Facundo Pastor: “El periodismo está perdiendo la capacidad para contar buenas historias”
Presentará este sábado en Mar del Plata el libro "Emboscada", en el que reconstruye los últimos momentos de la vida de Rodolfo Walsh y el destino de sus textos ficcionales, también arrebatados por grupos de tareas.
"Nadie había abordado el final, cómo había sido la caída" de Walsh.
Fue tras el rastro de una buena historia y la encontró en la inagotable cantera de la década del ´70. El periodista Facundo Pastor investigó el último trayecto vital de Rodolfo Walsh, quien fue secuestrado en marzo de 1977 y posteriormente llevado a la Esma, durante la última dictadura cívico militar. Asimismo, reconstruyó, hasta donde pudo, el destino que tuvo el material de ficción inédito que dejó el periodista y escritor antes de su muerte, así como su archivo. Esos papeles personales también fueron arrebatados de la casa de Walsh, poco tiempo después de su captura.
Tras una larga investigación, modeló “Emboscada” (Aguilar), un libro dominado por una parte “muy dura”, aseguró Pastor en diálogo con LA CAPITAL, y por otra “más esperanzadora”.
Pastor estará este sábado en Mar del Plata para presentar su nueva investigación periodística. A las 19 en la sala Nachman del Teatro Auditorium participará en el ciclo “Poner a los libros de moda”, que modera Federico Bruno.
“La respuesta es bastante simple”, dijo al ser consultado sobre por qué Walsh -consagrado autor de libros como “Operación masacre” y “El caso Satanowsky” y figura clave del periodismo comprometido- y por qué meterse con el final trágico de su vida.
“Era una buena historia para escribir y para documentar y yo estoy cada vez más convencido de que el periodismo en el último tiempo está perdiendo la capacidad para contar buenas historias. Sobre Walsh hay escritas muchas cosas, pero todo lo que hay escrito generalmente aborda su obra, que ha marcado la literatura latinoamericana, pero nadie había abordado el final, cómo había sido la caída. Ese final era una historia que valía la pena ser contada y ser escrita”, agregó.
El periodista de América TV y radio La Red definió una buena historia, concepto vital para los medios de comunicación y su llegada a las audiencias: “Es la que me deja sin poder dormir un par de días o la que me genera cierta pasión a la hora de leerla o de escribirla. Yo soy bastante lector y siempre ando dando vueltas con libros. Muchas veces me doy cuenta de que hay libros que leo y hay libros que devoro. Las buenas historias tienen que buscar eso, cierta empatía y buscar una suerte de pacto con el lector y que el lector te vaya acompañando”.
En “Emboscada”, Pastor inserta la desaparición de Walsh en el marco de “una cacería” que organizaron los grupos de tareas de la dictadura. “La reconstrucción de cómo desapareció Walsh hay que atarla a varios compañeros, militantes en el ámbito de la inteligencia de Montoneros (también desaparecidos). Es una parte dura, triste y angustiante porque es meterte con la vida de jóvenes que se iban escapando”, aseveró.
Y destacó el operativo realizado en torno a Walsh. “Lo venían buscando desde hacía un año, sabían lo que significaba Walsh como escritor, aunque desarrollaba un rol de militante común y corriente en Montoneros, para llegar a él hicieron una suerte de cacería y en esa cacería recolectaron mucha información”.
Sobre la ruta de los textos inéditos de Walsh, Pastor llegó hasta la Esma. “Varios prisioneros, algunos sobrevivientes en la Esma vieron el archivo, pero cuando parecía indicar que las cajas de Walsh se habían perdido en la Esma, apareció una testigo, una mujer sobreviviente que dio cuenta de que los documentos de Walsh salieron de la Esma. Me puse a buscar a esta mujer y me costó bastante encontrarla, finalmente la encontré en Perú, en Lima. Me costó convencerla de que me contara qué había visto y a partir de ese testimonio logré avanzar bastante más en lo que se conocía respecto del derrotero de los documentos de Walsh. Logro determinar cómo los sacaron de la Esma, quien los sacó, adonde fueron a parar, encuentro el lugar y dónde estuvieron los cuentos”.
Para Pastor, “Emboscada” es un libro abierto, en relación a la dificultad de hallar la ficción inédita de Walsh. “Digo que es abierto… una manera de no decir que me frustró mucho no haber podido avanzar. Es un libro incompleto, a partir de la publicación empezaron a pasar algunas cosas y están pasando algunas cosas y ojalá que derive en algo”, dijo sobre la posibilidad de sumar datos que permitan encontrar los textos ficcionales del gran escritor.
“Sería increíble poder hacer una nueva edición con algún dato más concreto. En eso estoy trabajando”, confió.