rabieta’ que teníamos duraba muy poco. Yo me quedo con el más grato recuerdo personal de mi padre”.

Consternación

Como “Tino” Fernández había estado internado en anteriores oportunidades debido a la cardiopatía que padecía, sus familiares y colegas del ámbito empresarial se vieron sorprendidos con el deceso, lo cual hizo que aquello provocara aún mayor dolor y consternación entre sus pares.

En ese sentido, Fabián explicó: “Tantas veces salió que pensamos que esta vez también iba a salir, pero es la ley de la vida, lo aceptamos así… Todos siempre lo vamos a extrañar y a recordar con mucho cariño y mucha alegría“.

Vale destacar que “Tino” Fernández estaba relacionado laboral y amistosamente con otros múltiples empresarios locales, a los que solía reunirse de manera habitual en determinados eventos organizados por los distintos sectores productivos de la ciudad y la zona.