Los 35 milímetros de lluvia caídos ayer, entre la mañana y las primeras horas de la tarde, generaron que 19 personas (algunos integrantes de la misma familia) fueran evacuadas y trasladadas hasta el Centro de Desarrollo Integral (CDI) del barrio Pueyrredon.

Las personas asistidas son residentes de los barrios Libertad, Ameghino y Belgrano y se trata de adultos, menores y dos personas discapacitadas.

Si bien las inclemencias climáticas afectaron a la mayoría de los barrios marplatenses, los más damnificados fueron “las zonas más bajas”, detallaron desde Defensa Civil (DC).

Las familias evacuadas sufrieron “diversos problemas de filtraciones y por seguridad fueron trasladados por personas de Desarrollo Social”, especificó el titular de DC, Rodrigo Gonçalvez.

Si bien la caída de “35 milímetros” de agua no significa una gran magnitud, los destrozos que generó se debieron a que “fueron intensos, ya que cayeron con intensidad en un corto espacio de tiempo” a lo que se sumó la suciedad reinante en las calles marplatenses.

“Hubo muchas calles anegadas y los barrios más afectados fueron los más bajos -detalló Gonçalvez-, como en las inmediaciones del estadio Mundialista, el puerto, zona sur y Peña e Italia, entre otros”.

En ese sentido, desde Defensa Civil agradecieron el apoyo recibido “tanto por parte de los Bomberos como de Obras Sanitarias, que ayudaron en distintas tareas”. Ya en horas de la tarde, aseguraron que “el agua empezó a bajar y poco a poco se va normalizando”.

Asimismo, Gonçalvez recordó que “no había ninguna alerta meteorológica pero cayó mucha agua de golpe y eso saturó los pluviales, a lo que se le tiene que sumar los restos de poda y la basura que no permitió que el agua corra con fluidez”. Asimismo, reconoció que a media tarde recibió el llamado de la caída de un árbol en el Bosque Peralta Ramos.

Trabajo conjunto

Por su parte, la secretaria de Desarrollo Social de la Municipalidad, Vilma Baragiola, describió que “se está trabajando con Defensa Civil y a través de ellos articulamos con las diferentes familias. Estamos viendo quienes pueden ir a casas de familiares y si no le damos alojamiento nosotros en nuestro parador de evacuados”.

Luego de descartar la posibilidad de aumento de los evacuados, “por ahora no llamó nadie más”, aclaró, la funcionaria detalló que “estamos viendo como podemos contener a las personas que tenemos para que puedan volver a su domicilio lo antes posible”.

Las calles marplatenses convertidas en ríos, tapadas completamente por el agua, fue una postal ayer a la mañana en algunos barrios, como el Puerto, Cerrito y San Salvador, algunos sectores de La Perla, y Quebradas de Peralta Ramos, entre otros.

Más de un metro

En la esquina de Juan Manso y Carasa, por ejemplo, el agua superó el metro de altura y se metió en varias casas, quedando los vecinos en el interior de las casas y hasta la inundación de algunos vehiculos. En tanto, en Posadas y Azopardo, a media mañana, un taxi quedó literalmente tapado por el agua. Y situaciones similares se sucedieron en distintos puntos geográficos de la ciudad.

En el barrio Quebradas de Peralta Ramos padecieron la misma situación que se repite desde hace 7 años: cada vez que llueve la zona se vuelve intransitable, tal como sucedió ayer en Marcelo T. de Alvear al 5800.

“Es un desastre como quedó todo y eso que cayeron solo 35 milímetros. Si llega a llover dos días seguidos quedamos tapados por el agua”, describió el vecino Pablo Alvarez, que además es tesorero de la sociedad de fomento del barrio.

La situación de anegamiento se produce por efecto de las condiciones climáticas y “por la mano del hombre, porque en el barrio cerrado Rumencó colocan una reja en el paredón perimetral por seguridad pero no permite que fluya normalmente el agua del arroyo Corrientes”.

“Muchas casas están bajo el agua, que alcanzó el metro -sentenció-. De hecho, en una vivienda tuvieron que desatar a los perros porque corrían peligro de morir ahogados”.

Si bien reconoció que el tema “está judicializado”, Alvarez pidió “una respuesta y solución por parte de la municipalidad” debido a que “hay casas muy afectadas y muchos de los terrenos quedaron anegados. La napa ya está completamente superada, la tierra ya no absorbe más agua. Estamos en una situación delicada”.

Un vecino del barrio Cerrito Sur, Claudio Cali, aseguró que la zona quedó “hecha un desastre” y en horas de la tarde el agua había comenzado a escurrirse por Mario Bravo.

“Pero se inundó todo y nadie ayuda desde el gobierno -describió-, pero el Estado está ausente porque estuvimos llamando a Desarrollo Social y nadie atendió. Nos ayudamos entre los vecinos”.

Piden ayuda

El hombre es voluntario en el comedor “El merendero de Valeria”, ubicado en José Martí al 3500, que ayer sufrió la inundación. “Tenemos 150 chicos a los que les damos de comer y todos sufrieron la inundación. Muchas casas están inundadas pero nadie se quiere mover para no perder lo poco que tienen”.

En ese sentido, pidió ayuda con “frazadas, ropa seca, zapatillas, colchones y lo que puedan. Que lo alcancen al comedor o que me avisen que yo lo paso a buscar”. Para contactarlo se puede comunicar a través de Facebook/Claudio Cali.