La Justicia y la policía siguen buscando a Cristian “El Guachín” Monje, un ladrón de frondosos antecedentes penales que está acusado de ser el otro asesino del kiosquero Cristian Velázquez (50).

Con la imagen de su prontuario es que, precisamente, los efectivos de las distintas dependencias de la ciudad procuran dar con el prófugo más buscado en estas horas. Es que, ahora mismo, caen sobre él dos órdenes de captura: una era previa al homicidio del comerciante, ocurrido el lunes, mientras la otra fue dispuesta por el fiscal Alejandro Pellegrinelli, tras este hecho.

Por su parte, Ignacio Bustos Nieto, alias “Nacho”, se encuentra en Tribunales para declarar ante el investigador, quien cree que es, junto a Monje, el otro autor del intento de robo al que siguió el asesinato de Velázquez. El acusado pasó la noche en la Unidad Penal Nº 44 de Batán, luego de que su propia familia lo entregara a la policía en la puerta de su casa del barrio Pueyrredon, donde además se secuestró una motocicleta que será peritada para determinar si fue la que utilizaron en el asalto.

Según pudo saber LA CAPITAL, Busos Nieto fue detenido en Cuba al 3000. Mientas tanto, a Monje lo buscan uniformados de distintas dependencias por toda la ciudad y alrededores.

Cristian Velázquez había sido entrevistado por la prensa en varias oportunidades después de sufrir asaltos anteriores.

Los archivos judiciales indican que “El Guachín” había sido condenado a 6 años de prisión en 2020 por un violento asalto contra un padre y su hijo en la zona de González Chávez y San Salvador. En junio de 2019, acompañado por otros dos delincuentes, Monje interceptó a ambas víctimas cuando salían de la casa y tras reingresar al domicilio perpetrar el robo, el cual tuvo momentos de extrema violencia. El padre fue salvajemente golpeado, mientras cargaban su Fiat Palio con distintos objetos de valor.

Tras huir, “El Guachín” y sus cómplices incendiaron el Fiat en García Lorca y Friuli. Una huella dactilar suya en la vivienda permitió su identificación, detención y posterior condena.

El kiosquero Cristian Velázquez fue asesinado de un disparo en la cabeza este lunes a la tarde en Jacinto Peralta Ramos e Itala durante un asalto que cometieron dos delincuentes.

El homicidio es investigado por los fiscales Alejandro Pellegrinelli y María Constanza Mandagarán, quienes estuvieron presentes en el lugar, donde funciona la red de pagos Ripsa.

La víctima ya había sido asaltada entre cuatro y seis veces previamente. Esta vez, conforme los primeros datos obtenidos por los investigadores, dos delincuentes entraron al negocio donde trabajaba y le dispararon en la cabeza, después de que intentara resistirse con gas pimienta, como había hecho en abril del año pasado.

En esa ocasión, logró sobrevivir: “Sentí que me podían haber matado. Me salvaron los paquetes de chicle“, fueron las palabras de Velázquez a LA CAPITAL tras ese violento asalto sufrido en el mismo comercio, donde dos delincuentes le dispararon, sin llegar a herirlo, y huyeron.

Esta vez, el desenlace fue fatal y los ladrones escaparon sin consumar el robo, a bordo de una motocicleta de baja cilindrada. De acuerdo a las imágenes que tomaron las cámaras de seguridad, fugaron por la avenida Peralta Ramos y doblaron en Irala, donde las personas que se hallaban en el lugar los perdieron de vista.