Hernan Fares Taie (*)

Cuando una persona se hace el autotest, la toma de muestra pierde 23 puntos de sensibilidad. El test rápido baja de una sensibilidad del 78% al 57%*.

Si calculamos el valor predictivo NEGATIVO de este autotest, en las condiciones actuales de prevalencia de la enfermedad en las poblaciones que se acercan a solicitar un test que hoy en nuestro laboratorio es del 65 %, tendremos valores predictivos negativos del 55,6%, o sea que el 44,4% de la gente tendrá un resultado falso negativo.

Desde el punto de vista de la Medicina Basada, tomamos las evidencias científicas para hacer un análisis de la relación entre los riesgos y beneficios de usar un determinado test en beneficio de la salud. Al realizar esta evaluación encontramos que los falsos negativos generan un gran riesgo a la salud ya que estas personas con resultados falsos negativos van a tomar decisiones, ponen en riesgo la salud de otras personas y un mayor número de contagios. Y en estas circunstancias la cantidad de falsos negativos son altos y la de falsos positivos son bajos. De cualquier manera los falsos positivos no generan riesgos a la salud ya que un falso positivo solo dejaría a una persona aislada sin necesidad.

Pero curiosamente quienes defienden el autotest proponen confirmar los positivos demostrando una clara falta de capacidad científica para hacer el correcto análisis. Esto desde la Medicina Basada en la evidencia lo llamamos SESGOS basados en intereses que están por fuera del cuidado de la salud. Es claro que en este caso existe un claro sesgo por cuestiones comerciales.

Como conclusión, el autotest no aporta beneficios a la salud, podría generar problemas de bioseguridad en el manejo de residuos patogénicos, pérdida de información epidemiológica valiosa al SISA para la toma de decisiones y falta de soporte profesional para el uso e interpretación adecuada de los test, entre otras.

Creo sí que es importante facilitar el acceso a los test a los pacientes sin que tengan que hacer largas y peligrosas colas en las puertas de los laboratorios. Para esto es necesario que se permita habilitar en forma temporal a los profesionales bioquímicos con laboratorios habilitados para que puedan utilizar lugares alternativos para realizar estos estudios facilitando el acceso de las personas a la realización de los test y evitar el malestar de las personas que se quejan de este problema y por el cual el Ministerio de Salud de la Nación piensa resolver con la venta de los autotest en farmacias.

(*) Bioquímico