Una mujer de 83 años fue víctima de una estafa telefónica cuando un delincuente se hizo pasar por un amigo de su nieto y le dijo que debía cambiar sus ahorros en dólares a pesos por disposición del Banco Central.

El caso, uno más dentro de la proliferación de engaños contra personas de avanzada edad, se produjo en horas de la mañana en una vivienda del barrio San Cayetano. Allí la dueña de casa atendió una llamada a su teléfono fijo y del otro lado de la línea un hombre joven que fingió ser su nieto. El diálogo, en el que la víctima no pudo advertir que el interlocutor era a la vez un simulador, transitó por la inconveniencia de tener los ahorros en dólares, ya que se avecinaban algunas medidas económicas desfavorables.

La mujer acordó entonces que le entregaría “sus ahorros” a un amigo de su nieto de nombre Fernando Díaz y minutos más tarde el encuentro se llevó a cabo en la puerta de la casa.

De acuerdo a la denuncia que ya tiene en su poder el fiscal David Bruna le víctima entregó 1.300 dólares sin dudar y horas más tarde al comunicárselo a su hija entendió que la habían timado.

A propósito de este hecho, tanto las autoridades policiales como judiciales alertan a la población para que no avance en conversaciones de esa naturaleza y que la principal forma de eludirla ante la mínima sospecha es cortar la comunicación. “Es raro que si a estos estafadores les  cortan, insistan en el mismo número”, dijo una fuente judicial.