Estrena este viernes en Mar del Plata la obra “40 Días y 40 Noches”, de Gonzalo Demaría con dirección de Luciano Cáceres y las actuaciones de Leonor Manso, Pablo Alarcón, Juana Viale, Joaquín Berthold e Iván Muñoz. La puesta, con producción integral del Gobierno de la Provincia de Buenos Aires, tendrá funciones de jueves a domingos durante todo el verano, en la sala Astor Piazzolla del Teatro Auditorium.
Se tata de una producción realizada especialmente para la temporada alta de Mar del Plata.

En “40 Días y 40 Noches” una madre y su hijo se reencuentran después de años de no verse. Él trae una sorpresa. Pero la de ella es mayor: ha vuelto a ser joven, igual que el padre. ¿Son síntomas de una enfermedad mental o es un milagro? El hijo tendrá que descubrirlo, ayudado por su novio negro y su ex novia japonesa.

Su director, Luciano Cáceres, manifestó que la pieza reactualiza el tema bíblico del diluvio universal. “Le avisan al personaje de Pablo Alarcón que se viene el diluvio, que tiene que juntar a las especies de los animales y a los humanos para que siga la raza humana. La pareja de Pablo y Leonor se ama, eso es lo primero que sorprende, son muy activos. Hacen volver al hijo que se fue a Buenos Aires. El hijo viene con una novedad: trae a su novio senegalés y entonces ahí aparece la primera fallita con respecto a qué tipo de parejas subimos” al barco.

En ese sentido consideró que “un gran acierto del espectáculo es volver a abordar los grandes temas de la vida desde el humor” y que “es una obra que no traiciona al espectador, se da lugar a la emoción, a la reflexión, a la interpretación, no son espectáculos que ya están digeridos de antemano, sino que requieren de espectadores activos y que se vuelvan cómplices de la propuesta”.

Leonor Manso, en tanto, aseguró que “me da mucho placer hacerla porque habla de lo humano, de la familia, de la aceptación del distinto”.

Viale, por su parte, indicó que “mi personaje es un conductor de la obra, induce y conduce al público a diversos estadíos y va presentando cada escena”.

La actriz, que se embarca en su primera experiencia en la temporada marplatense con el desafío de interpretar dos obras, aseveró que no podría comparar al teatro con el cine o con la tele. “Es otro arte y el contacto con el público… es como una toma, no hay una doble opción de volver o de rehacer o de retomar lo que uno ha dicho. Se manejan las energías, con la que uno viene, con la que tienen tus compañeros, la del público y la energía del público se nota muchísimo, muchísimo. Es súper importante concentrarse para poder dar lo máximo y para poder recibir y absorber”.